Columnas > EL MURO S.A.
El PRI del no pasa nada
La autocrítica en el PRI no llega siempre por igual a todos.
Hoy, a diez días de la elección, las cosas ya se ven más frías, no aceptables, pero se busca asimilar.
Por ejemplo, el Presidente del PRI en Tamaulipas, Edgar Melhem, sabe la crisis que existe y lo que se viene.
Ya lo platicó con algunos de sus compañeros más cercanos la semana pasada. No quiere profundizar el tema con los medios y se entiende.
Pero él, sabe el juego en el que cayeron y cómo al final, les dieron la espalda.
Si alguien movilizó una estructura al viejo estilo y con efectividad, fue el PRI.
Edgar Melhem sabía lo que iba pasar, porque mucho antes de llegar a concretarse la alianza, conocía las condiciones del partido y de sus mismos aliados.
Por su experiencia, sabe lo que vendrá, no en los próximos meses, sino en los próximos dos años.
Es el 2024 la última prueba de fuego. Si el líder del PRI mantiene una política interna desde su partido, limitando a la clase trabajadora hasta regateando todo a sus estructuras, las cosas van a empeorar al interior.
Incluso, aquellos que piensan que Melhem va renunciar a la dirigencia, porque debería hacerlo, no va pasar así.
Se va quedar en la dirigencia y va empujar la posibilidad de ser él quien dirija los trabajos del Congreso desde la Mesa Directiva a partir del mes de Octubre.
Lo merezca o no, Melhem es el coordinador de la fracción y si no hay cambios a la ley interna del Congreso o un rechazo del PAN, el PRI estaría dirigiendo los trabajos en el próximo periodo del Poder Legislativo.
Sin embargo, quien tendría méritos e incluso, se le haría justicia por su temple que ha tenido, por la lealtad que ha demostrado como priista y el aprendizaje que ha logrado, es Alejandra Cárdenas, pero el ADN de Melhem, le podría impedir ese paso.
El priista está envalentonado, porque Alejandro Morena, ya advirtió a los ex dirigentes del CEN del PRI que él no se va hasta octubre del 2024, cuando vence su periodo como líder nacional.
Con ese mensaje, el resto de los dirigentes que vivieron las elecciones en sus Estados, seguramente se van a quedar en sus cargos, como va pasar en Tamaulipas.
Aquí, ya no hay nadie que le pueda reclamar algo a Melhem, porque no solo perdieron a sus críticos, sus ex dirigentes y ex líderes de sectores están con el PAN: Yahleel Abdala, Sergio Guajardo, Florentino Saenz, por citar algunos, porque otros más se fueron a Morena: Felipe Garza, Oscar Luebbert, Ricardo Gamundi.
Durante la gestión de Melhem, el PRI ha perdido la mayor cantidad de su membresía y posiciones... Principalmente por los escurrimiento que se han registrado hacia Morena los cuales se agravaron con la candidatura del doctor, Américo Villarreal, aunado a que otra buena cantidad de priistas fueron reclutados por su gandul aliado el PAN.
A consecuencia de esas pifias, el PRI quedó con la pura morralla, con pobre imagen ante el electorado que se expresa con escasos votos porque el partido perdió identidad y dejó de ser alternativa para los ciudadanos.
¿Así quién le puede reclamar la salida a Melhem de la dirigencia del PRI?
Por cierto que en la elección del 5 de junio, el PRI como partido sólo, obtuvo 57 mil 163 votos.