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´Makito´, Alcalde de medio tiempo...
Cuando veo tantos problemas por nuestra querida Reynosa y la mayoría hasta parecen sin solución, no pudo evitar reflexionar el que me resista a creer que cuando las cosas se ponen duras no hay nada mejor que invocar la ayuda divina. La cuestión es que ya tenemos más de una docena de años de padecer los problemas y nada que se resuelven.
Pero por otro lado hay un viejo adagio cristiano que reza: ayúdate que yo te ayudare, o bien, el no menos conocido: a Dios rogando y con el mazo dando. Cualquiera entiende el mensaje de ambos dichos.
El obstáculo es el de las autoridades que hemos venido padeciendo, que por cómo está la ciudad pareciera que hemos tenido puros ateos despachando en el palacio municipal, pero eso sí, cuando viene la temporada de elecciones, si son candidatos, son los primeros que acuden a la iglesia para pedir la ayuda de Dios, háganos el regrandísimo favor, para luego exprimir el presupuesto de la ciudad o bien para seguirlo exprimiendo como aconteció durante el Makiato, que no conforme con haberse despachado con la cuchara grande durante cinco años, todavía le heredó el trono a su hijo, una chamba que visto esta, nomás no la quería.
No es ya ningún secreto que por la presidencia municipal se aparece nomás por las sesiones de Cabildo y a veces, o bien se da vueltas fugaces por las colonias populares siguiendo los maliciosos consejos de La Jefa, que es sobar el lomo a los que menos tienen para granjearse la simpatía electoral. De plano que CARLOS PEÑA ORTIZ nunca se vio ni de rebote siendo presidente municipal de Reynosa.
De buena fuente sé que él lo que pretendía era ser candidato a diputado federal para codearse con los grandes de la política, nomás que La Jefa le dijo: no sabes lo que estas pidiendo, lo hizo candidato alcaldicio al estilo del "haiga sido como haiga sido".
Ya se imaginarán mis lectores de que medios se valió La Doña para convencer a MARIO DELGADO CARRILLO, el dirigente nacional morenista, de que lo hiciera candidato del MORENA.
Pero eso ya es historia, lo que cuenta es el presente y ese exige tener un alcalde de tiempo completo. La ciudad prácticamente hierve en problemas, el más grave, como es la inseguridad, aunque ya sabemos que para ese el ayuntamiento está de florero, pero hay otros problemas que debieran entrarles de frente y con decisión como los servicios de agua y drenaje.
En la COMAPA ya no se toman la molestia ni de informar, lo mismo cuando se va a suspender el servicio de agua potable que por cuales calles hay fugas de aguas negras con todo y que cuentan con un coordinador de comunicación social, que visto esta, es otro florero.
En el primero tal vez no avisan sabedores de que como ya regularmente no hay suficiente agua, el usuario ya no se da cuenta cuando es por suspensión del servicio o porque no hay agua. Así de jodidos estamos, mientras que las fugas de aguas negras en temporada invernal se multiplican y eso se solucionara reemplazando las viejas tuberías, pero en la COMAPA nadie quiere tocar ese tema por la sencilla razón de que no hay con queso para las enchiladas.
El Makito CARLOS PEÑA ORTIZ, en su calidad de presidente del Consejo de Administración del organismo operador de agua y drenaje tal vez mal informado reviró recientemente que el problema financiero de la COMAPA obedece a que hay huachicoleo del vital líquido apuntando hacia el rubro hotelero como uno de los practicantes.
Por supuesto estos ya lo negaron, a través de OMAR ELIZONDO, el presidente de la Asociación de Hoteles y Moteles de Reynosa, vaya usted a saber quién dice la verdad, lo que no hay duda es que la COMAPA tiene problemas de caja y eso solamente se da o porque no le están cobrando a todos los servicios o porque en efecto los grandes consumidores practican huachicoleo.
De ser cierto. esto último El Makito tendrá que fajarse y no andar con contemplaciones, pero para una cosa así se requiere que asista diariamente a Palacio Municipal aunque sienta que solamente que está perdiendo el tiempo porque ahí nomás lo van a ver las mujeres latosas de las colonias, que si fuere así, que se aguante, gracias a ellas logró ganar la elección alcaldicia pero aparte de latosas hay otros problemas que requieren su presencia y esa es diaria, no solamente cuando quiera darse una vuelta para despistarle.
Por ello que sorprende el que se escuden en la religión cuando traen proyectos políticos con lo que denotan que creyentes no lo son, o son de los llamados católicos o cristianos convenencieros independientemente de que también tenga que alternar con los representantes y pastores de todas las agrupaciones religiosas, que, dicho sea de paso, en forma ordenada y por lo mismo sin causar problemas contribuyen a la paz social. Eso es algo que CARLOS PEÑA ORTIZ debe ponderarlo en toda su dimensión.
No tiene policías preventivos gracias al Makiato, pero bien puede practicar política de prevención y en esa actividad las iglesias de las diversas religiones aportarían un invaluable respaldo social, finalmente todas las religiones difunden hacer el bien y no andar por caminos errados.
Por lo mismo en ellos podrá encontrar valiosos colaboradores para la llamada paz social, todo es cuestión de que se ponga a platicar con ellos, no va a perder el tiempo, al contrario, le aportarán ideas e intenciones de bien, es cosa de que le piense y si no le gusta la chamba de alcalde bien puede pedir licencia y colorín colorado, pero ya se sabe que eso es algo que nunca se verá. Dejar los ingresos que devienen de ejercer el presupuesto es un hábito que, en Reynosa, como en otras ciudades ya es tradición, así diga el presidente López Obrador lo contrario, ideas que ni su propia familia comparte, pero él esta terco en convencer que en la 4T ya no hay moches, nomás que hasta los niños ven que esa práctica sigue vigente así se trate de un panista priista o morenista, que le vamos a hacer.
Pareciera que no hay forma de impedir que conveniencieros o ambiciosos arriben al servicio público.
Siguiendo con problemas urbanos, vaya que se las vieron duras los migrantes que están asentados en la plaza de la República, pero varios de ellos ya dijeron que de ahí no se moverán. Ya sienten que ese lugar es patrimonio de los migrantes.
Alguien debe decirles que aparte de no tener derecho deben agradecer que los gobiernos mexicanos les estén construyendo un lugar adecuado para vivir mientras logran cruzar hacia los Estados Unidos de Norteamérica, pero están tercos en la intención. Los argumentos no son nada sólidos.
Tendrá el gobierno que emplear la fuerza pública para transportarlos al albergue que está en vías de terminación.
Y por hoy, BASTA
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