Garrotazo Jurídico

Desde la tarde de ayer circuló profusamente la información de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación había rechazado la controversia que promovió el Congreso del Estado en contra de la Cámara de Diputados, según se dijo, por notoriamente improcedente, lo que en el argot jurídico,  se conoce como todo un garrotazo, que es lo que se dice cuando a un abogado le desechan una demanda sin entrar al estudio porque de entrada se nota que es improcedente, algo así como dicen en el rancho: los diputados locales no alcanzaron a montar el caballo

Y con ello viene la especulación, una que FRANCISCO GARCÍA CABEZA DE VACA se va de gira a Estados Unidos y Canadá para promover la inversión en Tamaulipas y con el rango de gobernador porque casualmente su abogado ERNESTO AGUILAR ZINZER, previo al garrotazo jurídico declaro a medios nacionales que mientras el Congreso del Estado no le retirara el cargo de gobernador, él seguía ostentando esa personalidad. Y con eso de que las sesiones tanto de la Cámara de Diputados como de la Suprema Corte de Justicia no tienen alcance extra territorial sino solamente en el interior de nuestra República Mexicana, eso me hace suponer que va a seguir la boruca porque de acuerdo a Zinzer y si es que los diputados locales se montan en su macho, García Cabeza de vaca seguirá siendo gobernador en el extranjero, un galimatías jurídico que en mi personal enfoque no le veo efecto práctico.

Me suena a presidentes que huyen de su país y en el exilio se siguen ostentando con esa investidura como pasó con un presidente de España que huyendo del franquismo se cobijó en México y aquí le rendían los honores correspondientes.

Pero eso ya es cosa de diplomáticos y habrá que ver si Estados Unidos o Canadá reciben a García Cabeza de Vaca en su calidad de gobernador exiliado.

Pero mientras tanto los diputados locales tendrán que efectuar una asamblea extraordinaria para elegir el gobernador sustituto si es que no se los mandan del Senado de la Republica ante lo que consideren un desacato.

De ahí que para los cabecistas lo más saludable es que mejor ellos designen a uno de la oficialidad y no estar cocoreando al diablo para que sea la Cámara Alta la que se tome esa atribución.

Y mientras deciden, ya la especulación gira sobre quien podría ser el sustituto.

Por sentido común pienso que el adecuado será GERARDO PEÑA FLORES. Su obstáculo es que anda en plena campaña para diputado federal pero ya será cuestión de que estudien bien a bien si puede protestar el cargo como gobernador y seguir participando en la elección, que si la gana a una de las dos comisiones tendrá que renunciar. Supongo que será la de diputado para entrarle de lleno a la gobernanza que no va a ser muy sedita que digamos, al contrario, habrá trompicones, desencuentros y hasta soponcios para salir adelante, y si no al tiempo.

FRANCISCO GARCÍA CABEZA DE VACA apenas la mañana de ayer reapareció en público, en vivo y en directo, en su centro de trabajo: el palacio de gobierno de Ciudad Victoria. 

Se le vio tranquilo y en conferencia de prensa, tras de anunciar que haría una gira de trabajo por Estados Unidos y Canadá para buscar mayor inversión a nuestra entidad, urgió a la Suprema Corte de Justicia de la Nación resolver el caso de la controversia contra su desafuero, presentada por el Congreso del Estado, petición, que según se vio la tarde de ayer, la atendieron, aunque, obvio, con un resultado que él no deseaba.

Y con lo anterior, pasó a segundo término el incidente ocurrido en el interior de la colonia Los Leones, en donde supuestamente tiene su domicilio tanto la alcaldesa MAKI ORTIZ como su hijo CARLOS PEÑA ORTIZ. El que radique por ese rumbo no es tema, finalmente es público y notorio que la jefa antes de serlo contrajo matrimonio con CARLOS PEÑA GARZA que desciende de una familia acaudalada.

No hubiera trascendido a no ser porque la propia Maki, vía twitter denunció que afuera de su domicilio estaban varios policías ministeriales sin explicar que pitos andaban haciendo, lo que ella lo tomó como un acto de intimidación por parte del gobierno del Estado, una suposición que en mi personal enfoque no tiene peso por la sencilla razón de que los policías cuando van a un lugar o andan investigando o haciendo una notificación y en el peor de los casos tratando de ejecutar una orden de aprehensión.

No dijo la alcaldesa si se comunicó con el Fiscal General de Tamaulipas, IRVING BARRIOS MOJICA, para que le informara a que obedeció la presencia policiaca, que por otro lado en un evento político también le hicieron sombra a CARLOS PEÑA ORTIZ con la presencia de policías ministeriales. El Makito recibió el pitazo, y canceló su asistencia a pesar de que era un evento proselitista.

Hasta donde sé, la cita que tiene en el juzgado penal de San Fernando es el lunes, a las once horas, que no sé porque traigo la corazonada de que no se va a presentar, y entonces si, en caliente el Ministerio Público le pedirá al juez le gire una orden de cabrito, como se le conoce en el argot policiaco a las ordenes de aprehensión.

Pero independientemente de las suposiciones, el asunto de CARLOS PEÑA ORTIZ está llegando a su límite: o se presenta y ahí mismo lo deja detenido como le han hecho en otros casos, o de plano tendrá que poner pies en polvorosa para buscar la justicia de los jueces federales.

En una conferencia de prensa dijo tener plena confianza en estos jueces. No menciono nada de los de fuero común, y ni falta que hizo, es obvio que con ellos no quiere ir ni a la esquina.

Pero por otro lado el reclamo de la alcaldesa, en donde como dirían en las telenovelas románticas, con lágrimas en los ojos, expuso el miedo que se experimenta por estar afuera de la casa sujetos armados, así digan que son agentes de la ley. Esto debiera servirle para que vea lo que se siente cuando el ciudadano tiene gente extraña merodeando por el domicilio, llama al 066 o al 911 y hagan de cuenta que le hablaron a la tapia. Eso sí que es tener miedo.

A Maki en todo caso le pudo causar extrañeza ver empistolados frente a su casa, así sean agentes de la ley, pero no creo le hayan infundido miedo esa presencia. Es público y notorio que ella desde que sale de su casa y regresa, lo hace en compañía de escoltas y todavía deja en su casa una guardia por aquello de que algo se ofrezca, lo que me hace suponer que cuando fueron los policías investigadores no se encontraba en su domicilio. De haber estado, la escolta que siempre trae les hubieran preguntado que andan haciendo y estos agentes de la Ley responden que no pueden informar, pues a tomar las precauciones correspondientes.

Pero como Maki no estaba en su casa no pudo saber a qué pitos se debió la presencia policial que hace suponer que están subiendo de tono, nomás que no deben perder de vista que el hijazo de su vidaza está pendiente de acudir a un juzgado penal que, si persiste en su afán de no hacerlo, lo van a buscar para detenerlo en donde lo encuentren, así vaya saliendo de la iglesia.

En pocas palabras, el incidente sirvió para que Maki comprenda lo que el ciudadano común experimenta cuando hay gente, ya no digamos armada sino extraña afuera de la casa.

Y por hoy, BASTA

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