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Y a ellos, ¿quién los ayuda?

Cuando la amistad fuerte llega más allá de la muerte y cuando el amigo leal, más que en el bien te acompaña en el mal, así es como familiares de desaparecidos realizan las búsquedas de sus seres queridos. Igual bajo un sol abrasador que de la lluvia ahogante, en un calor sofocante, como en un frío congelante.

Tan sólo es de recordar que en nuestra ciudad, en las recientes fechas, la Comisión de Búsqueda realiza al menos excavaciones en cuatro fosas encontradas en los últimos meses en diferentes puntos de la ciudad, dos de ellas en el tramo conocido como El Murillo, en la zona de la Ribereña; otra en la salida a San Fernando, una más en la salida a Monterrey y una en el rancho Benavides.

Y a ellos, ¿quién los ayuda?

 Pero esto es apenas la punta del iceberg, ya que tan sólo en lo que va de este sexenio, más de dos mil 700 fosas han sido localizadas en todo el país, datos dados a conocer por la Comisión Nacional de Búsqueda, pero sobre todo, en Veracruz, entidad que ocupa por encima de nuestro estado el primer lugar históricamente en hallazgo de fosas clandestinas.

Aunque México ocupa el segundo lugar a nivel mundial, con un promedio de 26 personas desaparecidas diariamente, Irak es el primero, aunque hay que señalar que este país se encuentra en guerra. Pero Tamaulipas no es la excepción, ya que ocupa la segunda posición a nivel nacional, tan sólo por debajo de Jalisco.

Aunque en Reynosa no han localizado un campo de exterminio tan grande como "La Bartolina", en donde encontraron más de 500 kilos de restos óseos y donde se presume todavía hay más de dos mil cuerpos sin desenterrar; o como el de "La carretera de la muerte", en donde las autoridades encontraron tambos de plástico, mejor conocidos como los "tambos calientes"; o como el ubicado en El Mante, en donde también han hallado una gran cantidad de restos óseos, esperamos que menos vayan a localizar una fosa tan grande como las de Colinas de Santa Fé o El árbolito, en Veracruz.

Como quiera que sea, en nuestro país existen más de cuatro mil fosas y hasta mediados del 2022 la cifra podría ser de más de cien mil desaparecidos en todo el país. En nuestra ciudad han sido localizados restos óseos en los cuatro puntos cardinales, tan sólo basta recordar el más reciente hallazgo en el ejido El Porvenir.

En su mayoría, las víctimas que son buscadas por sus familiares, no tenían que ver con asuntos de delincuencia; algunos buscaban el sueño americano, unos habían salido a divertirse, otros a trabajar o de paseo. Lo que sí es de señalar es que estuvieron en el lugar equivocado, a la hora equivocada.

He tenido la suerte de dialogar con muchas de estas buscadoras de desaparecidos; las condiciones en las que realizan los rastreos, en verdad, son de alto riesgo, sin los insumos necesarios ni las herramientas adecuadas, la mayoría olvidada por las autoridades.

En el más reciente hallazgo, las buscadoras estaban armadas tan sólo con machetes, talaches, pala y una herramienta para detectar la blandeza del suelo, y fueron resguardadas solamente por dos elementos de la Guardia Estatal a bordo de una patrulla, esto unos días después de que un comando a bordo de seis vehículos rescató al menos a cuatro personas que habían sido interceptadas por las autoridades y las cuales habían sido detenidas.

Como si hubiera sido ayer, aún recuerdo las nueve horas en las que fui privado de mi libertad, la antesala de la desaparición forzada; aún con miedo salgo a la calle a trabajar. ¿Cuándo terminará esta violencia?, pero sobre todo ¿cuándo habrá un verdadero estado de derecho?

Porque si la vida te da limones...