EL PODER NO SE COMPARTE

Como lo saben mis lectores, en la semana que laboralmente hoy concluye, estuvo pletórica de noticias políticas. La más relevante fue que el MORENA registró como su precandidato a AMÉRICO VILLARREAL ANAYA y el PAN, en breve inscribirá a CÉSAR VERÁSTEGUI OSTOS.

En ambos casos no hubo sorpresas, lo que sí sorprendió es que hayan atraído a GERARDO PEÑA FLORES de su comisión en la Cámara Baja del Congreso de la Unión para enviarlo a relevar a ‘’El Truco’’.

Su desempeño en la Secretaría General de Gobierno será fundamental para que las relaciones entre los partidos sean tersas, todo un paquete que tiene ante sí, pero Gerardo, a fe mía tiene recursos para la comisión conferida.

Por lo pronto, el PAN demuestra que va con todo para retener la gubernatura y aquellos que aseguraban la victoria del MORENA con cualquiera de sus prospectos, hoy no pocos de ellos ya le están metiendo reversa al ver los movimientos que viene realizando el comandante en jefe de los panistas tamaulipecos, que no es otro que FRANCISCO GARCÍA CABEZA DE VACA.

Al tiempo, se consolidan las coaliciones, aunque Movimiento Ciudadano no se suma a ninguna de las dos ni tampoco cambiará de prospecto para la candidatura a gobernador, al menos así lo han dicho tanto JUAN CARLOS ZERTUCHE ROMERO como GUSTAVO CÁRDENAS GUTIÉRREZ, los dirigentes del partido naranja en Tamaulipas.

Por su parte, MANUEL MUÑOZ CANO, para desbaratar rumores, declaró que el Verde Ecologista formará parte de la coalición MORENA–PT, y con ello dejaron colgada de la brocha a la exalcaldesa reynosense, MAKI ORTIZ DOMÍNGUEZ, aunque habrá que decirlo, ella nunca dijo ni en público ni en privado que estaba en tratos para la candidatura por otro partido político, en cambio sí afirmó que no va a soltar el recurso que interpuso hasta, como dirían los clásicos del periodismo policiaco, sus últimas consecuencias.

Es comprensible la actitud, la doña ya acusa los efectos de la ausencia del poder que viene siendo como un castigo divino para todos aquellos que hicieron mal uso de la autoridad que detectaron. En cuanto la pierden, comienzan a bambolearse y a proferir disparates. 

Las personas cuando pierden el poder, algunos hasta se salen de sus cabales y sí mucho me apuran diría que la gran mayoría.

Son contadísimos los que se prepararon para dejar de ser, por eso luego vienen los desfiguros que derivan en posiciones que van de lo patético a lo ridículo.

Definitivamente, es un castigo divino. Maki ya está sintiendo los efectos de no tener poder, aunque algunos dirán que seguirá metiendo las manos en el palacio municipal pero falta que la dejen. La gratitud no llega a tanto, así se trate de un hijo, hermano o cónyuge por la simple y sencilla razón de que el poder no se comparte.

Y entre todo ese barullo en el mundo de la política, se escuchó la voz de la regidora priista MARÍA ESTHER CAMARGO FÉLIX quien en forma clara para no dejar a dudas expresó allá en Ciudad Victoria que en lo personal no simpatiza con la coalición PRI–PAN, una posición que la hace ver como una política fiel a sus convicciones. Agregó que seguirá siendo priista y sirviendo desde su trinchera en el cabildo reynosense.

No dude usted que esa declaración de María Esther sea el arrancador para que otras figuras del priismo decidan no formar parte de la coalición la que ahora si buscó por todos los medios la dirigencia del Partido Acción Nacional.

Les caló y hondo perder siete de las ocho alcaldías más importantes del Estado, así como la mayoría en el Congreso del Estado, y todo por haber menospreciado la oferta tricolor de coaligarse para las elecciones de junio del año pasado.

Andaban sobre valorados los albiazules por los resultados que obtuvieron sus candidatos en las elecciones para diputados locales en junio del 2019 en las que ganaron en 21 de los 22 distritos. Con ese aplastante resultado no pensaron tener necesidad de recurrir a los guajes tricolores, pero en los hechos los marrones los derrotaron, como ya lo dije, en los principales municipios y ganándoles la mayoría en el Congreso del Estado.

Aun así, en esas elecciones de junio del año pasado no fue tan catastrófico el resultado habida cuenta que la coalición MORENA-PT obtuvo en números redondos 541 mil votos y los del PAN, 495 mil.

Estamos hablando de una diferencia de 46 mil sufragios que, si en mil que hubieran sido, si hubieran aceptado en alianza a los priistas que obtuvieron en números redondos 127 mil votos, a estas alturas la coalición PRIAN estaría cantando y cociendo en el trayecto a junio próximo.

Pero eso ya es historia, ahora los candidatos, tanto de la coalición PRIAN -- PRD como MORENA -- PT -- Verde, deben ir cocinando como poder obtener mínimo unos 750 mil sufragios en atención a que el padrón electoral en números redondos consta de dos millones 700 mil votantes, que si ocurren a las casillas la mitad de ellos, estamos hablando de que habrá un millón 350 mil votos, de ahí que pensar que con 750 mil votos se puede ganar es andar bailando en la cuerda floja habida cuenta que hay un factor que no está muy claro y este es cuantos votos obtendrá el candidato del Movimiento Ciudadano que podría convertirse en el fiel de la balanza tomando en cuenta que es a lo mínimo que puede esperar por haber ganado la gubernatura en Nuevo León.

No se sabe que tanto va a filtrar por Tamaulipas la corriente política naranjista neolonesa, pero de que va a jalar no tengo duda como tampoco sería sorpresa que se apareciera por Tamaulipas altiva y heroica SAMUEL GARCÍA y su cónyuge Mariana, para darle un empujoncito al candidato naranjista.

Así a la instancia creo que van sobre 150 o 200 mil votos, que, si los obtienen, será el puntillazo definitivo para el PRI a no ser que la mayor parte de esos votos se los arrancará al MORENA.

Hay mucha tela para la suposición por delante y yo espero que la elección marche dentro de la civilidad, aunque ya se escuchan voces en el sentido de que habrá cocolazos en donde se verá un combate entre un técnico contra un rudo

Y por hoy, BASTA.

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