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Una utopía. ¿O no?

UTOPÍA: Algo optimista, que parece como un sueño irrealizable.

En las películas de extraterrestres que veía en mi infancia, era muy clásica la escena en donde llegaban estos seres en sus naves intergalácticas con la intención de conquistar y dominar la Tierra, colocaban la nave sobre alguna gran ciudad y, desde ahí, se escuchaba una voz que decía: "Atención, atención, esta es la nave XZ40 llamando a la Tierra" y luego daban sus instrucciones para que los pobres terrícolas nos sometiéramos, para evitar ser destruidos.

Una utopía. ¿O no?

En mis locas divagaciones, a veces imagino qué pasaría si algún día escucháramos desde el espacio una voz que nos dijera: "Atención, atención, este es el amor llamando a la Tierra". Y nos diera sus instrucciones para dejarnos conquistar y dominar por él. Tal vez nos diría algo como esto:

Mensaje del amor

"Terrícolas, yo soy la fuerza por la cual se creó este planeta para ustedes.

Fueron enviados aquí para ser felices, y ciertamente, no con la promesa de que solo podrían serlo cuando estuvieran exentos de problemas, sino con la capacidad de poder serlo, a pesar de los problemas que a cada uno, dentro de un plan perfecto, le correspondiera llevar. Y eso sí, con la promesa de que si me tomaban por aliado, las cargas les parecerían más llevaderas y la felicidad estaría más a su alcance.

Cada uno de ustedes fue enviado con un don único, que al encontrarlo, le permitirá embellecer su vida y la de los que lo rodean. Pongan amor en todo lo que hacen y les prometo que tarde o temprano encontrarán ese don. Al hacerlo, su vida dará un giro maravilloso, pues terminarán haciendo lo que aman, y quien esto hace, está benditamente condenado al éxito.

Amen este planeta. No lo ensucien, no lo contaminen más. Fue hecho para ustedes, pero a veces ustedes parecen ser los únicos extraterrestres aquí. Ningún otro ser vivo agrede o afecta su hábitat como lo hacen los humanos.

No peleen entre ustedes. Es curioso ver cómo las diferencias desaparecen cuando la amenaza crece. Los miembros de una familia que pelean entre sí, se unen cuando hay algo que amenaza a toda la familia. Los miembros de diferentes ciudades que a veces se ven como enemigos, se unen cuando algo amenaza a todo el país. Y cuando hay catástrofes que asolan a una determinada región del mundo, todos los hombres se unen para ayudar a la gente de ese lugar. ¿Para qué esperar a que haya catástrofes? ¿No podrían considerarse todos como miembros de un mismo equipo llamado HUMANIDAD? Y si muestran apoyo y solidaridad a personas que están padeciendo algo al otro lado del mundo, ¿no podrían mostrar lo mismo a la persona que duerme bajo su mismo techo, al compañero que trabaja en la misma empresa, al hermano que nació en su mismo país?

Ustedes son espíritus divinos viviendo una experiencia humana. Aprovechen esta oportunidad única. Vivan de tal manera que cuando regresen a acá arriba y vean su vida en retrospectiva, no tengan que decir: ´¿Cómo pude haber sido tan torpe para haber hecho eso mientras estuve allá en la Tierra?´

Así que, para evitar ser destruidos, no por nadie más, sino por ustedes mismos, es necesario que me permitan entrar en su corazón y me den albergue permanente."

El llamado y la invitación

La utopía no es pensar que algún día recibiéramos ese llamado. Ese llamado lo recibimos todos los días cuando vemos salir el sol, cuando el viento acaricia nuestro rostro, cuando nace un niño, lo cual nos demuestra que Dios y el amor siguen teniendo fe en nosotros.

La utopía sería pensar que realmente un día todos nos dejásemos conquistar y dominar por el amor. No sé si tendré la bendición de ver que algún día eso suceda. Lo que sí sé es que puedo decidir hoy empezar con mi propio corazón, con mi propia vida, en mi propio entorno.

El amor está llamando a la Tierra, hoy más que nunca, y necesita "repetidores" que le ayuden a difundir ese llamado. Atiende sus exhortaciones, déjate dominar por el amor, y tu vida será entonces el mejor "transmisor" de su mensaje.