Una breve guía sobre el moho en el lugar de trabajo
La preocupación por la exposición al moho en interiores ha aumentado junto con la conciencia pública de que la exposición al moho puede causar una variedad de efectos y síntomas en la salud, incluidas las reacciones alérgicas. Estas recomendaciones describen las medidas diseñadas para proteger en la limpieza y prevención del moho.
Al leer esta información las personas con poca o ninguna experiencia en la eliminación de moho pueden juzgar razonablemente si la contaminación se puede manejar internamente o si se requiere asistencia externa.
Siempre se debe buscar el consejo de profesionales.
La información contenida en estas pautas solo pretende ser un resumen de los procedimientos básicos y no pretende, ni debe utilizarse, como una guía detallada para la eliminación del moho.
Los mohos son hongos que se pueden encontrar en cualquier lugar, dentro o fuera, durante todo el año. Se pueden encontrar alrededor de un mil especies de moho en los Estados Unidos, con más de 100 mil especies conocidas en todo el mundo.
Al aire libre, el moho juega un papel importante en la naturaleza al descomponer la materia orgánica, como los árboles caídos, las hojas caídas y los animales muertos. No tendríamos alimentos y medicinas, como queso y penicilina, sin moho.
En interiores, se debe evitar el crecimiento de moho. Pueden surgir problemas cuando el moho comienza a devorar los materiales, afectando la apariencia, el olor y posiblemente, con respecto a los edificios con estructura de madera, afectando la integridad estructural de los edificios.
El moho puede crecer en prácticamente cualquier sustancia, siempre que haya humedad o agua, oxígeno y una fuente orgánica. Los mohos se reproducen creando esporas diminutas (semillas viables) que normalmente no se pueden ver sin aumento. Las esporas de moho flotan continuamente en el aire interior y exterior.
El moho generalmente no es un problema a menos que las esporas de moho caigan en un lugar húmedo y comiencen a crecer. Digieren todo lo que aterrizan para sobrevivir. Hay moho que crece en la madera, el papel, las alfombras, los alimentos y el aislamiento, mientras que otros mohos se dan un festín con el polvo y la suciedad cotidianos que se acumulan en las regiones húmedas de un edificio.
Cuando se acumula humedad o agua en exceso en el interior, a menudo se produce el crecimiento de moho, especialmente si el problema de la humedad no se corrige. Si bien es imposible eliminar todo el moho y las esporas de moho, controlar la humedad puede controlar el crecimiento de moho en el interior.
Todos los mohos comparten la característica de poder crecer sin luz solar; el moho solo necesita una semilla viable (espora), una fuente de nutrientes, humedad y la temperatura adecuada para proliferar. Esto explica por qué la infestación de moho se encuentra a menudo en espacios húmedos, oscuros y ocultos; la luz y la circulación de aire secan las áreas, haciéndolas menos hospitalarias para el moho.
El moho daña gradualmente los materiales de construcción y el mobiliario. Si no se controla, el moho eventualmente puede causar daño estructural a un edificio con armazón de madera, debilitando los pisos y las paredes a medida que se alimenta de elementos estructurales de madera húmedos. Si sospecha que el moho ha dañado la integridad del edificio, consulte a un ingeniero estructural u otro profesional con la experiencia adecuada.
Dado que el moho requiere agua para crecer, es importante evitar la humedad excesiva en los edificios. Algunos problemas de humedad en los edificios se han relacionado con cambios en las prácticas de construcción de edificios desde la década de 1970, lo que resultó en edificios herméticamente cerrados con ventilación reducida, lo que contribuyó a la acumulación de vapor de humedad.
La seguridad y la salud en el lugar de trabajo son responsabilidad de todas las personas, así que debemos tomarlas en serio. Contáctenos si tiene preguntas o si quiere presentar una queja. La información que nos proporcione será tratada como confidencial. Estamos aquí para ayudar. Puede llamar a nuestra línea directa, al 623-OSHA (6742) o al 299-0300 ext. 2163, o enviar un fax al 623-5905 o al 653-6563.
