Morena y su ´calma chicha´

Mario Delgado.

El dirigente en el país del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), MARIO DELGADO CARRILLO, ha venido insistiendo en el llamado a la unidad en Tamaulipas.

Precisamente en nuestro estado, una y otra vez, quienes compiten por la candidatura a la gubernatura, han hecho eco del llamado de su Líder nacional, convocando a evitar una guerra de lodo.

En su momento, el coordinador para la Defensa de la Cuarta Transformación (4T), JOSÉ RAMÓN GÓMEZ LEAL mencionó la importancia de "no pelearse".

Esas palabras tuvieron eco en el delegado de Programas Federales para el Desarrollo de Tamaulipas, RODOLFO GONZÁLEZ VALDERRAMA, quien ha venido insistiendo en el llamado a la unidad.

Además, el senador de Morena, AMÉRICO VILLARREAL ANAYA, también se ha sumado a las palabras de su dirigente DELGADO CARRILLO y sus compañeros "JR" y VALDERRAMA.

Pero no sólo los mencionados han convocado a la unidad, pues recientemente el diputado federal, ERASMO GONZÁLEZ ROBLEDO, reconoció que la "guerra de lodo" estaba a todo en su partido, debido al proceso que se vive en busca de la candidatura a la gubernatura.

Las damas morenas, como la alcaldesa de Nuevo Laredo, CARMEN LILIA CANTUROSAS VILLARREAL, también han hecho lo propio, muy a su estilo y circunstancias, convocando a guardar la artillería para otra ocasión.

El viejo lobo de mar, FELIPE GARZA NARVÁEZ, quien vivió en carne propia severos conflictos cuando fue militante del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y ahora busca ser candidato de Morena, sabe bien lo que la desunión provoca a un proyecto, por lo que también ha venido haciendo el llamado a la unidad.

Sólo que, como todo en la vida, hay un pero... Y Morena no sólo recibió la documentación de una decena de importantes personajes en la vida política del estado y el país, sino que el registro estaba "copeteado".

Son 38 el número de registrados; algunos de ellos completamente desconocidos en el ámbito estatal. El abultado número podrá causar risa, tomarse como anécdota; pero evidencia dos aspectos claros:

(1) Los aspirantes de Morena llegaron al registro "desunidos", sin brújula, sin reconocer a quiénes realmente son los fuertes aspirantes para competir por tan delicada posición y de ahí el abultado número.

(2) Les están metiendo "goles", pues en el registro hay varios infiltrados que desde "parcelas enemigas" entregaron la documentación para encender, llegando el momento, la chispa de la discordia; sólo a eso fueron... Punto y aparte...

No faltan a la verdad quienes aseguran que sólo la unidad puede sacar un proyecto adelante, el que sea. Pero el simple hecho de mencionar la palabra unidad, no da por sí mismo el resultado esperado, aunque sí deja la puerta abierta para ello.

Hablar de preferencias electorales hacia una marca, un color, un partido o una persona, todavía es muy aventurado; pero la verdad es que competir contra un adversario cuando tienes tus "intestinos" plagados de conflictos, entras en desventaja a esa pelea.

La diferencia de Morena y el resto de los partidos políticos, es que está conformado por dos alas completamente opuestas: los moderados y los ultra-radicales; son éstos últimos los peligrosos.

A los ultra-radicales les gusta el escándalo, adoran ver correr la sangre y desprestigiar al adversario; su arena de combate son los medios de comunicación y las redes sociales, de manera que si no son controlados pueden quemar su casa por el simple placer de que el fuego alcance la casa del vecino...

Cada proceso electoral es distinto y el próximo año los "efectos" que dieron empuje en el 2016 y 2018 no llegan con la misma fuerza e incluso desgastados o nulificados.

Alguien en Morena deberá hacer lo que hacían las abuelas cuando no tenía para darles a llenar a todos sus hijos, partían el bolillo de forma equitativa para que todos estuvieran contentos, aunque sin estar completamente satisfechos.

Son 38, que se reducirán a cuatro para después ungir al candidato y Morena tiene verdaderos "pesos pesados" que, si no se ponen de acuerdo, la casa se caería antes de edificar los cimientos...

Una casa (y menos un proyecto político), no puede ser construida en arena movediza, sólo que en Morena no han tenido tiempo de fincar las bases en roca sólida...

Los marineros le llaman "calma chicha", a esa quietud que se presenta en el viento cuando se está en una mar carente de olas; fenómeno que se presenta antes de que se desate una tormenta... ¿Estará viviendo Morena una "calma chicha" o no...? Pendientes...

GRACIAS... Nos leemos hasta mañana

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