Ley de Comunicación Social

Con eso de que el ruido por el plan "B" como se le conoce a la reforma de la ley electoral, prácticamente cubrió en medio de las tinieblas a la Ley General de Comunicación Social, los medios se quedaron, como dicen en el rancho, chiflando en la loma porque la citada legislación fue aprobada a fines de diciembre pasado y hoy ya está en plena vigencia sin que nadie la hubiese impugnado, y ahora los gobiernos estatales y municipales tienen un problemón marca diablo porque van a tener que reducir sus gastos de prensa en forma mucho muy notoria.

Lo anterior dejará fuera de la ubre a los portaleros, feisbuckeros y huachicoleros del periodismo que han encontrado en los departamentos de prensa un cómodo modo de vivir la vida.

Resulta que la Ley de Comunicación Social impone como obligación que las instancias tanto federales como estatales y municipales no deberán gastar en prensa, radio y televisión más que el 0.1 por ciento de su presupuesto. Eso mete en aprietos a los ayuntamientos y a gobiernos estatales que gastan excesivamente en medios de comunicación.

Ahora tendrán que reducir, como ya lo dije, ese gasto, aunque por otro lado si lo que autorizan como publicidad es solamente en medios de comunicación formales, y por formales digo que tengan instalaciones y oficinas, y que justifiquen que en efecto si se trata de periódicos con circulación aceptable.

En los casos de noticieros de radio y televisión, que estos tengan audiencia, y no se diga de los portales digitales que abundan por Tamaulipas altiva y heroica y salvo dos que tres de ese tipo de medios, los demás ni ellos mismos los leen.

Lo mismo va para los feisbuckeros que en sus muros se ve que tienen en promedio de 20 a 40 likes y algunos ni eso, pero todo obedece a la manga ancha con que gastan municipios y gobiernos en medios de comunicación que no revisten tener esa forma, aparte de que algunos jefes de prensa se despachan con la cuchara grande incrustando en los convenios a huachicoleros del periodismo o de plano, fantasmas con convenios estratosféricos, lo que hace suponer que en realidad se trata de negocios personales de los mismos directores o coordinadores de comunicación social.

Ahí tiene mucho que investigar la contraloría del gobierno del Estado, pero por lo pronto ya algunas administraciones municipales de filia panista anunciaron que promoverán un amparo en contra de la Ley General de Comunicación Social por invadir la autonomía de los municipios.

Por el lado de las administraciones morenistas hasta ayer nadie ha levantado la mano. Lógico, no le van a dar la contra a una ley que se promulgó a instancia del jefe de jefes de los marrones que no es otro más que ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR.

Por su parte el columnista considera que la Ley de marras no afectará a los auténticos medios de comunicación porque no dependen al 100 por ciento de la publicidad oficial, como sí sucede con el, a ojo de buen cubero, el 90 por ciento lo mismo de periódicos que estaciones de radio, y no se diga de los portales digitales, similares y conexos.

Por lo mismo el gobierno estatal como el municipal con aplicar correctamente el gasto de prensa, o séase en los medios de comunicación dignos de llamárseles así, con el 0.1 por ciento del presupuesto tendrían para cubrir los compromisos, pero hay muchos intereses de por medio, no se trata solamente de gastar en prensa. Hay cosas muy enredadas que ameritan investigaciones y que finalmente pongan las cosas en su lugar.

Vamos a estar al pendiente de los efectos que por Tamaulipas genere la Ley General de Comunicación Social, que como ya lo dije, ya está en vigor y como las principales ciudades de Tamaulipas, con excepción de Tampico, son gobernadas por morenistas, así como el gobierno estatal, es de suponerse que no le jugarán a las contras a la mencionada Ley por provenir de quien proviene, mientras ya hay reclamos, pero solamente de las administraciones de filiación panista.

Por otro lado, se le hace bolas el engrudo al rector de la UAT, GUILLERMO MENDOZA CAVAZOS, todo por no observar la normatividad en el proceso de su elección.

Hicieron a un lado a la doctora LUISA ÁLVAREZ CERVANTES, cuando pretendió registrarse como candidata, pero no contaron con que iba a recurrir a la justicia federal que de entrada ya trae contra la pared al rector y a sus paniaguados.

Para este 21 de febrero, en el juzgado segundo de distrito con sede en Ciudad Victoria está citado el rector de la UAT para que alegue lo que tenga que alegar sobre lo que denunciaron en el sentido de que mediante chanchullos se ungió como rector de la UAT.

Regresando al tema de las leyes, el presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR anunció que vetará la disposición legal que autoriza aumentar las multas cuando se injuria al presidente por estimar que eso sería un atentado a la libertad de expresión.

La reglamentación se denomina Ley sobre Delitos de Imprenta, que fue propuesta de la fracción morenista, la cual ya fue aprobada. Contempla multas de mil a 4,149 pesos por injuriar al presidente.

Si la llegaran a aplicar, se empacharían por la verdad conocida de que AMLO a diario es objeto de toda clase de injurias como los recordatorios maternales porque si bien un 60 por ciento de la ciudadanía lo respalda, hay un 20 por ciento de los que no lo pueden ver ni en pintura mientras que al 20 por ciento restante le viene guango lo que haga o deje de hacer.

Y por Tamaulipas, a quien también se le hace bolas el engrudo es al secretario de Seguridad Pública estatal, general en retiro SERGIO CHÁVEZ.

Por redes sociales divulgaron una carta en la que según un grupo de guardias estatales están molestos con él por considerar que actúa en forma abusiva con el personal y encima de ello no les proporcionan todo lo que requieren para desarrollar eficazmente la función de vigilancia.

Hasta ayer el titular de Seguridad Pública no había dicho nada al respecto, pero no es bueno que circulen esas versiones sin que se dé una explicación que aclare y precise de como realmente están las cosas.

Y como lo saben mis lectores, este domingo habrá elección para senador, lo que conlleva la suspensión de venta de bebidas alcohólicas a partir del primer minuto de este sábado hasta casi las 24 horas del domingo, una medida que francamente a estas alturas del siglo XXI como que sale sobrando, porque los que tienen la costumbre de tomar en fines de semana lo que hacen es pertrecharse con anticipación y de todas formas habrá crudos el domingo que por lo mismo se convertirán en abstencionistas.

Y por hoy, BASTA.

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