Somete crimen a Tierra Caliente
Bloqueos de carreteras, quema de comercios y denuncias por extorsión siembran el miedo
La violencia arrecia en la Tierra Caliente de Michoacán, situación circular, que va y viene y pocas veces se detiene. Este domingo, criminales bloquearon carreteras en la región, quemaron tiendas e incendiaron vehículos, acciones que el presidente, Andrés Manuel López Obrador, ha calificado este lunes de publicidad y propaganda. Michoacán es uno de los estados del país que mayor cantidad de asesinatos registra desde hace años.
La geografía criminal en el Estado es de sobra conocida, sobre todo la de Tierra Caliente. Pueblos y ciudades pequeñas como Apatzingán, Buenavista Tomatlán, Aguililla, La Ruana o, algo más alejada, Uruapan, sufren el embiste de células criminales, que construyen y desechan alianzas a la velocidad del rayo. Para costear sus guerras, el crimen parasita la próspera actividad agrícola local, centrada en el aguacate, el limón, y en menor término, el tomate y otras hortalizas.
En un ambiente bélico como este, las víctimas caen de todos lados. No hace aún dos meses, pistoleros acabaron con la vida del líder social Hipólito Mora en La Ruana, entre Apatzingán y Buenavista. Hace diez años, Mora se erigió en uno de los líderes de las autodefensas michoacanas, movimiento social que trataba de hacer frente al crimen organizado en la región, pujante ya entonces.