Identifican 10 municipios con violencia intencional
Análisis elaborados por Organizaciones No Gubernamentales ubican a Tamaulipas con un panorama complejo de criminalidad
Tamaulipas enfrenta un panorama complejo de violencia criminal, donde al menos 10 municipios han sido identificados como zonas de alto riesgo, por su nivel de violencia intencional y asedio cotidiano del crimen organizado.
De acuerdo con un análisis elaborado por Causa en Común y Nexos, los municipios con mayor violencia intencional son Reynosa, Guerrero, Mier, Miguel Alemán, Padilla, Jiménez y Abasolo.
En tanto, Camargo, Burgos e Hidalgo presentan índices considerables de violencia intencional baja-alta, aunque también preocupantes.
Ambas asociaciones civiles definieron que la violencia intencional contempla los delitos de narcomenudeo, extorsión y tres modalidades de robo: vehículo, negocio y transportista, delitos que "Al conjuntarlos buscamos capturar las operaciones cotidianas del crimen organizado, que la discusión sobre la violencia homicida tiende a invisibilizar".
Además, los expertos de Causa en Común y Nexos refieren que este fenómeno obedece a factores profundamente arraigados en la estructura social, como corrupción política, falta de capacidades técnicas y equipamiento en cuerpos policiacos y fiscalías, así como carencias económicas que orillan a las personas a integrarse al crimen organizado.
Además de los delitos de alto impacto, encontraron que a esos municipios los afecta un fuerte asedio criminal cotidiano a través de narcomenudeo, extorsión y robos a vehículos, negocios y transportistas, que evidencian la presencia activa de organizaciones criminales en estos municipios.
En un contexto nacional, México Evalúa identificó 168 "puntos calientes" de violencia criminal no letal, agrupados en zonas estratégicas del país, entre ellas el noreste, donde destacan municipios de Tamaulipas, Nuevo León y Coahuila.
Lo anterior se enlaza con la disputa de varios cárteles entre Tamaulipas y Nuevo León, como el Noreste y el CJNG, por el control del puerto de Nuevo Laredo, así como por el cobro de piso y venta de drogas.
A más de 100 días del nuevo Gobierno federal, la política ha consistido en la captura de líderes criminales y decomisos, sin que se perciban cambios estructurales en estados como Tamaulipas.
Los expertos de las asociaciones civiles señalan que, para frenar la violencia homicida, el Estado mexicano debe ampliar su estrategia más allá del conflicto interno de un solo cártel y atender las disputas criminales en estados donde éstos operan sin contención.
La presencia criminal en Tamaulipas, particularmente en la frontera y municipios colindantes, exige respuestas contundentes y coordinación entre los tres niveles de gobierno.
