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Xóchitl: frágil plataforma
En principio asoma esa palabrita "disrupción" que la opinocracia nacional aplica a mansalva cuando se refiere al fenómeno de la senadora y exfuncionaria indigenista.
El vocablo se usa en el glosario eléctrico y señala la acción brusca de interrumpir o restablecer el suministro de la energía, con impacto severo en todas sus conexiones.
Y se emplea también en la historia de los inventos, para designar aquellos que aparecen de manera repentina en nuestras vidas. Innovaciones rápidas que imponen cambios para los que el sentido común parece no estar preparado.
Lo disruptivo también atañe al mercado político. Cuando la emergencia inesperada de un personaje altera los códigos de conducta, las expectativas y equilibrios que privaban en el tiempo inmediato anterior.
El caso de la señora GÁLVEZ no es el primero. Disruptivos fueron en su momento innovadores como CUAUHTÉMOC CÁRDENAS, ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR y hasta VICENTE FOX, por su voluntad de romper con la ortodoxia reinante, impulsar un guión distinto y alterar las reglas del juego en la lucha por el poder.
Así aparece XÓCHITL en escena, pero con algunas desventajas visibles. Los observadores señalan que en su caso hay más candidata que partidos, subrayando el desprestigio y la debilidad que arrastran los tres organismos constituyentes de la alianza: PAN, PRI y PRD.
La ruinosa gestión de ALEJANDRO, Alito, MORENO CÁRDENAS al frente del tricolor, su derrota en EDOMEX y la reciente deserción de un grupo importante de figuras nacionales, son factores que ubican a este partido en condiciones muy precarias.
Sobre el PRD de CHUCHO ZAMBRANO hay poco que decir, salvo que la constitución de MORENA como partido en 2014 lo vació de cuadros y operadores a todos los niveles, para dejarlo en calidad de fantasma, espantajo. Hoy sobrevive a expensas de sus alianzas, igual que membretes de vida satelital como el PVEM, el PT y el PES.
El PAN también sufre momentos difíciles por la mediocre dirección de MARKO CORTÉS y su grupo. Y tan carece de figuras relevantes que quien hoy asoma como principal competidor de XOCHITL es SANTIAGO CREEL, un perdedor nato.
SUSTENTO ENDEBLE
En efecto, uno de los negativos principales que afectan al proyecto de la señora GÁLVEZ RUIZ sería la fragilidad de las organizaciones que le otorgarían sustento formal y legal, en caso de ganar la elección interna, lo cual es muy probable.
Dicha debilidad se expresa en la ausencia de cobertura geográfica a escala nacional. El PAN solo gobierna en cinco estados: Aguascalientes, Chihuahua, Guanajuato, Querétaro y Yucatán. El PRI en dos, Coahuila y Durango. El famélico PRD en ninguno.
El contraste con el oficialismo guinda es inocultable. Directamente gobernados por MORENA se contabilizan 21 estados, a los que habría que añadir dos más, bajo mando de fuerzas aliadas, San Luis Potosí (PVEM) y Morelos (PES).
Con un elemento adicional. Que en el vasto mapa gobernado por MORENA se encuentran entidades densamente pobladas, como la Ciudad de México, el Estado de México, Veracruz, Guerrero, Michoacán, Chiapas y Oaxaca. Entre las curiosidades, asoman voces que se oponen a la señora GÁLVEZ recriminándole su pasado trotskista, como es el caso del divo tamaulipeco EDUARDO VERÁSTEGUI, quien por dicho motivo decretó la muerte del PAN. Afirmación estridente, amén de apresurada y tan categórica como su ignorancia.
El exactor de telenovelas oriundo de Xicoténcatl, ha expresado su deseo de contender en forma independiente por la Presidencia. Encabeza a un fanatizado movimiento de extrema derecha que agrupa a fundamentalistas católicos vinculados a la congregación ultraconservadora Legionarios de Cristo.
Llama la atención esa identidad múltiple de actor, modelo, predicador laico, apóstol de la castidad y activista de la pureza ideológica. Aunque su efecto en el electorado se antoja francamente marginal.
¿QUÉ TIPO DE MAYORÍA?
Sea quien sea el candidato (candidata) de MORENA, así nomás, por pura estructura territorial, la ventaja del obradorismo es arrolladora. Esto pinta el tamaño del reto que tendría XÓCHITL enfrente si en verdad quiere derrotar al partido oficial y abrir un nuevo capítulo a la alternancia nacional.
Acaso pueda cerrar la competencia, aproximar en cierta medida los números de la alianza opositora a los que ya muestran los aspirantes morenistas.
Solo que las encuestas no toman en cuenta la movilización de votantes el día de la elección, donde el control territorial constituye un factor determinante en favor del partido guinda. Sus 23 estados.
No parece, pues, que XÓCHITL GÁLVEZ pueda poner en riesgo el triunfo de CLAUDIA SHEINBAUM o MARCELO EBRARD en junio del 2024.
Aunque sí podría afectar el voto legislativo en ambas cámaras y los planes que tiene AMLO de conquistar la ansiada mayoría calificada, es decir, las dos terceras partes de curules y escaños.
El llamado "Plan C" que les permitiría retomar los proyectos de reforma dejados pendientes por la presente legislatura. Entre otros, los relacionados con las instituciones electorales y el poder judicial.
Dicha mayoría constitucional que les permitiría sacar adelante, de manera rápida y expedita, transformaciones profundas a la Carta Magna, podría peligrar ante una candidatura opositora competitiva y unas elecciones copiosas.
En los últimos años, la prospectiva de Palacio Nacional había sido muy optimista, mientras los probables adversaros fueron figuras aburridas, de discurso chato, propuesta tibia, escasa o nula penetración popular, como SANTIAGO CREEL, ENRIQUE DE LA MADRID o BEATRIZ PAREDES.
El tema es que con XÓCHITL habría mayor competitividad y afluencia de votantes. Acaso insuficientes para arrebatarle a MORENA la Presidencia de la República. Pero sí con un impacto importante para disputar con mayor fuerza el poder legislativo
El obradorismo no tendría entonces la presencia avasallante del 2018 sino la más mesurada del 2021. En ambos cotejos se alcanzó mayoría guinda, pero con números, proporciones y márgenes de maniobra diferentes.
BUZÓN: lopezarriagamx@gmail.com
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