Seguridad de salud en el lugar de trabajo

En su primer medio siglo, OSHA ha ayudado a transformar los lugares de trabajo en los Estados Unidos de maneras que han reducido significativamente las muertes, lesiones y enfermedades en el lugar de trabajo. 

Cinco décadas de progreso de la agencia y sus esfuerzos para continuar cumpliendo la promesa de la Ley de Seguridad y Salud Ocupacional.

Establecida por la Ley de Salud y Seguridad Ocupacional de 1970, OSHA abre sus puertas el 28 de abril de 1971. 

Durante su década inicial emitió las primeras normas para asbesto, plomo, carcinógenos y polvo de algodón. También se establecen el Instituto de Capacitación de la OSHA, las subvenciones para capacitación en seguridad y salud, el Programa de consultas en el lugar, los planes estatales y las protecciones de denuncia de irregularidades para la seguridad en el lugar de trabajo. En una decisión histórica, la Corte Suprema de Estados Unidos afirma que los trabajadores tienen derecho a rechazar las tareas peligrosas. 

OSHA emite normas para dar a los trabajadores el derecho a saber a qué sustancias químicas pueden estar expuestos y requiere que los empleadores proporcionen registros médicos y de exposición de los trabajadores. 

La década de 1980 también vio la creación de los Programas de Protección Voluntaria, nuevos estándares sobre pruebas de seguridad y certificación de equipos en el lugar de trabajo e importantes protecciones para los trabajadores contra el polvo de grano combustible, la excavación de zanjas, el ruido y la energía peligrosa.

En la década de los 90 OSHA emite la norma de Gestión de seguridad de procesos y proporciona protecciones nuevas y más sólidas para los trabajadores contra caídas, patógenos transmitidos por la sangre, sustancias tóxicas y que trabajan en espacios confinados, terminales marítimos y portuarios y laboratorios. Los trabajadores comienzan a recibir capacitación sobre seguridad y salud a través de los primeros centros educativos de OSHA, y la agencia amplía la colaboración con los empleadores a través de su Programa de asociación estratégica.

En la década de los 2000, El personal dedicado de OSHA trabajó junto a sus socios federales, estatales y locales para proteger la seguridad y la salud de los trabajadores de recuperación después de los desafíos sin precedentes que enfrentaron los trabajadores estadounidenses después de los ataques terroristas del 11 de septiembre y el huracán Katrina. 

La seguridad en el lugar de trabajo continúa mejorando a través de nuevos estándares para proteger a los trabajadores de la construcción en el montaje de acero y prevenir la exposición al cromo.

Desde el 2010, OSHA ayuda a proteger a los trabajadores que realizan actividades de respuesta y limpieza después de la catastrófica explosión y derrame de petróleo de Deepwater Horizon.

 La agencia emite normas para el polvo de sílice, grúas, espacios confinados y la clasificación y etiquetado de productos químicos relacionados con el trabajo.  Para abordar la causa número uno de muertes de trabajadores en la industria de la construcción, OSHA lanza la campaña de prevención de caídas. 

Y en 2020, lanza una respuesta histórica para proteger a los trabajadores durante la pandemia de Covid-19.

La nueva década comenzó con un desafío diferente a cualquier otro al que se enfrenta la fuerza laboral estadounidense, ya que la pandemia del coronavirus afectó la seguridad y la salud en el lugar de trabajo de maneras sin precedentes. OSHA actuó rápidamente para proteger a los trabajadores de la nación a través de esfuerzos de divulgación y educación, asegurando el cumplimiento de los estándares de la agencia y la colaboración con las autoridades federales, estatales y locales. 

La agencia continúa trabajando incansablemente para abordar las demandas de esta crisis de salud en evolución. Incluso con las dramáticas mejoras a la seguridad en el lugar de trabajo durante las últimas cinco décadas, y ahora con la respuesta de la nación a una pandemia global, la misión de OSHA es tan importante como siempre.  Únase a OSHA para hacer un compromiso renovado de mantener a los trabajadores seguros y saludables; es un derecho de todos los trabajadores .

Para formular preguntas, obtener asistencia para el cumplimiento, presentar una queja o reportar hospitalizaciones, muertes o situaciones que supongan peligro inminente para el trabajador en el lugar de trabajo, llamar a OSHA, 1-800-321-OSHA (6742) o a la oficina de San Antonio al: 210-472-5040.

 Para obtener información adicional, visite http://www.osha.gov. Nuestro objetivo es que toda persona regrese con bien a su hogar y los suyos al final de su jornada de trabajo.