Jornada 17 NFL

Refinido el panorama de la NFL prácticamente en un noventa por ciento y con sólo una jornada restante, haremos un somero recuento de la situación actual de postemporada.

CONFERENCIA AMERICANA

Nuevamente los Patriotas de Nueva Inglaterra se perfilan como los favoritos para llegar al Super Bowl. Las condiciones de localía prácticamente están de su lado (tendría que acontecer un milagro con los Jets de Nueva York hoy domingo para que suceda lo contrario). Me parece que esta versión 2017 de equipo no es tan dominante como en años pasados, en especial en el costado defensivo, sin embargo, el conjunto está entrenado y organizado como ninguna otro en la NFL y con ello será más que suficiente para alcanzar el juego grande. Observación importante: la contratación del veterano James Harrison ¿Acaso Bill Belichick requiere información precisa y fresca de sus muy posibles rivales en la final de conferencia? Sus más peligrosos adversarios son los Acereros de Pittsburgh, quienes apalearon a los Texanos de Texas (valiosa victoria para recuperar confianza y reestablecer su poderío), amarraron el descanso en primera ronda y ahora cierran contra los paupérrimos Browns. En la medida del resultado Pats-Jets al tercer cuarto (juegan en el mismo horario), el entrenador Tomlin podría descansar a sus titulares más importantes. Coincido con lo que un analista prestigioso asentó respecto a estas dos franquicias: Los Pats tienen una fórmula, un esquema; los Acereros están plagados de estrellas, pero en ocasiones la estrategia es deficiente. El tercer sembrado serán los Jaguares de Jacksonville, un equipo con gran defensa y buen ataque terrestre. Su gran incógnita es el mariscal de campo Blake Bortles quien tuvo un deficiente desempeño contra los 49´s de San Francisco, lo cual despertó de nuevo las dudas e incertidumbre hacia él. Me sorprendería que lleguen más allá de la primera ronda divisional, empero, el año entrante podrían ser la nueva potencia. Los Jefes de Kansas City recuperaron cierto nivel en el momento más importante. La defensiva en realidad resintió la lesión de Eric Berry. A la ofensiva cuentan con talento y todos esperamos el gran momento de Alex Smith como un sueño lejano. Serán un rival incómodo y pienso que deben llegar a los juegos divisionales sin mayor problema, a menos que deban enfrentar a sus primos hermanos, los Cuervos de Baltimore, que como casi siempre, llegan peligrosos, con buena defensa y con un Joe Flacco impredecible. Tanto Titanes de Tennessee, Bills de Buffalo y/o Cargadores de San Diego, serán un simple relleno en estos "play-offs". De los equipos ya eliminados de la AFC, valdría la pena mencionar a las cuatro grandes decepciones: Los Raiders de Oakland encabezan la lista y quienes merecen otro entrenador; los Broncos de Denver están un escalón abajo en este rubro y considero que quien debe tener un duro ejercicio de auto evaluación es John Elway, en gran medida responsable de la crisis de los mariscales de campo. Los Bengalies de Cincinnati, como siempre con calidad humana pero medianos en ejecución, en espera del final de la era de Marvin Lewis. Por último, los Texanos de Houston, quienes a pesar de ser víctimas de una oleada de lesiones claves, pudieron haber peleado más. En su caso, también me inclino por un cambio de timón, o bien, la agencia libre les arrebatará pronto a sus excelentes arietes defensivos.

CONFERENCIA NACIONAL

Las Águilas de Filadelfia, si ganan a los Vaqueros de Dallas el próximo Domingo, podrían establecer el mejor récord de toda la NFL. De antemano ya cuentan con el "Home Field Advantage", sin embargo, bajo mi apreciación, no son los grandes favoritos para llegar al Super Bowl. De hecho, tampoco los colocaría en los peldaños enseguida. La lesión de Carson Wentz será determinante y sin duda un factor que los rezagará en la presente temporada. Los últimos dos juegos hemos sido testigos de un equipo con falta de contundencia y con un Nick Foles cumplidor, pero falto del liderazgo de aquel. Me inclino por los Vikingos de Minnesota como el músculo de la NFC. Tengo mis dudas con Case Keenum, pero en general observo un equipo demasiado bien entrenado (al nivel de los Pats) y muy balanceado en ambos costados. La Nacional, a diferencia de la Americana, no tiene equipos de "relleno". Aquí todos son altamente competitivos y cualquiera podría llegar a la final de conferencia. Los Santos de Nueva Orleans con Brees al mando, ataque terrestre y novatos de lujo; las Panteras de Carolina siempre agresivas al igual que los Halcones Marinos de Seattle (en caso de que ingresen por Atlanta). Los Halcones que como hemos mencionado, tienen un plantel plagado de "all-stars" y los sorprendentes Carneros de Los Ángeles, la mayor revelación del año y conjunto muy equilibrado. Mención honorífica para Sean McVay, posible mejor entrenador del año. También de este lado de la NFL hay decepciones, que además son más: Los Vaqueros de Dallas encabezan esta lista ¿Cuánto tiempo le queda a Jason Garrett? (pésima selección de jugadas en bastantes ocasiones); Gigantes de Nueva York, con grandes interrogantes para su futuro inmediato, desde el nuevo gerente, entrenador y -ojalá, para su bien- de mariscal de campo; Empacadores de Green Bay, que deben hacer una reingeniería en sus métodos de reclutamiento de agencia libre; Cardenales de Arizona, que desperdiciaron tres o cuatro generaciones de jugadores (Bruce Arians debería salir) y los Bucaneros de Tampa Bay y los Leones de Detroit, sempiternos mediocres. Abundaremos.