Cruda reflexión... pero es la realidad

Esta tan dramática la situación en nuestra querida Reynosa a consecuencia de la irrefrenable propagación del COVID-19, que un grupo de médicos y enfermeras de la localidad divulgaron por las redes sociales un pensamiento de alto contenido social y que lleva la intención de que el ciudadano comprenda a valorar la importancia del servicio que prestan los profesionales de la salud.

Supongamos que por una desgracia todos ellos fueran víctimas del COVID, entonces... ¿Quiénes atenderían a los enfermos, no solamente por este virus sino por otro tipo de enfermedades?

La reflexión es cruda pero muy apegada a lo que sería una ominosa realidad dado que no es ninguna remota posibilidad que médicos y enfermeras estén contagiados por el COVID y más cuando en los hospitales públicos en general no les proporcionan los aditamentos indispensables para protegerse del contagio.

El que fuera director del hospital general, ADALBERTO YAÑEZ mejor presentó su renuncia. Algo muy duro tuvo que haber pasado para tal decisión pues abandonar el barco en la actual situación es una fama que nunca se va a quitar de encima, pero debe haber tenido motivos para tal decisión. Hasta la fecha no los ha dicho, pero por el bien de la salud colectiva debiera decirlo.

Entre tanto la confusión se acrecienta por la circunstancia de que la gente ahora se atemoriza con cualquier síntoma como toz, fiebre o gripa, creyendo que son infectados por el coronavirus.

Se ha sabido que en algunos casos son enfermos, pero por el dengue, mal que está proliferando por los recientes aguaceros de mayo y parte de junio. Una parte de la gente siguió con la nefasta idea de conservar cacharros o vehículos yonkeados, lugares que son propicios para la propagación del dengue en donde los moscos encuentran charcos ideales para su reproducción.

Lo que no entiendo es que, si ya andan paniquiados, ¿Porque tanta gente en la calle? Y no estoy hablando solamente durante el día, el "toque de queda" es a partir de las diez de la noche y hasta las cinco de la mañana del día siguiente, pareciera que excluyo a Reynosa, lo que va a obligar a que las autoridades sanitarias endurezcan la acciones porque de plano la gente no participa y para colmo persiste la entrega de beneficios sociales en forma personal, en cualquiera de los tres niveles de gobierno, no obstante la recomendación de la sana distancia como se vio el viernes en el CEBTIS 7 en donde la gente se amontonó con el consecuente riesgo.

Por su parte, los bancos tampoco colaboran, siguen viéndose largas filas para ingresar a esas instituciones y el metro y medio ni por asomo se atiende.

Resulta inexplicable que no contraten, aunque sea en forma temporal, personal de seguridad para que obliguen a la gente a mantener la sana distancia.

Bueno sería que los tarjetahabientes, que forman el grueso de las filas, ya no pagaran hasta en tanto no facilitaran la forma de cumplir con esa obligación.

Sé que algunos dirán que ese tipo de pagos los pueden hacer en las tiendas de conveniencias, pero tienen tiempo de que ya no los reciben, seguramente por los malos entendidos o cuentas enredadas que terminan reclamando los Bancos a las tiendas.

El caso es que la sucursal de Bancomer en Plaza Real fue cerrada. Trascendió que tanto una parte del personal como personas que acudieron por ahí resultaron infectadas por el virus y algo similar debió haber pasado en la sucursal de bulevar Morelos de Banamex, la que está en las inmediaciones al monumento al llamado "Siervo de la Nación". No dijeron porque, nomás que hasta un niño puede suponer la causa.

En pocas palabras, nos estamos contagiando, ya dejamos muy atrás a Matamoros que venía ocupando el liderazgo, y lo más grave es que no parece haber forma de frenar la propagación y ya nadie quiere dar la cara.

Vuelvo a insistir: nadie va a hacer por nosotros lo que nos corresponde, y esto es cuidarnos.

Por otra parte, sigue provocando comentarios la reciente visita del presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR, por Washington, sobre todo porque sorprendió por haberse comportado muy diplomático y no menos lo fue el presidente DONALD TRUMP, quien por cierto, en una entrevista por la cadena Tele Mundo elogió a AMLO diciendo que, tras haber platicado con él, tiene otro concepto de México y de los mexicanos.

Y como para darle fuerza a sus palabras anunció haber dado una orden ejecutiva para apoyar a los "dreamer", una muy buena señal para todos esos jóvenes emprendedores que son de calidad universitaria pero que radican en forma ilegal.

Pero regresando a nuestra querida Reynosa alguien debe hacerles entrar en razón a los productores agrícolas de que no tienen por qué andar bloqueando el paso a los puentes internacionales porque el gobierno no los apoya o no les mejora el precio de sus productos.

Están incurriendo en una actitud nociva que está causando cuantiosas pérdidas a terceros que ninguna culpa tienen de ello. La autoridad ya debiera ser drástica en la misma forma como lo fue con SUSANA PRIETO TERRAZAS, a quien metieron a la cárcel por andar creando conflictos en la industria maquiladora de Matamoros.

Pero hay otro problema con la gente del campo y este es que trascendió el que Estados Unidos cerró el mercado ganadero a Tamaulipas debido a la condición zoosanitaria en materia de tuberculosis bovina.

El documento es de fecha 9 de julo del presente año y lo suscribe el Servicio de Inspección de Salud Animal y Vegetal del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos.

Y advierten: en tanto Tamaulipas no recupere el estatus AM, que significa Acreditado Modificado, no podrá exportar ganado a Estados Unidos debido a que aquel país cerro el mercado ganadero a la entidad en virtud de que, según ellos, desde 2016 Tamaulipas ha exportado múltiples animales infectados con tuberculosis al vecino país del norte.

Y ni modo que le vayan a echar la culpa de eso al presidente López Obrador, como le recriminan los agricultores las calamidades que hoy padecen.

Inexplicablemente las autoridades no actúan para impedir el desorden por los puentes internacionales.

Y por hoy, BASTA.

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