Columnas > ERNESTO SALAYANDIA GARCÍA
Cristal y heroína, la droga mortal
Tengo 17 años, mi primera relación sexual fue a los 15 años en una fiesta en un baño
Tengo 17 años, mi primera relación sexual fue a los 15 años en una fiesta en un baño, andaba bien borracha, duré como media hora ahí adentro, al día siguiente desperté en una casa y ahí fue como me acordé de lo que había sucedido, era mi mejor amigo y estaba yo bien peda y me dio un beso, de ahí nos fuimos al baño. Mi primer contacto con el alcohol fue cuando tenía 13 años, fue un sábado en una fiesta de 15 años, me dieron una botella, y me la empecé a tomar yo sola, pero de poquito en poquito, me puse bien ebria, demasiado, y andaba haciendo el circo, el hazme reír de todos, perdí la noción, no supe como llegué a mi casa, ni quien me llevó, hasta el día siguiente que me contaron lo que había sucedido, yo me sentía muy valiente ahí tomando, pero mis papás no se dieron cuenta. Mi primer contacto con la marihuana fue en la secundaria, me fui atrás de las gradas con mis amigos los cholos y entonces sacaron mucha marihuana y comenzaron a llenar una pipa y la probé, me dio mucha risa, me vio la prefecta y le habló a mi mamá, les dije que me sentía muy mal y mi mamá me llevó a la casa, me quedé bien dormida, no me dijo nada del consumo, no se dieron cuenta por mi reacción de que me sentía muy mal.
Después probé la cocaína, en una fiesta un viernes, andaba bien borracha y me dijeron que se me iba a quitar lo borracho y se me hizo fácil echarme unas líneas y me las eché, no se me quitó lo borracho, según yo, no me hizo efecto, yo me sentía igual, como siempre, y adentro de mi casa, cuando llegué, me caí y mi mamá me preguntó que si qué tenía, le dije que nada, y como ella siempre me creía todo, yo la despistaba y ella nunca se dio cuenta, después probé el cristal, fue una vez que no entré a la escuela cuando estaba en la prepa, fue en una casa sola, llegué con dos amigas y ya estaban dos amigos en un cuarto que no tenía luz y como me gusta andar en todos lados, fui a verlos y a preguntarles que si qué hacían y me dijeron que estaban fumando cristal y me dijeron que si no quería y comencé a fumar mucho y me puse bien mal, se me acelero el corazón, me mareé, vomité, traía mi fiesta yo sola, después me fui a acostar pero no me pude dormir porque andaba bien mal y a la media hora volví a fumar más y andaba como el payasito de la casa porque había mucha gente, me dijeron que se me notaba mucho porque mis ojos se veían muy grandes.