Sigue abierta la clínica de abortos de Luisiana

SHREVEPORT, Louisiana

Sí, se anularon las protecciones federales para el aborto, dijo. La clínica aún estaba abierta, pero hay una lista de espera y una audiencia en la corte el viernes que podría cambiar todo, agregó.

“Todavía estamos luchando”, le dijo la administradora de la clínica, Kathaleen Pittman, a la mujer antes de colgar el miércoles.

Según la propia descripción de Pittman, hay que ser optimista para trabajar en los servicios de aborto. Ahora, con pacientes confundidas que piden ayuda y una cita judicial inminente que amenaza con poner fin a casi todos los abortos en el estado, ese optimismo está siendo puesto a prueba como nunca antes.

Durante años, las clínicas de aborto de Louisiana han operado bajo crecientes capas de restricciones diseñadas para limitar quién puede abortar y cuándo. Luego, la Corte Suprema de Estados Unidos anuló la histórica decisión Roe v. Wade de 1973 que brindaba protección federal para los abortos, dejando la decisión en manos de los estados individuales.

La clínica de abortos todavía ofrece abortos, pero Hope Medical Group for Women se enfrenta a un caso judicial inminente el viernes que podría significar el fin de eso. 

Al igual que muchos estados, Louisiana tiene una ley de activación diseñada para detener de inmediato los abortos si se anula Roe. Pero casi dos semanas después del fallo del 24 de junio, la clínica de Shreveport todavía estaba abierta y brindaba abortos a pacientes de todo Luisiana, así como de estados como los vecinos Texas y Mississippi.

La clínica solicitó una orden de restricción temporal para permitir que las tres clínicas del estado permanecieran abiertas, argumentando que las múltiples disposiciones de la ley no aclaran exactamente cuándo entra en vigencia la prohibición y que las excepciones médicas de la ley no están claras.

Un juez de Nueva Orleans concedió la medida temporal en espera de una audiencia judicial el viernes. El fiscal general del estado apeló directamente a la Corte Suprema de Luisiana, pero el miércoles la corte se negó a intervenir de inmediato, dejando en suspenso la prohibición del aborto.

En Hope, que está abierto de lunes a sábado, los médicos practican abortos tres días a la semana. Los otros días, los médicos realizan consultas con los pacientes, a quienes también se les realiza una ecografía. Hay un período de espera de 72 horas exigido por el estado entre la consulta y el aborto.

Hubo alrededor de 20 consultas el miércoles, una carga relativamente liviana, dijo Pittman. Ella lo atribuyó a la confusión que rodea el futuro acceso al aborto en el estado, y a las pacientes les preocupaba que vendrían a una consulta pero no podrían abortar.