Llevaron activistas posada a El Triunfo

El ejido más marginado y olvidado de Río Bravo y que hasta hace tres años, no tenía luz eléctrica, siendo el único en la región con esa característica, tuvo su posada, la cual fue dirigida sobre todo a los niños.

Un grupo de altruistas encabezados por Martha Gómez, por sexto año consecutivo acudieron a el núcleo ejidal al norte de la cabecera municipal la tarde del viernes.

La activista y sus compañeros, llevaron piñatas con dulces; juguetes y regalos, sin olvidar un refrigerio para convivir con las familias de ese núcleo rural.

Incluso los adolescentes alcanzaron un regalo para hacer más feliz su Navidad.

"Con nada les pago las sonrisas y la felicidad en su carita, ¡mi corazón se siente mega feliz!, sexto año de llevar un poquito de lo mucho que merecen", precisó Gómez.

Niños y adolescentes tuvieron un presente por sexto año consecutivo.