Sufren problema ancestral

”Aguas negras son sinónimo de padecimientos gastrointestinales”.* Jorge Miguel Moreno Morgado, doctor.

Aguas negras fétidas, baches, dificultad para transitar de vehículos y transeúntes constituye la esquina de las calles Amado Nervo con Américo Villarreal en la colonia El Anhelo.

Es un ancestral problema que las familias han padecido durante varios lustros y que ningún gobierno ha podido resolver.

Se estima que más de tres mil residentes resultan seriamente afectados por el constante estancamiento de aguas negras, generando focos de contaminación que ponen en alto riesgo la salud de las familias en el sector.

Cientos de alumnos de universidades y escuelas preparatorias, así como centenares de familia son afectadas por el enorme acumulamiento de aguas pestilentes y el problema se agudiza en cada ocasión que se registran lluvias debido a que el agua brota de las alcantarillas del drenaje.

En un recorrido por el sector, EL MAÑANA constató que se trata de un enorme charco de más de cien metros de largo, provocado por el estancamiento de aguas negras pestilentes cuyo hedor a diario deben soportar los habitantes de la colonia Lázaro Cardenas.

En su testimonio, don Teodocio García comentó que ya no se acuerda de cuántos años tiene este problema que ha agobiado durante lustros a los habitantes.

Advierte que es un problema muy grande que no ha podido ser atendido nunca y revela que inclusive que una vez se cayó en este enorme encharcamiento con todo y bicicleta.

Se trata de una fuga de líquidos residuales combinadas con agua de lluvia en las calles Amado Nervo, Fernando Montes de Oca y Américo Villarreal.

Problemas gastrointestinales, infecciones de pulmones, afectaciones en el sistema intestinal de las personas forman parte de los padecimientos que afectan a cientos de residentes de este sector. 

El problema, al decir de vecinos entrevistados, se registra desde hace 20 años y durante ese lapso ninguna administración se ha abocado a realizar las reparaciones necesarias.

TRES MIL AFECTADOS

Por su parte la señora Juanita Hernández Reséndez recuerda que desde hace 15 años cuando llegó a este sector el problema ya estaba afectando a las familias. 

Doña Juanita se refiere a esta deficiencia en el sistema del drenaje como “mugrero de agua”.

Hubo quejas, demandas, denuncias y oficios ante el municipio y la Comapa, exponiéndoles la gravedad de la situación.

Niños, adultos y personas de la tercera edad han sido perjudicados por los efectos de las aguas estancadas.

Una vez ya se había arreglado este problema con fondos federales, pero luego volvieron las aguas residuales que son un dolor de cabeza.

Los residentes padecen alergias, micosis, diarreas y problemas de la piel.

Han enviado decenas de oficios, entre 45 y 55 solicitudes, exigiendo la solución de esta situación a la Comapa, al municipio y al gobierno del estado.

ENFERMEDADES

“El problema de las aguas negras hace brotar entre los vecinos padecimientos gastrointestinales y de la piel’’, reveló el doctor Jorge Miguel Moreno Morgado.

Explicó que las aguas estancadas se convierten en criaderos de mosquitos que transmiten el dengue.

Asimismo los residentes del sector pueden desarrollar otras enfermedades como parásitos intestinales y cólera.

Asimismo la piel es un órgano que es muy susceptible a enfermedades relacionadas con las aguas negras, como infecciones y constantes irritaciones.

Calvario

> Cientos de alumnos de universidades y escuelas preparatorias, así como centenares de familia son afectadas por el enorme acumulamiento de aguas pestilentes.

100 metros de largo tiene el encharcamiento.

20 años sin solucionarlo, estiman vecinos.

3 mil habitantes del área son los afectados.

VECINA. “Mugrero de agua”, califica la señora Juanita Hernández Reséndez.

Don Teodocio García.