Reciben tercera dosis
Suman 420 mil judíos los que la han solicitado y se esperaba que al finalizar el domingo la cifra superara al medio millón
Una gran cantidad de israelíes han acudido a recibir una tercera dosis de la vacuna contra el coronavirus, ante la amenaza de la variante delta.
El primer ministro Naftali Bennett señaló cifras oficiales según las cuales más de 420 mil israelíes mayores de 60 años han recibido una dosis de refuerzo, más de un tercio de la población elegible.
Tras concluir la reunión de su gabinete, Bennett vaticinó que la cifra aumentará a más de medio millón al final del día.
Más de la sección
En Israel está aumentando la cantidad de personas hospitalizadas con COVID-19, casi todas debido a la contagiosa variante delta. El gobierno ha reimpuesto su orden de que todos vistan la mascarilla en espacios cerrados, y considera la imposición de más medidas.
Israel fue líder mundial en su campaña de vacunación, al vacunar con las dos dosis a 5.4 millones de sus 9.3 millones de habitantes.
La Organización Mundial de la Salud en días recientes pidió una moratoria a la aplicación de la tercera vacuna, insistiendo en que la prioridad debe ser darle dosis a los países pobres.
CRISIS EN IRÁN
Irán registró el domingo la mayor cantidad de casos del coronavirus en un solo día desde el inicio de la pandemia, con 39,600 casos nuevos de la enfermedad y 542 muertes.
La cifra de muertes supera por mucho a la anterior, registrada durante la más mortífera ola del virus en noviembre, presagio de un empeoramiento de la situación.
Los nuevos récords implican que Irán hasta la fecha ha sufrido más de 4.1 millones de casos y más de 94,000 muertes, las cifras más altas de todo el Medio Oriente.
Los casos nuevos, en su mayoría de la contagiosa variante delta, han abrumado a los hospitales. La cantidad de personas en condición crítica asciende a 6,462.
El líder supremo ayatolá Alí Jamenei ordenó al gobierno la semana a considerar la posibilidad de suspender toda la actividad económica a nivel nacional.
El gobierno hasta ahora se ha visto renuente a tomar semejante medida drástica, por temor a los efectos económicos que conllevaría.
| El primer ministro israelí Naftali Bennett en Jerusalén.