Todos 'pa'l' mismo rumbo

La enjundia de la juventud no pudo esperar a que el lunes próximo se pongan en marcha los trabajos de Cumbre del Clima que habrán de desarrollarse en Nueva York con la participación de representantes de gobiernos, instituciones, organismos de la sociedad y personas con iniciativas factibles para atenuar el fenómeno del calentamiento global que está haciendo estragos por todos los confines del planeta. No se aguantaron y ayer se manifestaron en casi todos el orbe.

Según las crónicas mediáticas y a través de las redes sociales se dejaron ver las manifestaciones de los jóvenes en Nueva York, Berlín, São Paulo, París, Bruselas, Dinamarca, Finlandia, Londres, Washington, Johannesburgo o México. Han sonado fuerte las voces de la juventud que emulando a Greta Thunberg (16 años), la estudiante y activista sueca que en el 2018 se convirtió en una destacada figura dentro de las huelgas estudiantiles en favor de la consciencia ambiental; pero, también la voz de la joven Alexandria Ocasio-Cortez (29 años), representantes demócrata de Nueva York, quien junto con el  senador Ed Markey, demócrata de Massachusetts, propuso el Green New Deal.

Los reportes oficiales indican que la concurrencia de los jóvenes fue más importante en dos de las ciudades emblemáticas: Nueva York y Berlín. En la primera, se calcula que desfilaron por la Quinta Avenida más de un millón de jóvenes, a los que las autoridades educativas concedieron asueto para que asistieran en la marcha donde menudearon las pancartas de "Salvar nuestro Planeta", "No podemos decir que no lo sabíamos", "No hay plan B" o "Es la ciencia, estúpido".  En la capital alemana, se unieron a los muchachos miembros de sindicatos, iglesias, empresarios y profesores que señalaron: "El Gobierno no ha hecho lo suficiente. Estamos aquí para que les sirva de motivación".

Aunque el llamado Fridays for Future fue importante y marcó un parteaguas en la actitud de las nuevas generaciones con respecto al planeta, quizá tenga mayor trascendencia la iniciativa de la congresistas neoyorkina que consiste en un plan de acciones concretas y precisas para reducir a cero las emisiones de gases de invernadero con el uso de fuentes de energía alternativas como la solar, la hidráulica y la eólica, a las que se agrega el uso de combustibles no fósiles y renovables.

Importante es que reconoce que el cambio climático es una amenaza directa para la seguridad nacional de los Estados Unidos, que también es la posición de las Fuerzas Armadas. Dado que los EU son responsables de aproximadamente una quinta parte de las emisiones mundiales, y que tiene la capacidad de desarrollar soluciones de alta tecnología, declara que: "Los EU deben asumir un papel de liderazgo en la reducción de las emisiones a través de la transformación económica". 

Para apoyar sus tesis cita los informes de la Organización Meteorológica Mundial, en los que se dice: "1) La actividad humana es la causa dominante observada del cambio. 3) El calentamiento global en o por encima de 2 grados centígrados más allá de los niveles preindustrializados causará: (A) la migración masiva de las regiones más afectadas por el cambio climático; (B) más de $500,000 millones de dólares en pérdida de producción económica anual en los EU para el año 30".

Hoy y mañana se espera que continúen manifestaciones en favor de la conservación del planeta, para llegar a la Cumbre del Clima con muchas esperanzas de que, ahora sí, se cumpla el acuerdo de París y los demás que se han signado en el más alto nivel para detener los estragos que está provocando el acelerado proceso industrial y la guerra comercial que se ha desatado entre las potencias que dominan la economía planetaria. La inclusión de los jóvenes inyecta nuevos bríos. 

El secretario general de la ONU, António Guterrez reiteró que es el movimiento civil lo que llevará al éxito los esfuerzos por salvar la Tierra. "Quiero a toda la sociedad presionando a los Gobiernos para que entiendan que deben ir más rápido, porque estamos perdiendo la carrera, las consecuencias de los desastres naturales son cada vez más devastadoras. La naturaleza está enfadada y no puedes jugársela a la naturaleza, porque te devuelve el golpe". Sin duda alguna.

Por otra parte, reiteró su apoyo al impulso de reformas fiscales que favorezcan el cambio: "Si ponemos un impuesto al carbono y bajamos los impuestos a las rentas de las personas, todos ganan, las clases medias se benefician más que nadie. Se puede plantear una política verde que al mismo tiempo obtenga el apoyo del electorado. ¿Quién paga los subsidios a los combustibles fósiles? Nosotros, que somos los contribuyentes, y yo no quiero que el dinero de mis impuestos sirva para aumentar la acción devastadora de los volcanes o para acabar con los glaciares".