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Transporte como herencia
Con un proceso para desmantelar el Poder Ejecutivo en Tamaulipas, en camino a recibirlo Morena, aún hay áreas estratégicas que desde el Congreso del Estado, le puede arrebatar la fracción del PAN al próximo gobierno de Américo Villarreal.
En los pasillos del Congreso, se presume que a finales del mes de agosto y mediados del mes de septiembre, se puede llamar a una de las dos sesiones extraordinarias que se pueden realizar para hacer nuevas reformas.
Hay información reservada, pero hay legisladores que han pensando en poder descentralizar áreas como la Subsecretaría de Transportes, por ejemplo, que hoy depende de la Secretaría General de Gobierno o bien convertirla en Secretaría.
Incluso se observan áreas como el Registro Civil o el Instituto Catastral que por cierto, están por definir qué cambios poder hacer y que representa una debilidad adicional para el ejecutivo.
Pero si se trata de presupuestos o recaudaciones, el área de la hoy Subsecretaría de Transportes es la que podría ser la más tentadora. El ´mercado´ que tiene esta dependencia, es muy atractivo, incluso para los poderes fácticos.
Por ello, no cualquiera puede estar en esa área que incluso, visto por sus actuales representantes, es un área que debe tener un continuismo en su política interna e incluso, hoy la ven como una dependencia que se puede heredar.
Los legisladores que saben del tema, observan que la actual Subsecretaría ha entablado diálogo con algunos líderes sindicales, principalmente, los que están relacionados de manera sólida con las diferentes ramas del transporte.
Ya han tenido reuniones y lo que está confirmado, es que, buscan heredar el área de transporte, a un Secretario General que, no solo tenga una fuerza política y una clara influencia con los sectores del transporte, también con la Cuarta Transformación, que todo se ´transporte´ en paquete.
De esa manera, el gobernador electo puede ser sorprendido, pero con la posibilidad también, de aceptar la recomendación para que un líder obrero pueda dirigir dicha área.
En especial, por el apoyo que le ha dado a Morena y de esa manera los actuales funcionarios del Transporte, pueden cerrar la pinza de hacer una herencia a uno de sus allegados y no que se exploren muchas cosas en esta dependencia.
Ahora bien, lo que desde el Congreso del Estado se haga, como el proponer que la Subsecretaría de Transporte se convierta en Secretaría, sería algo adicional, pero este proceso tendría que hacerse con el aval de Gerardo Peña que hoy por hoy, tiene los hilos sueltos del poder, porque al final, el primero de octubre él regresa a la Cámara baja como Diputado Federal.
El grito en el cielo.
El PAN y el mismo ejecutivo del estado, ven que al iniciar el proceso de transición y con ello, el proceso de entrega recepción, se hará paralelo a la discusión sobre los resultados electorales en la elección de gobernador.
La etapa de la entrega recepción, inicia el 1 de septiembre y para entonces, se pensaría que la Sala Superior, tendría en su poder el estudio sobre los recursos de inconformidad por el resultado que haya emitido, antes del 20 de agosto, los magistrados del Trieltam.
El Estado, estima entonces que la impugnación por la elección de gobernador, va llegar hasta la Sala Superior del TEPJF, ya sea que el Trieltam les dé o no la razón a los argumentos que han presentado.
Una de las cosas que más llaman la atención, es que es el propio Estado y el PAN, son los más aferrados en mantener la impugnación y no reconocer los resultados, mientras que su candidato a la gubernatura César Verástegui continúa en la ruta de las disculpas por no poder ganar el 5 de junio.