Tania, ¿presidenta del Supremo Tribunal?

Una semana después de haber metido mano para echar abajo, por lo menos de manera temporal, la resolución del Tribunal Electoral de Tamaulipas que avalaba la Diputación Permanente integrada con dos diputados locales de Morena en calidad de secretarios, Horacio Ortiz Renán presentó su renuncia a la presidencia del Supremo Tribunal de Justicia del Estado.

Eso sucedió la noche del miércoles 14 de septiembre, en sesión extraordinaria de la máxima representación del Poder Judicial tamaulipeco.

Su dimisión formaba parte de la jugada cabecista por mantener el control del Supremo Tribunal de Justicia. En su lugar fue designado David Cerda Zúñiga, magistrado presidente que asistió a la toma de protesta del nuevo gobernador de Tamaulipas, Américo Villarreal Anaya.

Con escasa experiencia en la materia, David Cerda llegó a la titularidad del Poder Judicial porque fue jefe de la oficina y supuesto asesor del exgobernador Cabeza de Vaca en los primeros años del sexenio que, entre escándalos, ya culminó.

En ese contexto, en base a las facultades que tiene el Poder Ejecutivo, una de las primeras decisiones políticas y jurídicas que tomó el doctor Américo Villarreal fue no ratificar a Horacio Ortiz Terán como integrante del Tribunal de Justicia, anuncio que se hizo un día antes de que terminara su periodo.

De acuerdo con los requisitos establecidos en el artículo 111 de la constitución tamaulipeca, había un motivo para no darle un periodo más de 6 años: el magistrado cabecista no gozaba con buena reputación.

Este es el primer paso de la Cuarta Transformación para ajustar cuentas con representantes y emisarios del cabecismo. También es un mensaje para los integrantes del Poder Judicial, territorio dominado ampliamente por beneficiarios de los vientos que prometieron el cambio pero que resultó un fiasco, un rotundo fracaso.

Ahora, de acuerdo con el artículo 108 de la Constitución de Tamaulipas, Américo Villarreal tendrá la facultad de proponer un magistrado del Supremo Tribunal de Justicia del Estado. 

El gobernador hará la propuesta y el Congreso del Estado resolverá en un plazo no mayor de un mes. Para ser designado magistrado, la propuesta debe contar con el voto de dos terceras partes de los diputados locales presentes en la sesión legislativa.

Ahí es donde, en una primera instancia, se necesitará de una efectiva operación política, a fin de contar con la mayoría.

¿Quién será la primera propuesta del gobernador Américo Villarreal Anaya para ir abriendo brecha en ese campo minado que es el Supremo Tribunal de Justicia del Estado? El nombre de una mujer parece perfilarse: Tania Gisela Contreras López.

Ella, Tania Contreras, cumple con los requisitos para ser magistrada del Poder Judicial y, en el futuro, si las cosas salen conforme a lo proyectado, ser la presidenta del Supremo Tribunal de Justicia.

Antes, el nuevo gobernador y su equipo tendrán que desactivar bombas políticas y reventar candados legales.

Una de las asistentes a la ceremonia de toma de protesta de Américo Villarreal fue la diputada federal Andrea Chávez.

Ella, oriunda de Ciudad Juárez, es la legisladora más joven del Movimiento de Regeneración Nacional en el Congreso de San Lázaro.

Durante el congreso nacional, Andrea Chávez fue designada secretaria de comunicación del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) de Morena.

La diputada federal, considerada por el presidente Andrés Manuel López Obrador como un ejemplo del relevo generacional de la 4T, se quedó a la comida que se ofreció en el Polyforum y ahí saludó a su amigo, el regidor tampiqueño Juan Pizaña Martínez.

Otro morenista de la escena nacional que estuvo en el evento fue el exvocero de Morena, Diego Hernández Gutiérrez, quien ahora, por cierto, está metido de lleno en el equipo político que trabaja para hacer realidad el proyecto de llevar a Claudia Sheinbaum a la presidencia de México.

A Diego Hernández le tocó estar muy cerca de la campaña del doctor Américo Villarreal y sabe lo complicado que fue resistir las ilegales y desesperadas embestidas cabecistas que tenían por intención robarse la elección.

Pero no solo los morenistas asistieron puntuales a la cita con la historia tamaulipeca, también anduvieron por ahí los empresarios tampiqueños Armando Solbes, Gerardo Sánchez Schutz, José Manuel Arguello Rey, Paco Fernández, Gerardo Tamayo, Juan Antonio Solbes, Adolfo Cabal Ruiz, Fernando Barrera y los hermanos Camilo y Pepe Kuri.

También estuvo Luis Apperti, quien hace seis años, en el arranque del sexenio de Cabeza de Vaca, aprovechó para colocar como representante ejecutivo de las mesas de seguridad y justicia al 'vendedor de espejitos' Joel Vela Robles. Al final, los azules se dieron cuenta de su incompetencia. Esperemos que el gobierno morenista no le haga tanto caso a las sugerencias de Luis Apperti.

José Francisco Rábago Castillo, exalcalde de Tampico y padre de Alejandro Rábago, se dio tiempo para estar presente en la comida. Pepe Rábago fue el titular de la Contraloría en el gobierno de Américo Villarreal Guerra. Desde entonces, ambas familias, los Rábago y los Villarreal, guardan estrecha amistad.

Era el 4 de octubre de 2006. Ese día Esdras Romero Vega recibió la oportunidad de ser candidato a la secretaría general de la Sección Uno del Sindicato Petrolero de la República Mexicana (STPRM), cargo que ganó en una elección.

A partir de entonces, comenzó una nueva época en el organismo sindical con sede en Ciudad Madero, una etapa caracterizada por el trabajo y la unidad.

Eran tiempos difíciles para la Sección Uno: el edificio del sindicato se encontraba en condiciones lamentables, al igual que el Centro de Convenciones; los trabajadores carecían de una caja de ahorros; las deudas presionaban sus finanzas.

Fue cuando se tomó la decisión de volver a cobrar las cuotas sindicales, necesarias para la sobrevivencia de la organización. En sus años de gloria, 'La Quina' decidió la desaparición de las cuotas en la Sección Uno. En el resto de las secciones, el cobro siguió con puntualidad.

Al cobrarse de nuevo las cuotas sindicales, esos recursos ayudaron a reactivar la vida y el patrimonio de la Sección Uno.

Ahora, 16 años después, Esdras Romero ya habla, rumbo al futuro, de una transición generacional por medio de un ejercicio democrático. El dirigente sindical petrolero es un firme creyente de la capacitación y la preparación. La reforma laboral, el cambio continuo, así lo exige.

Uno de esos cambios de fondo es la presencia de 21 mujeres en el comité ejecutivo local de la Sección Uno, algo nunca antes visto en la historia. Para el 2024, la idea es que la presencia femenina prácticamente alcance el 50 por ciento de las posiciones de la dirigencia.

Se reitera, son otros tiempos, eso lo entienden Ricardo Aldana, líder nacional del STPRM; y Esdras Romero, al frente de la Sección Uno.

En ese tenor, de lo que se siente más orgulloso Esdras Romero en estos 16 años de trabajo y esfuerzo, es de la unidad que se vive en la organización sindical de mayor importancia del sur de Tamaulipas. Una unidad vista como fortaleza.

Irving Barrios, fiscal general de justicia del estado, volvió a aparecer con semblante serio y tranquilo en un encuentro con el nuevo gobernador tamaulipeco, Américo Villarreal Anaya.

Esto se dio en la segunda reunión del grupo de la Coordinación para la Construcción de la Paz en Tamaulipas, en el que se anunció el despliegue de 600 soldados de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) en la región sur.

Una vez más, el fiscal mostró una conducta colaborativa, institucional, cuya interpretación es que quiere evitar confrontaciones y, por ende, desea llevarse la fiesta en paz con el primer gobierno de la Cuarta Transformación en Tamaulipas.

Al final de 'La Mañanera' de ayer, el presidente Andrés Manuel López Obrador confirmó lo que se adelantó en esta columna, su visita a la Refinería Madero el próximo domingo 9 de octubre.

Será una más de sus acostumbradas giras para supervisar las plantas refinadoras del país, recorrido que iniciará el siguiente viernes en Paraíso, Tabasco. También observará los avances registrados en las refinerías de Minatitlán, Veracruz; Tula, Hidalgo; Salamanca, Guanajuato; y finalmente, en jornada dominical, Ciudad Madero, en el sólido sur tamaulipeco.