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Modernización del programa de incapacidad
El Seguro Social moderniza el programa de incapacidad. Décadas de reglas han sido actualizadas para reflejar la fuerza laboral de hoy.
La incapacidad es un tema del que posiblemente haya leído en el periódico pero no lo considera como algo que pudiera sucederle.
Sin embargo, sus probabilidades de padecer de una incapacidad son mayores de las que se imagina.
Los estudios muestran que una de cada cuatro personas, entre las edades de 20 a 29 años hoy día, padecerán de una incapacidad antes de cumplir los 67 años de edad.
La regla de incapacidad que fue introducida a la agencia por primera vez en el 1978 y que se había mantenido sin cambio.
La nueva regulación, elimina la inhabilidad de comunicarse en el idioma de inglés como categoría educativa, actualiza una regla de incapacidad que tenía más de 40 años y no reflejaba el trabajo en la economía moderna.
Esta regla final había estado en proceso durante varios años y desde finales del 2020 actualiza una política anticuada que hace que la inhabilidad para comunicarse en el idioma de inglés fuese un factor en la concesión de beneficios por incapacidad.
La fuerza laboral y las oportunidades laborales han cambiado y las regulaciones antiguas deben revisarse para reflejar el mundo de hoy.
Es importante que tengamos un programa de incapacidad actualizado.
El Seguro Social paga beneficios a personas que no pueden trabajar porque tienen un padecimiento médico que se espera que dure por lo menos un año o resulte en muerte. Las leyes federales requieren que la definición de incapacidad sea estricta.
El Seguro Social no otorga dinero a personas con incapacidades parciales o a corto plazo de tiempo como otros programas.
Es requerido que el Seguro Social considere la educación para determinar si la condición médica de alguien le impide trabajar, sin embargo, la investigación demuestra que la inhabilidad de comunicarse en el idioma de inglés ya no es una buena medida del logro educativo o la capacidad de participar en la fuerza laboral. Esta regla es otro paso importante en los esfuerzos de la agencia para modernizar sus programas de incapacidad.
En 2015, el Inspector General del Seguro Social recomendó que la agencia evalúe la calidad de esta política.
El Seguro Social se lo debe al público que reside en los Estados Unidos, para asegurarse que sus programas de incapacidad continúen reflejando las realidades de la fuerza laboral moderna.
Esta regla de la Administración del Seguro Social respalda el enfoque de información que ha existido por mucho tiempo de reconocer que las personas con una incapacidad puedan permanecer en la fuerza laboral.
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