Columnas > EN LA PELOTA
Mi respetado Presi:
Hoy justamente, ¡hoy lunes cinco de junio!, el desastre hubiera sido devastador para el mundo entero. Como la crisis de 1929, pero no en aquellas proporciones reducidas, sino en la medida de los multimillones de ahora.
Justamente amigo Presidente, cuando se han hecho comparaciones de sus honorarios, 408 mil dólares anuales, con los de los novatos en Grandes Ligas, 720 mil, más el bono, que fácilmente sobrepasa los dos millones. Además, hay bigleaguers contratados de por vida hasta por más de 400 millones.
Incongruente, que, mientras en Grandes Ligas, y en otros deportes, el dólar se cuente por cientos y miles de millones, la Nación tenga esa peligrosa deuda de 31mil 400 millones, la cual ha amenazado al mundo con una crisis rumbo a la miseria.
Ha sido para aplaudir lo logrado por Ud. con el líder republicano Kevin McCarthy, para desaparecer esa amenaza del default que estallaría hoy. Ahora se espera la aprobación del Congreso, que se prevé posible y que tengamos con qué pagar en el nuevo plazo, para entrar en el desahogo económico que merece esta Unión.
Desde luego, igual que Ud. el señor McCarthy merece reconocimiento público. Ambos dejaron a un lado los detalles de los Partidos, para evitar ese posible drama, catástrofe mundial.
Me ha atrevido a escribirle, porque fui el primer jugador de beisbol cuyos honorarios compararon con los del Presidente de Estados Unidos.
Como Ud. ha vivido atareado con sus responsabilidades políticas, quizá desconoce el caso. Por eso se lo voy a relatar, tal y como lo han escrito algunos historiadores:
"En 1932, un reportero le preguntó a Babe Ruth, ¿Qué dice de su sueldo (75 mil dólares), superior al del Presidente de Estados Unidos, Herbert Hoover (40 mil)? Y Ruth respondió: "Sí, es que el año pasado yo tuve mejor temporada que él".
O sea, amigo Presidente, hace más de 90 años que comparan lo que ganan los peloteros, con los sueldos de Uds. los jefes de la Casa Blanca.
Mire cómo me enteré: "Joe Biden y Kevin McCarthy, líder republicano de la Cámara Baja, finalizaron un principio de acuerdo sobre el aumento del techo de la deuda, anunciado un día antes y que permite alejar la amenaza de un default el cinco de junio, día en el cual el Tesoro prevé que el gobierno empezará a quedarse sin fondos para hacer frente a sus cuentas.
"El acuerdo suspende el techo de la deuda federal, de 31 millones 400 mil dólares, durante dos años, lapso suficiente para atravesar los comicios presidenciales venideros de 2024 y facilitar que el gobierno continúe pidiendo dinero prestado y con solvencia".
Un abrazo, señor Presidente... Babe.