Los cambios... y los abusivos

Después de un proceso electoral muy polarizado y álgido que insinuaba un alto grado de competencia, ahora el gobierno de Américo Villarreal debe iniciar un proceso de "auscultación" y evaluación en sus principales áreas.

Esta aparece como una oportunidad para identificar las áreas que están fuertes, aquellas que requieren fortalecerse en lo interno, pero sobre todo realizar un diagnóstico de aquellas que tienen problemas anémicos en lo administrativo y en su trato al personal.

Los cambios... y los abusivos

Serían aquellas dependencias cuyos titulares no pueden generar suficiente y buen oxígeno para los órganos clave del gobierno, por lo que deben ser las primeras en someterse a revisión.

Por ejemplo, áreas de la Secretaría de Finanzas, Administración e incluso  la Secretaría General de Gobierno deben ser pasadas por esa criba de revisión.

Al interior de Auditoría Fiscal, dependencia de Finanzas, existen mandos que no solo exigen a sus trabajadores cumplir sus responsabilidades, sino también les gritan, acosan laboralmente y les hacen reclamos sin  haber motivos justificados por lo que están creando un problema grave en esa área.

Quienes actúan de esa forma, quizás no reciban la sanción que ameritan,  pero impactan negativamente en el Poder Ejecutivo.

El Ipsset, es una de las áreas donde existen denuncias por abusos similares que no se han podido erradicar.

Ahí se acusa a una persona, sólo identificada como la Lic. Gaby,  que es muy allegada a la abogada estrella del Gobierno del Estado, Tania Contreras. 

Ahí se asegura que es grave, la explotación al personal  por lo que si se   presentaran denuncias en  reclamo de respeto a los Derechos Humanos, sería un problema  que escale más allá de lo interno.

En algunas dependencias, el poder que ejercen muchos funcionarios,  y en particular  las jefas, es reprochable por su intransigencia y abusos.

Algunos que  son  parte de la Cuarta T se han hecho a la idea que  después del 2 de junio tienen todo ganado por lo que han alimentado prepotencias y conductas contrarias al humanismo que impulsa el gobernador, por lo que deben tener mucho cuidado al cometer esos excesos.

 Existen áreas que, aunque no están provocando males administrativos es urgente que sean sometidas  a una revisión minuciosa, como sucede en  la Secretaría General de Gobierno.

Ahí, son dos años en los cuales funcionarios cómo Tomás Gloria Requena, el mismo Secretario General Héctor Villegas, Jorge Beas y Rómulo Pérez han encaminado a la dependencia  hacia la estabilidad, para lo cual han enfrentado retos.

Los inicios siempre han sido difíciles para muchas administraciones, pero en el caso particular de esta dependencia,  han sido incorporados   otros actores a enriquecer esa  labor. Esta parece ser un área donde existen  funcionarios que pueden ser útiles en otros espacios del gobierno.

Uno de los rubros que han marcado a esta dependencia son los conflictos internos. Sin embargo, hay personal como; Gloria Requena que  tiene oficio y puede  fortalecer otras áreas.

Como también sucede con  Rómulo Pérez, quien pertenece a una generación que ha participado en la operación política y tiene experiencia en lo administrativo. Por lo que son parte  de ese grupo que debe ser aprovechado en otros espacios,  luego que han sabido separar la grilla  y realizar bien la chamba, lo cual aporta muchos beneficios.

Hay otros funcionarios con cargos importantes que deben reflexionar sobre el poder que tiene Morena ahora,y asumir su responsabilidad con humildad, no con soberbia y abusos que fueron las actitudes que asumieron los panistas y que la gente acabó depreciando y que por ello, una buena parte representó la expulsión del gobierno. Por ello se debe entender que no se trata de humillar para demostrar poder. 

El actual jefe del estado, Américo Villarreal, ha puesto el ejemplo y ha recomendado ofrecer un buen trato a los trabajadores. Cuida a su gente y, en la medida de lo posible, responde a casi todos los planteamientos y aunque algunas respuestas pueden tardar, siempre se les da seguimiento.

Este puede ser un momento para definir los cambios, especialmente en aquellos espacios y dependencias que son claves para el Estado.

Salud

En unas semanas, Adolfo Sierra se convertirá en uno de los ´feudales´ del sindicalismo en Tamaulipas con gran poder  en gran parte del país.

Como líder del Sindicato Nacional de los Trabajadores de la Secretaría de Salud, por lo que mantiene el control interno y externo, acorralando al actual gobierno con chantajes y amenazas que le han dado resultado.

Sierra, quien tiene en sus espaldas un proceso judicial en marcha, también obtendrá control sobre las condiciones laborales de burócratas estatales al concretarse  la transferencia al IMSS-Bienestar.

No es que Sierra haya logrado una nueva presión e intimidaciones como suele hacerlo; el artículo 11 del decreto presidencial establece que será el sindicato mayoritario el que tendrá este beneficio.

Con este poder, no solo tomará edificios públicos, sino que, si no le quieren pagar desde una carne asada y plazas laborales, podría paralizar hospitales.