Lázaro de Tormes: Novela Picaresca

España durante los siglos XVI y XVII cuando se encontraba a la vanguardia y eran prácticamente los amos del mundo, es aquí cuando surge el arquetipo del pícaro.

Dicho personaje surge debido a que en ese tiempo el imperio español estaba beligerantemente ocupado y esto causaba bajas entre los soldados que a su vez iban dejando huérfanos que tenían que buscarse la vida en una España cada vez más pobre, más avara y más hambrienta. De hecho es el hambre quien funge como inseparable compañera de estos peculiares personajes.

Estos personajes como todo evolucionaron dentro del mismo crecimiento de la literatura. 

Empezaron a aparecer en otros países y en otras épocas como por ejemplo en Inglaterra el afamado Oliver Twist de Dickens o en Francia el legendario Remi de Héctor Malot que durante los años ochenta la serie de animación japonesa de Remi cuyo título original es Sin familia fue un trancazo televisivo entre los niños de aquella época. 

De hecho la picardía juega un papel de suma importancia en la literatura mexicana. El Periquillo Sarniento. Fernández de Lizardi da vida a un ingenioso y cómico antihéroe que acaparó la atención de los lectores en los albores de la nación.

En España hubo más pícaros que gozaron de popularidad como por ejemplo; El Guzmán de Alfarache de Mateo Alemán.

Por su parte el más grande escritor de todos los tiempos en lengua castellana, Don Miguel de Cervantes contribuyó a la picaresca con un par de parejas inolvidables; por un lado Rinconete y Cortadillo picaros cuya historia se desarrolla y Sevilla y Ciprión y Verganza un par de perros a los cuales Cervantes mediante la prosopopeya otorga cualidades características del antihéroe.

El Lazarillo surge de carácter anónimo en 1554 en Flandes, hoy Holanda. Era precisamente ahí donde los trabajos de impresión resultaban menos costosos. De hecho hay quien dice que fue en Flandes donde vio la luz por primera vez Don Quijote de La Mancha.

El lazarillo rápidamente adquirió gran popularidad entre el público lector y tubo muchísima aceptación pero claro, que siempre hay un pero, dicho libro se colocó inmediatamente dentro de la lista de libros prohibidos por la inquisición por su carácter heterodoxo y por los flagrantes ataques que este personaje hacía en contra de la iglesia. Obviamente esto gusto mucho en Flandes ya que los lectores en su mayoría protestantes disfrutaban leyendo como lázaro desenmascaraba las costumbres y defectos del clero español.

Si bien es cierto que el nombre de la novela es el de Lazarillo es de aquí donde la palabra que se utiliza para guiar a una persona invidente toma fuerza. De hecho en su primer tratado del cual hablaremos en nuestro próximo artículo Lázaro se catapulta a la inmortalidad al guiar a su terrible primer amo que era un ciego y es este quien da a Lázaro las armas para poder luchar en la vida.

En fin, la importancia de El Lazarillo radica en que fue esta novela la que va a establecer las normas para la novela moderna. Dotada de un punto de vista más crítico, con mayor cinismo y con un realismo social sin precedentes muestra al mundo una visión mucho más objetiva de España y más alejada de la imagen que la monarquía y el clero querían proyectar demostrando así la importancia de la literatura como medidor de la situación político-social de un pueblo.

Para concluir con el artículo me despido esperando que tengas una semana muy aprovechada y llena de mucha lectura y descubrimiento. 

Aprovecha cada día al máximo, "Carpe Diem".

¡Hasta la lectura siempre!