El PRI está de regreso... a través del PAN y de Morena

Cuando los tamaulipecos despertamos, el dinosaurio todavía estaba allí...

Al estilo del breve relato literario de Augusto Monterroso que arroja múltiples reflexiones, la confusión y la incertidumbre que prevalecen en el escenario político estatal (y nacional) nos conducen a una conclusión: cuando la sociedad tamaulipeca despertó, el dinosaurio priista todavía estaba allí, 'vivito y coleando'.

Sin embargo, registró una variación de manera espontánea y súbita: tras el arribo del sueño democrático y de la alternancia registrada en 2016 en tierras del Nuevo Santader, el dinosaurio dejó de ser tricolor.

Como si fuera un virus, sufrió una o, mejor dicho, varias mutaciones. Hábil como es, guiado por el instinto de supervivencia, el dinosaurio cambio de color y se adaptó a los nuevos tiempos.

Ahora, con el cinismo y la desfachatez que lo caracterizó durante sus 86 años en el poder, el dinosaurio viste una casaca color azul.

Así es: El dinosaurio, esa especie que todos creían extinta con la llegada de 'Los Vientos del Cambio', es ahora candidato del PAN, ya sea titular o suplente, a las presidencias municipales, las diputaciones locales y las diputaciones federales de Tamaulipas.

El ejemplo más aberrante de todos: Oscar Almaraz Smer. Ver para creer: el secretario de Finanzas del gobierno de Eugenio Hernández Flores se registró ayer como aspirante a la candidatura de Acción Nacional a la diputación federal por el Quinto Distrito, con cabecera en Ciudad Victoria.

Los excesos administrativos y financieros del sexenio de Eugenio Hernández Flores (encarcelado por el gobierno cabecista) pasaron por las manos de Oscar Almaraz... hoy virtual candidato panista a diputado federal por la capital del estado. ¿Acaso eso no es una incongruencia?

¿Y qué tal el suplente de Almaraz?... El hijo de Blanca Valles Rodríguez, una lideresa que tiene más de 30 años al frente del Sindicato Único de Trabajadores al Servicio (literal) de los Poderes del Estado de Tamaulipas (SUTSPET), ocupará la candidatura suplente del PAN a la diputación federal en el Quinto Distrito.

Quienes creían haber visto todo con la renuncia al PRI de Yahleel Abdada para ser candidata del PAN a la presidencia municipal de Nuevo Laredo, se toparon con otra 'sorpresa': la priista Mónica González García, opaca y grisácea secretaria de Desarrollo Económico durante una parte del mandato de Egidio Torre Cantú, fue adoptada por el partido blanquiazul para postularla como candidata a la diputación federal por el Cuarto Distrito, con sede en Matamoros.

De Yahleel Abdala, cuya dimisión al priismo fue polémica y escandalosa a finales del año pasado, todavía se entiende que el panismo la haya seducido para ser su candidata a la alcaldía de Nuevo Laredo. Yahleel tiene discurso, personalidad y carisma, de eso no hay duda. Pero... el caso de Mónica González, 'La Gris', es... ¡¡¡incomprensible!!!

Bueno, todos saben que detrás de Mónica González, 'La Gris', se encuentra el exgobernador de Tamaulipas, Egidio Torre Cantú, quien desde su residencia en San Pedro Garza García, en Nuevo León, mueve sus escasas piezas en el ajedrez político tamaulipeco en el escenario 2021.

Egidio Torre, aliado incondicional de 'Los Vientos del Cambio' desde la elección de 2016, prohibió a su sobrino Carlos Morris Torre que se postulara como candidato del PRI a la alcaldía de Ciudad Victoria, a fin de no estropear y obstaculizar los planes albiazules en Ciudad Victoria con Pilar Gómez. El sobrino obedeció sin chistar a su estimado tío.

Como un grito de guerra, una frase retumbó a lo largo y ancho de Tamaulipas en aquél proceso electoral de 2016: '¡De que se van, se van!'...

Cientos de miles respaldaron con su voto esa frase convencidos de que la larga época del Revolucionario Institucional llegaría a su fin.

No obstante, los priistas no se fueron... siguen allí... ahora como candidatos titulares o suplentes del PAN a las alcaldías, así como a las diputaciones locales y federales...

Pero los priistas no sólo se visten de azul... No, el dinosaurio, ya lo describimos, se comporta como un virus, registra mutaciones y variantes.

Con una impresionante capacidad de adaptación, el dinosaurio también muta en color guinda cuando le conviene y comienza a hablar, con solemne seriedad, de que Tamaulipas y México necesitan una Cuarta Transformación.

¿Qué les parece el grotesco y 'rollero' ejemplo de Felipe Garza Narváez? El tampiqueño/victorense fue diputado local tres veces por el PRI, su otrora partido, en el que militó por décadas. Es más, fue líder del Congreso del Estado en el último tramo del sexenio de Eugenio Hernández Flores, de quien también fue su secretario particular.

Desde 2017, el dentista Felipe Garza Narváez se dice lopezobradorista, morenista y creyente de la Cuarta Transformación. El ex priista quiere a toda costa ser el candidato de Morena a la diputación federal por el Quinto Distrito, con cabecera en Ciudad Victoria, en este año.

En caso de lograr el objetivo de ser postulado, Felipe Garza Narváez enfrentaría a otro ex militante del tricolor, Oscar Almaraz, vestido ahora de azul. El otro candidato, el del PRI, sería Enrique Cárdenas del Avellano. Sería una confrontación entre priistas. Para el elector, todo quedaría como en 'el juego de la bolita'.

Qué decir de tantos otros ex priistas que ahora portan la camiseta guinda de Morena: Javier Villarreal Terán, Pedro Carrillo Estrada, Olga Sosa Ruiz, Lalo Gattás, Eduardo Hernández Chavarría, José Luis Ornelas Aguilar y muchos más que configuran una larga lista.

Pero ojo, mucho ojo: El dinosaurio no solo muta a color azul o guinda. También adopta el verde o el naranja. Es un dinosaurio que tiende a ser multicolor con tal de sobrevivir.

El ex priista Tomás Gloria Requena, ex alcalde de San Fernando, es actualmente el secretario general adjunto del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) en Tamaulipas y virtual candidato de la alianza de 'El Tucán' con Morena y PT a la diputación federal por el Tercer Distrito.

Oscar Lacio, ex funcionario priista que aspiró durante un buen tiempo a ser el candidato tricolor a la alcaldía de Altamira, es ahora la carta de Movimiento Ciudadano a la diputación federal por el Séptimo Distrito.

Todo esto nos lleva a una pregunta: ¿La culpa es de los priistas que han sido invitados o convocados por azules, guindas, verdes, naranjas, amarillos o el color que sea? Bien dice la sabiduría popular: 'La culpa no es del priista, sino de quien lo hace compadre'.

La otrora oposición, ya sea de derecha o de izquierda, del viento del cambio o de la cuarta transformación, no ha logrado crear y consolidar cuadros competitivos para afrontar las elecciones del nuevo tiempo mexicano, un nuevo tiempo democrático que se caracteriza por la incertidumbre, la confusión y el vacío ideológico.

En ese contexto, donde el pragmatismo aniquila el sueño democrático, el dinosaurio sigue allí, solo que ahora es un dinosaurio vestido de azul... o guinda. 

Así es: el PRI está de regreso... a través del PAN o de Morena... Esa es la realidad.

CHUCHO NADER: EL ALCALDE CON MAYOR APROBACIÓN CIUDADANA DEL PAÍS

La más reciente encuesta aplicada por Massive Caller confirma a Jesús Nader Nasrallah, presidente municipal de Tampico, como el alcalde con el mayor porcentaje de aprobación ciudadana del país: 63.3 por ciento.

Chucho aparece con suma frecuencia en estos sondeos, como sucedió en semanas recientes con la encuesta aplicada por Consulta Mitofsky, donde se ubica en el Top Five.

El alcalde, de extracción panista, va por su reelección en tierras jaibas y pinta como amplio favorito. Por supuesto, tal como lo ha dicho en diversas entrevistas, no se confía. Todo lo contrario: redobla esfuerzos y actividades.

Hace unos días, por ejemplo, inauguró la pavimentación a base de concreto hidráulico de una calle más, ahora en el popular sector 'El Golfo'. La obra ascendió a 3.2 millones de pesos de inversión.

El propósito del gobierno porteño que preside Chucho Nader es rebasar las 400 cuadras pavimentadas en el periodo 2018-2021. Esa es la meta. Seguramente la logrará.

Y PARA CERRAR...

Armando Martínez Manríquez, para quien está prácticamente reservada la candidatura de Morena a la alcaldía de Altamira, se registró ayer como aspirante a la nominación.

De cumplirse el pronóstico, Armando Martínez será el adversario -acérrimo, no hay duda- de Ciro Hernández, candidato del PAN, en la contienda por la presidencia municipal altamirense. El duelo electoral será candente.

Por cierto, Armando y Ciro, no lo pueden negar, fueron priistas.