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El hijo de Maki y el coqueteo con Morena
Las pláticas, intensas de principio a fin, se llevaron a cabo la semana pasada en la Ciudad de México.
Los protagonistas de la historia: Mario Delgado Carrillo, presidente del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), y Carlos Peña Ortiz, presidente del Patronato del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF) en Reynosa.
Sin participar en la mesa de negociaciones instalada en la capital del país, a distancia, desde Reynosa, la alcaldesa, todavía panista, Maki Ortiz Domínguez, movía en tiempo real sus fichas en el tablero morenista del 2021 tamaulipeco.
El primer movimiento o, mejor dicho, planteamiento de Maki, fue directo: su hijo, Carlos Peña Ortiz, sería el candidato de Morena a la presidencia municipal de Reynosa.
La jugada, cantada desde hace mucho tiempo, garantizaba, sin duda, la victoria de la Cuarta Transformación en la contienda electoral de la estratégica ciudad fronteriza.
Sin embargo, algo no gustó de ese planteamiento desde el inicio y desde la óptica de los principios de la moral política lopezobradorista: Maki Ortiz, actual alcaldesa de Reynosa, entregaría el poder del gobierno municipal a su hijo.
Mario Delgado no aceptó la oferta. Nunca dudó de que Maki y su hijo ganarían la elección, pero nunca le agradó la forma y el fondo. Todo quedaría en familia.
El presidente nacional de Morena pidió otra alternativa para que Carlos Peña Ortiz se sumara a Morena como candidato.
Tras consultar con su mamá, la presidenta municipal, el joven puso sobre la mesa la siguiente opción, una fórmula que, afirmó, sería ganadora: José Ramón Gómez Leal, mejor conocido como 'El JR', sería el candidato a la alcaldía; y él, Carlos Peña Ortiz, sería el aspirante de Morena a la diputación federal por el Segundo Distrito.
Efectivamente, la fórmula de 'El JR' y del hijo de Maki, con la bandera de la 4T, seguramente sería arrolladora en las urnas reynosenses. José Ramón Gómez Leal aparece arriba en todas las encuestas aplicadas hasta el momento.
Sin embargo, Mario Delgado, tras consultarlo con los líderes del grupo morenista tamaulipeco más cercano a él, desechó esa posibilidad y rechazó establecer un acuerdo con Maki Ortiz Domínguez para ganar Reynosa. Hasta ahí llegó la negociación.
El grupo morenista tamaulipeco más cercano a Mario Delgado, donde figura el diputado federal Erasmo González Robledo, busca que el diputado local Rigoberto Ramos Ordoñez sea el candidato a la presidencia municipal reynosense. Otro que quiere ser nominado es el legislador federal Armando Zertuche, pero los sondeos no lo favorecen.
Además, José Ramón Gómez Leal expresó en varias ocasiones que no quería ser otra vez candidato a la alcaldía de Reynosa y, por esa razón, no renunció en tiempo y forma (a finales de octubre del año pasado) a la Super Delegación de los programas federales en Tamaulipas, tal como lo pidió el presidente Andrés Manuel López Obrador a todos los funcionarios de su gobierno que quisieran participar en la contienda electoral de 2021.
Al no ir a las urnas el 6 de junio, 'El JR' ha impulsado desde hace tiempo a la regidora morenista Claudia Hernández para ser la candidata de la 4T a la alcaldía de Reynosa.
Así acabó, en medio de la desilusión y el desencanto (aunque hubo momentos de éxtasis), el coqueteo de Maki Ortiz y su hijo Carlos Peña Ortiz con Morena... al menos hasta el momento... El 2022 será otra historia.
LOS PANISTAS MIGUEL PÉREZ Y SILVIA CACHO... ¿SE VAN A MOVIMIENTO CIUDADANO?
La invitación ya se las hizo Gustavo Cárdenas, coordinador operativo estatal de Movimiento Ciudadano, a dos personajes de la zona sur que militan en el Partido Acción Nacional (PAN) desde hace 25 años: el tampiqueño Miguel Pérez Álvarez y la altamirense Silvia Cacho Tamez.
Ambos aspiran a ser candidatos a diputados locales. Miguel, combativo ex regidor porteño, quiere competir por el Distrito 22, que abarca la zona sur de Tampico. Silvia, histórica panista de la tierra del Puerto Industrial, busca ir a las urnas por el Distrito 18, que comprende el área norte de Altamira y el municipio de Aldama.
Tanto Miguel Pérez como Silvia Cacho han sido marginados y relegados por los altos mandos del partido blanquiazul. De un tiempo a la fecha, no los toman en cuenta.
Por ejemplo, Silvia Cacho fue 'borrada' del padrón panista. En noviembre de 2020 ya no apareció en el listado. Afirma que la 'borraron' por haber apoyado a Margarita Zavala, cuando la esposa de Felipe Calderón visitó Tamaulipas en 2017 en su búsqueda por ser la candidata presidencial azul, aventura que terminó con su salida del partido.
Silvia Cacho simpatizaba con el partido fundado por Manuel Gómez Morín desde 1992 y militó de manera activa a partir de 1996. Durante 10 años, de 2001 a 2011, fue la presidenta del PAN en Altamira. En el periodo 2005-2007 fue regidora.
Tan aguerrida fue que una denuncia que ella interpuso ante la Comisión Permanente del Congreso de la Unión puso en evidencia un escándalo que derivó, en parte, en el declive y encarcelamiento de los exgobernadores Tomás Yarrington Ruvalcaba y Eugenio Hernández Flores.
La panista denunció la venta fraudulenta de un predio de mil 600 hectáreas en la costa de Altamira, terreno que quedó a nombre del tristemente célebre constructor Fernando Cano Martínez, que en esa época se enriqueció a manos llenas gracias a los contratos que le otorgó, sobre todo, Tomás Yarrington, quien hoy está tras las rejas en una prisión texana.
Existe otro ofrecimiento partidista para Silvia Cacho: el Partido de la Revolución Democrática (PRD) la quiere postular a la alcaldía de Altamira. Sin embargo, ella apunta al Congreso del Estado, su deseo es legislar y contribuir en la creación de equilibrios y contrapesos al poder del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Por su parte, Miguel Pérez Álvarez todavía es militante del PAN, pero las designaciones de las suplentes a las diputaciones tampiqueñas, la federal, por el Octavo Distrito; y la local, por el Distrito 22, colmaron su paciencia y está prácticamente decidido a aceptar la invitación que le hizo desde el sábado pasado Gustavo Cárdenas. De hecho, ayer, a temprana hora, volvió a hablar con el líder naranja.
El ex regidor panista recibió dos ofertas de MC: ser candidato a la presidencia municipal de Tampico, la que rechazará; o postularse en busca de la diputación local por el Distrito 22, la que muy posiblemente acepte.
¿Por qué le agrada más la nominación a diputado local? Por una simple razón: en 2010 compitió por ese Distrito y, de acuerdo a ciertas evidencias, ganó en las urnas, pero le robaron la elección y Rosa Muela, entonces priista, llegó al Congreso del Estado. De manera sospechosa, el cuerpo jurídico del partido blanquiazul no lo respaldó en sus demandas interpuestas ante la autoridad electoral.
Cuando apenas se incorporaba como militante de Acción Nacional, Miguel Pérez Álvarez participó en aquél programa puesto en práctica por el gobierno de Diego Alonso Hinojosa denominado 'Adopta una Plaza'. Miguel, con recursos de su empresa, rehabilitó la Plaza 20-30. Juntos, el alcalde y el empresario, la inauguraron en aquellos años.
Tanto Miguel Pérez como Silvia Cacho son dos de los muchos panistas que se han decepcionado con las errantes decisiones de su partido al llegar al poder.
¿Se convertirán en Ciudadanos en Movimiento?... El 2021 tamaulipeco se pone cada vez más emocionante.
MAX CORTÁZAR LLEGA OFICIALMENTE A TAMAULIPAS...
El mejor columnista político del país, Salvador García Soto, ya había anunciado hace varias semanas la llegada de Max Cortázar al manejo de la imagen y opinión pública del gobierno de Tamaulipas. Algunos, los despistados de siempre, trataron de desmentir esa información.
Francisco García Cabeza de Vaca, gobernador del estado, entregó ayer el nombramiento de Coordinador General de Difusión, Opinión Pública e Imagen a Gerardo Maximiliano Cortázar Lara, experimentado comunicador.
Max Cortázar laboró en los dos sexenios panistas: con Vicente Fox y con Felipe Calderón, donde asumió la Coordinación General de Comunicación Social de la Presidencia de la República entre 2006 y 2010. Posteriormente, participó en la precampaña de Ernesto Cordero y, luego, en la campaña perdedora de Josefina Vázquez Mota en 2012.
No obstante, el comunicador, dentro de los amarres pactados por el calderonismo, llegó a la Cámara de Diputados por la vía plurinominal.
Antes de concluir su gestión legislativa, se sumó al gabinete de Rafael Moreno Valle, entonces gobernador de Puebla y quien falleció, siendo senador, la tarde del 24 de diciembre de 2018, junto con su esposa y ya gobernadora, Martha Erika Alonso, al caer, en extrañas y sospechosas circunstancias, el helicóptero en el que se trasladaban a la Ciudad de México.
El experimentado Max Cortázar llega a Tamaulipas justo cuando el gobierno cabecista necesita, con una estrategia profesional, comunicar mucho mejor su proyecto político estatal y, por supuesto, nacional, en un candente contexto electoral que no será sencillo para Los Vientos del Cambio, pero que, en caso de salir avante, lo catapultará hacia los escenarios del 2024.
El gobierno estatal blanquiazul requiere comunicarse con todos y no solo con unos cuantos.
Y PARA CERRAR...
Mario Delgado, presidente nacional de Morena, no solo llegará a Tamaulipas con un nuevo delegado sino... con cuatro (¿o cinco?) sorpresas.