Columnas

El ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha

  • Por: EUGENIO MILLA
  • 30 AGOSTO 2020
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El ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha

Escaso y desocupado lector, dejando por un lado las crónicas de indias por unas cuantas ediciones, quisiera acercarte a un libro que es el parteaguas no solo de la literatura en lengua castellana sino que es ese libro el que marca la pauta en la literatura universal. Me refiero a Don Quijote de la Mancha. 

En si, al referirnos a Don Quijote de la Mancha estamos haciendo referencia a dos libros; en primer término al Ingenioso hidalgo Don Quijote de la Mancha (1605) y en segunda instancia a El ingenioso caballero Don Quijote de la Mancha (1615).

Antes de entrar de lleno en materia quijotesca es importante hacer un dibujo preciso de cómo es que fue la concepción de esta magnífica obra de la literatura.

Para poder entender de entrada lo que es el Quijote es necesario que primero conozcas  a su creador, me refiero al gran Miguel de Cervantes Saavedra. Nacido en el seno de una familia humilde, ve la luz en la localidad de Alcalá de Henares provincia de Madrid hacia el año de 1547. 

Siendo hijo de un cirujano barbero, Cervantes crece con ese ejemplo al cual rendirá pleno y merecido tributo dentro de su obra maestra. De hecho, la imagen que todos tenemos de Don quijote es aquella que surge después del capítulo conocido como el Yelmo del Mambrino en el que nuestro caballero despoja a un cirujano dentista de su bacía de azófar y se la coloca en la cabeza. 

Según la leyenda, el yelmo del mambrino era un artefacto de poder perteneciente a un rey moro y se dice que quien lo portara jamás podría ser herido en batalla. 

Si piensan en don Quijote, ese raro sombrerito al cual le hace falta un pedazo en la visera no es otra cosa que el yelmo, pero lo que es en realidad es un platillo que se utilizaba para poner agua para hacer las rasuras o también servía para los objetos y las piezas dentales en caso de que el cirujano tuviera que hacer una extracción.

Cervantes en su juventud y debido a un problema de tipo legal tiene que abandonar España, así que se enlista en la armada  y es en esta aventura en donde pierde el uso de su mano izquierda. 

Esta acción le ganó el sobrenombre de "El manco de Lepanto" ya que tuvo el accidente ocurrió en la  batalla naval de Lepanto luchando contra los turcos. Recordemos que en este momento el imperio Otomano es el que controla el fondo del Mediterráneo y por ende el Canal de Suez, las tropas españolas querían abrir camino a Asia para poder comerciar.

En su viaje de regreso a España, Cervantes cae prisionero de unos piratas turcos y pasa cinco años prisionero en Argel. 

Pero no todo fue tan malo acerca de su estadía en prisión ya que de esta experiencia logrará escribir El prisionero de Argel.

Ya de regreso en España, consigue un trabajo como administrador de la armada invencible y por un faltante de fondos es encarcelado, y es en prisión donde da rienda suelta a su ingenio y crea la primera parte de Don Quijote de La Mancha, es decir El ingenioso hidalgo. L obra fue publicada en 1605 y al parecer no fue impresa en España, sino en Flandes donde el costo era más económico. 

De esta acción se desprende una de las incógnitas más grandes de la historia de la literatura; ¿En dónde quedó el manuscrito original?, nadie lo sabe aún pero seguirá siendo un misterio que impregna a la novela de un misticismo especial. 

Una vez publicado el Quijote aparece por ahí la segunda parte en la que como autor figura un tal Alonso Fernández de Avellaneda. 

Este es el segundo gran misterio que rodea a la novela, ya que se cree haya sido publicado por alguno de los enemigos literarios de Cervantes, hay quien piensa que fue obra de Félix Lope de Vega y Carpio.

El Quijote apócrifo, publicado en 1614 en Tarragona, España, salió a la luz con la finalidad de perjudicar y ridiculizar a Cervantes. 

De hecho y tocante al tema existe una novela policiaca de Alfonso Mateo-Sagasta que trata de este tema, que dicho sea de paso se las recomiendo ampliamente. Se titula Ladrones de tinta y es una obra que los llevará por el Madrid del Siglo de oro, en ella verán o leerán a muchos de los grandes personajes de la época.

En 1615, y para defenderse de los ataques del tal Avellaneda, Cervantes escribe la secuela del Quijote en donde no tiene más remedio que acabar con su personaje.

En las próximas ediciones cubriremos los capítulos más importantes de ambos libros para que tengan ustedes una mejor idea de éste si es que se animan a leerlos.

Para concluir con el artículo me despido esperando que tengas una semana muy aprovechada y llena de mucha lectura y descubrimiento. 

Aprovecha cada día al máximo, "Carpe Diem".

¡Hasta la lectura siempre!

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