¿Demencia senil?
Finalmente el tipo nos metió en su dinámica y nos puso a ocuparnos de sus disparatadas expresiones.
El gobierno norteamericano no puede detener el narcotráfico ni el flujo de migrantes, sencillamente porque es el causante de lo que sus autoridades consideran sus mayores problemas, en la retórica oficial.
Los ciudadanos, tierras abajo del Río Bravo, que ellos llaman Río Grande, migran hacia norteamérica porque la economía y los niveles de violencia, los alejan de sus lugares de origen, muy a su pesar.
Latinoamérica permanece con una disparidad en cuanto a satisfactores y flujo económico del grueso de su población, respecto de "los Estados Unidos", porque ha sufrido históricos ataques a sus sistemas productivos, paga altos réditos por deudas públicas inducidas y la intromisión, en no pocos lugares y tiempos, en sus sistemas de gobierno.
La violencia igual ha sido exportada con regularidad desde el vecino país del norte, al nuestro y al de cualquier economía que pueda despuntar en el continente.
El más reciente caso conocido es el del mentado programa "rápido y furioso", desplegado por el gobierno norteamericano para dotar de armas y numérico, provocar la guerra de guerrillas primero entre las bandas que operan en México, y luego de estas contra las autoridades nacionales y domésticas.
Desde antes de brincar el siglo, cuando se empezó a hablar de un nuevo orden mundial en el que México tendría roles preponderantes, en Estadoos Unidos se empezó a hablar de "terrorismo", a partir de una emboscada a Policías Federales que se dio en Chihuahua Por aquellos años.
El tema se repitió cuando en Michoacán, en torno de las festividades patrias del bicentenario, se detonó una bomba en una plaza pública.
Sin abundar en esporádicos ejemplos, la "justificación" de moda para los vecinos intervencionistas se radicó en el tráfico de fentanilo y la violencia recurrente en Sinaloa, tras el secuestro y entrega de ISMAEL "El Mayo" ZAMBADA en suelo norteamericano.
La declaración de "terroristas" a los productores y exportadores de las substancias prohibidas, cuyo consumo es no solo permitido, sino promocionado desde las estructuras del poder en el vecino país, de donde también sale el avituallamiento al terror que acá provocan sus proveedores, no aparece tan sencilla.
Según sus leyes extraterritoriales de nula aplicación en el derecho global, deben darse una serie de condicionantes, procedimientos y avales para que primero se configure la declaratoria, y luego se autoricen las acciones de represión a sus hipotéticos enemigos de fuera.
Dada la integración regional, la historia, la cultura, el intercambio de mercancías, personas, familias, tradiciones, las poses rupturistas de quien ayer asumió el gobierno norteamericano, se antoja muy cuesta arriba el tácito rompimiento anunciado.
Igual la pretendida deportación masiva de los braceros mexicanos que igual mueven la producción y la economía allende El Bravo.
En cualquier circunstancia, el gobierno tamaulipeco del doctor AMÉRICO VILLARREAL ANAYA, con sus pares fronterizos, de la mano de la Presidenta de la República CLAUDIA SHEINBAUM PARDO se declaran preparados para atender cualquier eventualidad, sosteniendo reuniones, trazando rutas y disponiendo acciones.
Albergues y apoyos para que regresen a sus lugares de origen; programas sociales; asistencia legal consular; enrolamiento con las empresas generadoras de empleo en el país, son, entre otras acciones, la respuesta del gobierno mexicano y tamaulipeco.
Mientras se da, si se da, o el flamante gobernante vecino vuelve a sus cabales.
¿Demencia senil?, ¿propaganda electoral?, ¿afanes imperialistas?
"Lo que sea, que truene", dicen en el barrio.
Como nunca, México y los mexicanos, Tamaulipas y los tamaulipecos, estamos unidos en sus cuatro órdenes e gobierno, como los ha definido el doctor VILLARREAL: el federal, el estatal, el municipios y el pueblo.
En el Congreso Local, ayer hubo trabajo en Comisiones que hoy continúan, en torno de la sesión plenaria semanal.
En el Inter, ha de celebrarse la ya institucionalizada "Mañanera".
Va a presidirla el líder del Congreso, HUMBERTO PRIETO HERRERA, con los titulares de la comisiones dictaminadoras de los temas en la agenda.