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Aquí está la transformación
Dice una máxima cristiana que se debe dar hasta que duela.
No es la intención de tal precepto, pero como que a alguien le dolió la presentación del Segundo Informe del Gobernador AMÉRICO VILLARREAL ANAYA, reflejo de 15 meses de gestión política y administrativa y se lee como la gran transformación de Tamaulipas.
La fracción panista en el congreso local inasistió a la sesión solemne donde se entregó el documento que da cuenta del estado que guarda la administración pública estatal y en seguida se desataron las granjas de bots intentando, por supuesto sin lograrlo, opacar la trascendencia del repaso a todo lo que se ha estado haciendo y marca un antes y un después, de la obscuridad a la claridad en el Estado.
La sola obra física, nos dice a los tamaulipecos que es lo que se puede hacer cuando se manejan honestamente los recursos, lo que no sucedió durante el pasado sexenio, caracterizado por el estancamiento y el retroceso en la destrucción de la infraestructura física y el equipamiento público.
Las políticas sociales que acompañan esa renovada forma de hacer gobierno, igual saltan a la vista en la atención a los grupos más vulnerables, bajo aquella mística de la opción por los más pobres, entre convocatorias a la solidaridad social, a la empatía, y a la revolución de conciencias que surgen del movimiento encabezado en Tamaulipas por VILLARREAL ANAYA de la mano del Presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR.
Con su representación, el Secretario de Energía, MIGUEL ÁNGEL MACIEL TORRES, trajo el reconocimiento a la obra del gobernante tamaulipeco, en plena identidad con la Cuarta transformación, cuyos alcances hoy son una realidad en el estado y abren expectativas de esperanza por un mejor futuro para todos.
En la exposición hecha ante las fuerzas vivas de Tamaulipas e invitados especiales que abarrotaro el Polyforum, el Gobernador tuvo especial deferencia al acompañamiento del Congreso Local, su Presidenta ÚRSULA SALAZAR, compañeros y aliados, para remontar un marco jurídico hecho para la complicidad y la impunidad en las anteriores legislaturas.
En la víspera, al recibir el documento de manos del Secretario General de Gobierno, el diputado Presidente de la mesa, ELIFA GÓMEZ, a reserva de la glosa que luego se hará, ponderó los logros que se han dado, con Voluntad y Trabajo que hoy nos dice a los tamaulipecos que no nos equivocamos, al elegir al gobierno de la transformación.
Ya habrá oportunidad para abundar en los tantos detalles de la forma y el fondo de esta comparecencia del gobernador ante su pueblo; con su figura, el Estado se sigue enalteciendo.
El liderazgo político que en el estado ejerce, nunca ha estado en duda; el desenlace del proceso interno de selección de los candidatos morenistas dejó constancia de ello.
Todas, las nominaciones, corresponden al perfilamiento que desde el cuadro chico del poder público estatal se trazó con antelación, íntimamente ligado a la aspiración del grueso de los tamaulipecos.
Intentar torcer esa primicia a posteriori, pretendió más bien ser un acto maquiavélico, que en tiempo y forma cayó por su propio peso.
Los aspirantes morenistas, pronto se preguntaron y elevaron su malestar, porque los estaban poniendo a hacer spots y mensajes audiovisuales, a vestir y arropar otros colores.
Pronto resultó qué tal indicación no había venido de las estructuras de mando, sino que alguien andaba sorprendiendo a propios y extraños, con aviesas intenciones.
El siglado de las candidaturas, se aclaró a los involucrados, obedece a una estrategia asociada al llamado Plan C de la Cuarta Transformación, pero ir por membrete distinto, no quita lo morenista al movimiento ni a sus actores preponderantes de temporada.
En el aquí y ahora, si de los ocho distritos uninominales, en la coalición solo tres llevan la bandera de MORENA, contra cuatro del Verde y uno del PT, no quiere decir qué tal es la representatividad de unos y otros.
Ni que en esa medida vaya a orientarse la promoción del voto.
Los candidatos todos de la coalición, van en principio a acompañarse a nivel nacional en la candidatura presidencial de CLAUDIA SHEINBAUM PARDO y en el Estado, sobre la fórmula al Senado morenista, conformada por OLGA PATRICIA SOSA y JOSÉ RAMÓN GÓMEZ LEAL.
Los candidatos al Senado van en lo individual en Tamaulipas, respecto de los partidos que integran la Coalición Sigamos Haciendo Historia, pero en el caso de los candidatos a diputados federales, independientemente de su origen morenista y el siglado partidista que se les asignó, son postulados por el conjunto que representa la coalición.
Por eso causó escozor, en principio, el que se les etiquetara y pretendiera ponerlos a hacer campaña, más que por el partido que los acreditó, por alguna causa individual incrustada en esos colores.
La eventualidad de que se colara un plan maquiavélico, con la idea de manosear los intereses superiores del proyecto nacional y estatal de afianzar las primicias de la Cuarta Transformación, por coronar apetitos personales, alertó a las cúpulas del movimiento.
Otras cuentas de largo aliento están saliendo de esas revelaciones.
Siempre se ha sabido del liderazgo político que, con el Presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR, ejerce en el Estado el doctor VILLARREAL ANAYA, concitando los más altos índices de aprobación, reconocimiento y apoyo de la población estatal.
En algún momento se midió que fuera de esas preeminencias, persistía una buena imagen entre un grueso importante de la población, a favor del exgobernador EUGENIO HERNÁNDEZ FLORES; tanta, como el encono y mal humor social que entre los ciudadanos provoca el otro exgobernador de triste memoria, de apellido CABEZA DE VACA.
Esas inercias derivaron en el encuentro donde se consideró la posibilidad de hacer el 1-2 electoral, entre dos partidos de la coalición, para alcanzar entre los aliados, de entrada, los dos escaños de mayoría y el de primera minoría que corresponden a Tamaulipas, en la cámara alta del congreso de la unión.
La maldad no duerme buscando la forma de desplegarse.