Columnas

Alto a la persecución de nuestros semejantes

  • Por: MONS. JUAN NICOLAU
  • 16 JULIO 2019
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Alto a la persecución de nuestros semejantes

Seguimos en campaña para evitar que nuestro estado de Texas, específicamente nuestro hermoso Valle, se convierta en un estado anti-inmigrante. 

Los obispos expresan la necesidad de formar un frente unido para conseguir una reforma migratoria que tome en cuenta el lado humano y moral de la aplicación de las leyes, pues la calidad moral de una nación se mide de acuerdo a como trata a los segmentos más débiles que componen su sociedad. Tal vez tú nunca has sido un extranjero, o inmigrante, pues gracias a Dios naciste de este lado de la frontera, pero seguramente te habrás sentido perseguido alguna vez. La persecución es algo a lo que todos nos hemos enfrentado en algún momento de nuestra vida. 

Para algunos que viven en lugares con regimen autoritario, esta persecución suele ser en forma de tortura, desde el maltrato físico hasta la angustia mental. 

Es cierto que en nuestro país no vivimos bajo la sombra de temor al maltrato debido a nuestras creencias, pero la persecución se presenta por otros motivos y suele tener muchas caras. Algunas familias han sufrido la angustia de saber que sus hijos, o hermanos, han padecido  la violencia, secuestros y desapariciones debido a la lucha de poderes que se está dando en nuestra frontera. 

Otra forma de persecución es el maltrato emocional, que se dirige a destruir la autoestima de un individuo haciendo uso de insultos y comentarios mal intencionados. La sociedad puede darnos la espalda fácilmente, incluso los que se decían mas fieles pueden traicionarnos (recordemos que Judas era el tesorero de Jesús). Nosotros mismos tendemos a auto recriminarnos cuando no llegamos a cumplir nuestras expectativas, los remordimientos y la culpa son una forma de tortura para el alma. 

Nadie escapa a la persecución de las "habladurías", los que tienen éxito son vistos con recelo por los demás, los que piensan positivamente también son perseguidos por aquellos que ven la vida de una forma negativa. En estos momentos en que casi terminamos la cuaresma, es adecuado que meditemos acerca de los sufrimientos de los miembros más desvalidos de nuestra sociedad, y si tú te sientes perseguido y eres víctima inocente de una auténtica injusticia, si te han calumniado, insultado, o discriminado, piensa en Jesucristo, como El fue perseguido y crucificado el viernes Santo y de cómo resucitó el Domingo de Pascua. Si estas pasando por una situación difícil recuerda que el momento más oscuro es cuando está por llegar el amanecer.  

...Y recuerda que Dios te ama y yo también.

Monseñor Juan Nicolau, Ph.D. Sacerdote jubilado de la Diócesis Católica de Brownsville. Es consejero profesional y  terapeuta familiar con licencias.

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