Enseñanzas profundas de la serie 'Adolescencia'
Adolescencia, la reciente serie de Netflix que está dando de qué hablar, aborda temas profundos y muy actuales que pueden ofrecer valiosas reflexiones
Foto: Agencia Reforma.
Adolescencia, la reciente serie de Netflix que está dando de qué hablar, aborda temas profundos y muy actuales que pueden ofrecer valiosas reflexiones para los adultos, sobre todo padres y cuidadores.
A continuación presento algunas de estas enseñanzas y señales que nos brinda esta producción:
1.- La importancia de estar presentes no sólo físicamente, sino también emocional y mentalmente involucrados en la vida de quienes nos importan, en este caso, nuestros hijos. Estar significa mostrar un interés genuino por el otro.
2.- El valor de la prevención y la salud mental. Es necesario estar atentos a los detalles, las señales de alarma y los indicadores que pudieran mostrar que nuestro hijo necesita atención para su bienestar emocional.
La intervención temprana y oportuna es clave durante el desarrollo de un adolescente: según la OMS, la mitad de los trastornos mentales comienzan antes de los 14 años y, alrededor del 75 por ciento, se manifiestan antes de los 24 años.
3.- Entender los riesgos a los que están expuestos niños y adolescentes, sobre todo en internet y redes sociales.
Uno de los más evidentes es cómo cambia su percepción del mundo. El contenido idealizado genera inseguridad, están expuestos a comentarios negativos, contenido poco fiable, desinformación y violencia en todos los sentidos. El uso excesivo de dispositivos afecta el bienestar emocional y genera una dependencia digital que trae consigo muchos riesgos. Según datos del INEGI, los adolescentes mexicanos pasan cerca de 5.5 horas diarias en internet, destinando gran parte de ese tiempo a redes sociales.
Como adultos es indispensable entender que la influencia de las redes sociales es muy grande.
4.- Las plataformas digitales transforman su forma de interactuar con el mundo. Esto genera desconexión con la realidad, dificultad para relacionarse en otros espacios físicos o sociales.
5.- Es indispensable fomentar en nuestros hijos el pensamiento crítico y el diálogo abierto, así como enseñarlos a cuestionar la información que reciben, tanto de manera presencial como virtual. Estar con ellos es también cuestionarlos, enseñarlos a argumentar, a tomar decisiones y acompañar su proceso, comprender su mundo digital.
6.- Nos ayuda a reflexionar sobre la responsabilidad compartida en la formación de valores universales. Todos somos pieza clave en el desarrollo del niño y adolescente: papás, maestros, tíos, adultos.
Nuestro papel es educar para prevenir y formar.
7.- Es indispensable escuchar activamente, sin distracciones, prestar atención a lo que el adolescente dice y no dice, conocer con qué lenguaje se comunican nuestros hijos y qué necesitan de nosotros como adultos.
8.- Es tiempo de validar sus emociones, acompañar sus experiencias y sus procesos, mostrar interés genuino y compartir momentos de calidad, sin estar pendientes del celular.
- Como padres es importante reconocer que nuestros hijos crecen en un mundo donde las pantallas nunca se apagan, pero su necesidad de guía, amor y presencia sigue siendo la misma.
La mejor red de protección no es la virtual, sino la que ofrecemos con nuestra presencia diaria.
La autora es psicóloga e integrante de Educando en Red