El pequeño territorio de Europa que se ahoga

Por: EL PAÍS
15 / Marzo / 2021
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León y Dani, de 12 años, cursan quinto y sexto curso, respectivamente. En cuanto salen del colegio se van a los vertederos a recoger chatarra, la cargan en una carretilla y la revenden. El dinero se lo dan a sus padres.
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Manifestación de ex trabajadores de la antigua planta de residuos OHIS en el centro de la capital para pedir compensaciones por los graves daños a su salud. La República de Macedonia del Norte, situada en el centro de la península balcánica.
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En los días de viento, los plásticos de los vertederos vuelan e invaden los campos cercanos. Según datos sobre contaminación atmosférica de la Agencia Europea de Medio Ambiente, Skopje, Bitola y Tetovo se encuentran entre las ciudades más contaminadas.
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Lufti Shaziu, de 64 años, en el sofá del cuarto de estar de su casa en el pueblo de Studenichani, en las afueras de Skopje, donde nació y creció. Shaziu trabajó 36 años en la fábrica de OHIS de la capital. La empresa, de mayoría estatal.
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Neumáticos de camión quemados como combustible en un horno de cal al aire libre en las colinas de los alrededores del pueblo de Kosturino, cerca de la ciudad de Strumica. En Kosturino existe la tradición, transmitida de generación en generación.
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Los fines de semana, los habitantes de Skopje suelen escapar de la contaminación de la capital marchándose al monte Vodno. La montaña es un destino popular para el senderismo y las excursiones de un día, conocido en la zona como los pulmones verdes .
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Una colina quemada de los alrededores de la ciudad de Prilep. Allí, la única manera de calentar las casas es con leña. Comprarla a los vendedores oficiales cuesta muy caro y, además, se tarda mucho en conseguirla. Según los habitantes de la ciudad.
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Naza, de 51 años, tiene nueve hijos y se gana la vida mendigando en las calles. Su hija Sanie, de 18 años, tiene un bebé a la que puso de nombre Naza, por su abuela. En Macedonia del Norte, la gente sin recursos suele quemar leña de baja calidad.
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Una cancha de tenis en un gimnasio del centro de Skopje. El Gobierno macedonio y la popular aplicación móvil de seguimiento de la calidad del aire MyAir, creada por Gorjan Jovanovski, un ingeniero de programas de Macedonia .
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Un agricultor cosecha coliflores en su campo, cerca de la central eléctrica de carbón Combinado de Minería y Energía. Cuenta que la población que vive cerca de la central nunca ha tenido problemas de salud, porque el aire no está contaminado.
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Neumáticos preparados para su quema en las colinas que rodean el pueblo de Kosturino, cerca de la ciudad de Strumica. Los trabajadores locales dicen que prefieren quemar las ruedas porque son muy baratos. Por la carga de un camión pagan 100 euros.
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Vista de la construcción de un rascacielos por una empresa turca. Los apartamentos miden entre 60 y 80 metros cuadrados, y se venden a 1.300 euros el metro cuadrado. Muchos todavía no se han adjudicado. Según los activistas locales.
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Sala de control de la cementera Usje, cerca el centro de la ciudad. Los grupos de ecologistas suelen concentrarse delante de la puerta de la fábrica y acusan a los fabricantes de quemar distintas clases de residuos como combustible.
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Centro de recogida de plásticos donde los ciudadanos, en especial la comunidad gitana, venden el plástico que recogen en las calles de la ciudad. En Europa, la mala calidad del aire constituye por sí sola la mayor amenaza medioambiental para la salud.
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braim, de 70 años, quema desechos de plástico para calentarse en la chabola donde viven él y su mujer. Ibraim se gana la vida mendigando en la ciudad. Según la página web EU Research Result, cada año 2.574 personas mueren prematuramente a consecuencia.
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Vista nocturna del complejo Zalajazera, un gran polígono industrial en el que no se permite la entrada de periodistas. Según los ecologistas, en su interior hay instalaciones altamente contaminantes.
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Neumáticos preparados para ser quemados en las colinas que rodean el pueblo de Kosturino, cerca de la ciudad de Strumica. En los últimos años, varias ciudades del país repiten en la lista de las más contaminadas del continente.
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El recorrido del gasoducto Skopje-Tetovo-Gostivar atraviesa el parque forestal de Vodno. Los ecologistas están en contra del paso del conducto por la montaña, y advierten de que causaría daños irreversibles a su valioso ecosistema.
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Un grupo de habitantes de Skopje vuelve a casa por la tarde con el último viaje del teleférico. Los fines de semana, los habitantes de la capital suelen escapar de la contaminación de la ciudad marchándose el monte Vodno.
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Esqueletos de neumáticos quemados en hornos, delante de los árboles ennegrecidos por la contaminación.
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Kimel, de 63 años, en su cuarto. Vive de mendigar en la ciudad. En invierno, el Gobierno aconseja quedarse en casa y evitar las actividades al aire libre. Aparte de los problemas de salud, la contaminación atmosférica puede tener efectos psicológicos.
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La situación se complica aún más por la inversión térmica, un fenómeno natural que hace que el aire caliente se quede encima del frío, contribuyendo al efecto invernadero. En la imagen, el parque infantil del hospital Madre Teresa está vacío en invierno.
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