Ángela Aguilar luce medalla de la Virgen de la Dulce Espera
La Virgen de la Dulce Espera es conocida como la "Patrona de las madres que esperan un hijo" y está asociada con el Adviento, el tiempo de preparación para la Navidad
Después de que en julio pasado, Ángela Aguilar y Christian Nodal celebraran su boda en la histórica hacienda San Gabriel de las Palmas en Morelos y disfrutaran de su luna de miel en un lujoso yate en Baja California, la pareja vuelve a ser el centro de atención en redes sociales.
Desde antes de su matrimonio, se había especulado sobre la posibilidad de que Ángela estuviera esperando un hijo. Estas especulaciones parecieron desvanecerse cuando fue captada en un concierto de Nodal en Mazatlán, Sinaloa, fumando, lo que pareció descartar los rumores sobre un embarazo.
Sin embargo, la incertidumbre se avivó recientemente cuando el hermano de Ángela compartió un video, donde ambos artistas interpretaron "La diferencia", una canción de Juan Gabriel. En dicho clip se observó a Ángela con un vientre abultado, lo que algunos usuarios interpretaron como un indicio de embarazo.
La sospecha se fortaleció aún más cuando la joven publicó en sus historias de Instagram un par de imágenes en las que se puede ver una medalla de la Virgen de la Dulce Espera, una figura simbólica asociada con el embarazo y la maternidad.
La medalla que lució la intérprete de "Qué agonía" representa a la Virgen de la Dulce Espera, una imagen muy significativa en la tradición cristiana.
Más de la sección
Esta advocación simboliza el momento en que la Virgen María está esperando a Jesús, y su historia se remonta al siglo V, convirtiéndola en una de las representaciones más antiguas y veneradas.
La Virgen de la Dulce Espera es conocida como la "Patrona de las madres que esperan un hijo" y está asociada con el Adviento, el tiempo de preparación para la Navidad. La devoción hacia esta figura se centra en la esperanza y protección durante el embarazo, ofreciendo consuelo tanto a las mujeres que están esperando un hijo como a aquellas que enfrentan dificultades para concebir.
La celebración de esta devoción es especialmente significativa el 15 de cada mes. En esa fecha, se entregan pequeños zapatitos de lana a las mujeres que están próximas a dar a luz. Esta tradición busca asegurar un embarazo y parto saludables, y es un acto de fe en el milagro de la vida.
imagen" tipo="3">