Abordan historia de 'La Narcosatánica' en docuserie
Desde prisión, donde cumple condena desde hace más de 30 años por el asesinato de 13 personas y acusaciones de santería, Sara Aldrete escribió su primer libro, "Me Dicen la Narcosatánica"
Ella sabe que su identidad está prácticamente limitada al mediático caso.
Con aquel apodo como presentación, Aldrete ahora es protagonista de la serie documental de HBO Max, La Narcosatánica, pero el proyecto está concebido para no reducir su identidad, sino mostrarla como una persona en un contexto complejo.
Mientras realizaba otro proyecto dentro del penal de Santa Martha Acatitla, la cineasta Pat Martínez conoció a Aldrete, cuya presencia impone al medir cerca de 1.90 metros, pero al mismo tiempo le resultó una persona positiva, lo que despertó su curiosidad.
"Nunca había escuchado hablar ni de los narcosatánicos ni de Sara. Ella lo percibe, que el acercamiento de mi parte es muy genuino para escuchar a una persona, no a la 'Narcosatánica'. Yo voy descubriendo su caso, la voy visitando y en cada visita voy leyendo el expediente que ella me proporciona.
"Finalmente, la sentencia dice que, a pesar de que no se encuentran las pruebas suficientes, se le declara culpable. Eso me parece escandaloso, igual que los rituales", remarcó la directora en entrevista.
Más de la sección
La serie, que llega hoy a la plataforma, tiene como guía entrevistas con la protagonista de la historia, pero también se incluyen las versiones de autoridades sobre el caso de los narcosatánicos.
La secta, encabezada por Adolfo de Jesús "Brujo" Constanzo, fue acusada de actividades delictivas, de hacer sacrificios humanos y rituales, así como de cocinar restos de personas.
En los episodios también se añaden fragmentos de noticias para mostrar la cobertura que tuvo el caso.
"Hay un concepto que siempre he tenido en mente: sugestión. Estás comiendo con ella un pastel y de repente te viene esta información externa de que comía niños, hacía rituales humanos, se comía el cerebro de personas. Pero entonces ves una persona, las más positivas que he conocido.
"Ella, estando en un lugar tan difícil, siempre te recibe con comida, con una buena energía, es respetada por sus compañeras y por las mismas autoridades, la estiman demasiado. Es un contraste, pero le da esta riqueza de querer contar esta historia. ¿Le crees, no le crees? Siempre está esta duda", reflexionó Martínez.
A lo largo de la serie, la realizadora no busca emitir juicios, sino mostrar distintos lados, pues la misma persona ha sido presentada como la "Madrina" que hacía como pactos con el diablo igual que como una víctima de un sistema corrupto.
"Lo que ella busca es ser escuchada, muy poca gente lo hace por esa imagen con la que se le presentó. Ella acepta los errores que tuvo, pero a partir de ahí lo concreto es que lleva más de 30 años en prisión.
"Si solamente nos basáramos en expedientes, muchas de las declaraciones se obtuvieron por tortura. De victimarios pasan a víctimas", subrayó la cineasta.