Colombia: 6 muertos en confuso hecho con policía
La Fiscalía dispuso de al menos 25 investigadores para que esclarezcan el caso de seis personas que murieron asfixiadas y aplastadas el domingo en un establecimiento público en Bogotá luego de que al parecer policías arrojaron en su interior gas pimienta.Las personas murieron por asfixia y aplastamiento, explicó vía telefónica a The Associated Press Maritza Escobar, directora nacional del Cuerpo Técnico de Investigación de la Fiscalía General.
También hay dos heridos de gravedad, dijo telefónicamente Carlos Arenas, jefe de prensa de la Policía Metropolitana de Bogotá. El incidente se produjo pasadas las cuatro de la mañana (0900 GMT).
"La policía llegó y puso puesto fijo y empezó a golpear la puerta y a echar gases lacrimógenos por debajo de la puerta (y) la gente se empezó a asfixiar", relató la dueña del local en declaraciones difundidas por la emisora local Caracol Radio.
La mujer, identificada como Luz Marina De la Peña, agregó que ella abrió la puerta "para que la gente saliera y la policía no dejó salir la gente. Empezó a agredir, a pegar, a golpear con choques eléctricos y a echar gases... y la gente gritaba que la dejaran salir y no la dejaban salir".
De la Peña añadió que, sin suerte, intentó salir del establecimiento "Night Club" pero "nos tocó devolvernos. Lo primero que hicieron fue romper lámparas para que no grabaran con celulares... rompieron ventanas, rompieron todo".
Testigos citados por medios de radio y televisión locales que estaban en el interior de "Night Club" dijeron que las seis personas murieron asfixiadas en la calle en momentos en que iban a ser trasladadas a centros médicos. "No podían ni hablar, todo el mundo vomitando", aseguró un testigo.
Otro más agregó que las víctimas murieron "afuera" y que "cuando echaron el gas pimienta la gente se estaba asfixiando; (la policía) nos jalaba y nos daba duro".
Aparentemente el establecimiento donde ocurrió la tragedia funcionaba ilegalmente toda vez que los negocios públicos en la ciudad sólo tienen autorización para despachar hasta las tres de la mañana (0800 GMT).
El lugar donde se produjeron las seis muertes, según la Policía Metropolitana, ya había sido clausurado en cuatro oportunidades por mal comportamiento.
El comandante de la policía de Bogotá, general Luis Eduardo Martínez, dijo a los reporteros que al parecer los dueños del establecimiento no permitieron el ingreso a su interior de los policías. "Algo produce la activación de un gas. Dicen que al parecer gas pimienta y eso es lo que produce la desbandada al interior", añadió.
Martínez dijo que será la Fiscalía General la encargada de establecer si se cometieron errores o si hubo algún exceso de fuerza en el incidente en el que perdieron la vida las seis personas.
En tanto, el secretario de Gobierno de Bogotá, Guillermo Alfonso Jaramillo, recordó que las autoridades judiciales han insistido en la prohibición del exceso de fuerza en los operativos militares y policiales y pidió una seria investigación.
Según el analista y abogado Jesús Albeiro Yepes, a los policías que participaron en el incidente podría juzgárseles por "culpa consciente" porque "si bien ellos no querían matar, mire en lo que terminaron las cosas".
Pero enfatizó por teléfono a la AP que "si las cosas fueron como dice la dueña del lugar, que la policía no dejaba salir la gente y la golpeaba, estamos hablando de una cosa demasiado grave y eso se llama homicidio doloso".
El jurista calificó el hecho de "torpe y desproporcionado" y dijo que el Estado colombiano "con toda seguridad, deberá pagarles grandes sumas de dinero a los familiares de los afectados".