Limitan acceso a xilacina, poderoso tranquilizante
Es incluida a la lista estatal de sustancias controladas, lo que endurecerá las normas sobre este fármaco
Cada vez son más los estados que intentan restringir el acceso a un potente tranquilizante para animales que contribuye a un número creciente de muertes por sobredosis en seres humanos en Estados Unidos.
- HARRISBURG, Pensilvania
El gobernador de Pensilvania, Josh Shapiro, anunció el martes que su administración añadirá la xilacina a la lista estatal de sustancias controladas, lo que endurecerá las normas sobre este fármaco y permitirá a las autoridades presentar cargos contra quienes las infrinjan.
Se tiene previsto que la inclusión de la xilacina en la “lista III” de la ley de sustancias controladas de Pensilvania entre en vigor este sábado.
“Al incluirla en la lista, estamos dando más herramientas a la policía y a otros agentes para regular, controlar y contener adecuadamente estas drogas, realizar detenciones y, con suerte, enjuiciamientos”, dijo el martes Shapiro en una conferencia de prensa en Filadelfia.
El mes pasado, el gobernador republicano de Ohio, Mike DeWine, firmó una orden ejecutiva para restringir la xilacina a través de la Junta Farmacéutica del estado, y el gobernador republicano de Virginia Occidental, Jim Justice, promulgó una ley para convertirla en sustancia controlada.
Las designaciones de Pensilvania, Ohio y Virginia Occidental permiten a los veterinarios seguir utilizando el fármaco para sedar a los animales, pero les imponen normas más estrictas sobre su manipulación, seguimiento y almacenamiento.
La xilacina ya está incluida en la lista I de sustancias controladas de Florida, lo que significa que es un delito poseerla o venderla en el estado. El fiscal general del estado ha pedido a DEA que incorpore inmediatamente la xilacina en la lista federal de sustancias controladas.
La semana pasada, la Oficina de la Casa Blanca para la Coordinación de Políticas Antidrogas señaló que la xilacina era una “amenaza emergente” cuando se mezcla con el potente opioide fentanilo.
La xilacina, cuyo uso veterinario se aprobó por primera vez en 1971, se utiliza para sedar vacas, caballos, ovejas y otros animales. Se añade cada vez con mayor frecuencia al fentanilo y la heroína, según las autoridades.
Las autoridades tratan de saber qué cantidad se desvía de los usos veterinarios y qué cantidad se fabrica ilícitamente. No se realiza un seguimiento exhaustivo a nivel nacional, de acuerdo con los investigadores.
Aun así, la xilacina, a veces denominada “tranq”, se detectó en alrededor de 800 muertes por drogas en Estados Unidos en 2020 y en más de 3.000 en 2021, según la DEA.
En Pensilvania, la xilacina contribuyó a 90 muertes por sobredosis en 2017, y a 575 por la misma causa en 2021, dijo la oficina de Shapiro.