El fallo es inminente

• Austin, Texas

El juicio político del fiscal general de Texas, Ken Paxton, por cargos de abuso de poder podría estar en manos del jurado tan pronto como esta semana, adelantó el lunes el vicegobernador republicano Dan Patrick, que lo preside.

La segunda semana del histórico proceso comenzó con el testimonio de otro de los exasistentes de Paxton que lo denunció ante el FBI en 2020 y acusó al republicano de hacer mal uso de su cargo para ayudar a un donante. 

Paxton, quien se declaró inocente, tampoco estuvo presente en el Senado de Texas para el testimonio.

Es posible que el juicio no llegue a la tercera semana. El vicegobernador dijo que hasta ahora cada parte ha utilizado aproximadamente la mitad de su tiempo asignado para argumentos y que el caso podría llegar al jurado a finales de esta semana.

Patrick también dijo que no habrá más días libres hasta que se resuelva el juicio, lo que plantea la posibilidad de que se tome una decisión durante el fin de semana. El jurado es el Senado estatal controlado por los republicanos, donde Paxton fue senador antes de convertirse en fiscal general en 2015 y todavía tiene aliados conservadores. 

Su esposa, la senadora estatal Angela Paxton, también es una de los 31 senadores de la cámara, pero no se le permite votar en este juicio.

Paxton fue acusado formalmente de delitos graves de fraude de valores en 2015 y ha estado bajo investigación del FBI desde una revuelta extraordinaria de sus principales ayudantes cinco años después. 

NUEVO TESTIMONIO

Al subir al estrado de los testigos el lunes, Mark Penley, uno de esos ex diputados, fue el último en relatar las acusaciones de que Paxton los presionó para ayudar a un desarrollador local llamado Nate Paul, quien le había dado a Paxton una contribución de campaña de 25,000 dólares y estaba bajo investigación del FBI.

Paul, que fue acusado este verano de defraudar a bancos, había acusado a agentes del FBI y a un juez de irregularidades. Penley dijo que no quería tener nada que ver con eso.

"Que investiguemos a un juez federal y a fiscales federales es una locura", dijo Penley.