Nashville, enterrada en el dolor

Los detalles de las vidas ricas y plenas de los tres adultos asesinados el lunes en una escuela primaria de Nashville surgieron rápidamente después, pero la información sobre los tres niños de 9 años, cuyas vidas terminaron trágicamente jóvenes, ha tardado más en salir a la luz pública, una comunidad enterrada en el dolor.

• NASHVILLE, Tennessee

Los niños asesinados en The Covenant School fueron Hallie Scruggs, descrita por una tía como “siempre en movimiento”; Evelyn Dieckhaus, la “luz brillante” de su familia y William Kinney, cuya familia ha dicho poco públicamente hasta ahora.

Una mujer que se identificó como la tía de Hallie, Kara Scruggs Arnold, escribió en Facebook que Hallie era “increíblemente inteligente, lo suficientemente luchadora como para mantenerse al día con sus tres hermanos y mis cuatro hijos”.

Hallie tenía un “amor por la vida que la mantenía sonriendo, corriendo, saltando y jugando y siempre en movimiento”, agregó Arnold en su publicación.

El padre de Hallie, Chad Scruggs, es el pastor principal de la Iglesia Presbiteriana Covenant, que está asociada con The Covenant School. La escuela cristiana privada tiene alrededor de 200 estudiantes desde preescolar hasta sexto grado, así como aproximadamente 50 miembros del personal, según su sitio web.

Evelyn fue descrita como la “luz brillante” de la familia Dieckhaus en una página de GoFundMe que se creó para ellos. Pero su familia también se mostró reacia a hablar de ella o de la enormidad de su pérdida.

En un comunicado en video publicado el martes por la noche, el gobernador de Tennessee, Bill Lee, dijo que se suponía que Peak cenaría con su esposa, María, después de ocupar el puesto de maestro sustituto en Covenant.

“María se despertó esta mañana sin uno de sus mejores amigos”, dijo Lee, y agregó que Peak, Koonce y su esposa habían enseñado juntos una vez y “han sido amigos de la familia durante décadas”.

Sandra McCalla, ex administradora de la escuela secundaria a la que asistió Peak en Shreveport, Luisiana, dijo que Peak se desempeñó como estadística en los juegos de baloncesto femenino y en las competencias de atletismo antes de graduarse en 1979.

“Ella estaba ocupada en segundo plano haciendo que sucedieran cosas buenas”, dijo McCalla, quien se desempeñó como directora de la escuela secundaria Captain Shreve durante 30 años.

Chuck Owen, quien conoció a Peak desde la infancia, dijo que el padre de Peak era un médico muy conocido en Leesville, Louisiana, donde vivía la familia antes de mudarse a Shreveport.

Dijo que “todos la conocían, conocían a su familia” y que ella era “simplemente una persona dulce de una familia dulce”.

Owen agregó que Peak era una devota seguidora de Dios y que no le sorprendió que ella estuviera trabajando en una escuela cristiana.

“Ella me dijo que se salvó en la universidad y que el amor de Dios cambió su vida”, dijo.

La compositora de Nashville, Natalie Hemby, publicó en Instagram que Peak “me enseñó a nadar. Mantener mi cabeza fuera del agua… que es lo que todos estamos tratando de hacer en este momento”.

La familia de Peak emitió un comunicado diciendo que sus “corazones están rotos” y llamó a Peak “un pilar de la comunidad y una maestra amada por todos sus estudiantes”.

“Ella nunca vaciló en su fe y sabemos que está envuelta en los brazos de Jesús”, dijo el comunicado.

Koonce, directora de The Covenant School, era una mujer de profunda fe que consideraba la educación de los niños como su misión.

“Es lo que Dios la llamó a hacer”, dijo su amigo cercano Jackie Bailey.

“Estamos tan conmocionados”, agregó Bailey. “Estaba mirando alrededor de mi casa, y cada pieza de punto de cruz que tengo en la pared ella lo hizo, me lo dio”.

INTENTÓ PROTEGER A LOS INFANTES

Uno de ellos dijo: “El amigo ama en todo tiempo”.

“Eso es Proverbio 17:17”, dijo Bailey. “Ese es el tipo de persona que era. Ella amó en todo momento”.

Bailey agregó: “Si hubiera algún problema en esa escuela, ella correría hacia allí, no desde allí. Ella estaba tratando de proteger a esos niños… Eso es justo lo que creo”.

Antes de que Koonce asumiera el papel principal con Covenant, Anna Caudill, exmaestra de arte, trabajó con ella durante casi una década en Christ Presbyterian Academy, otra escuela cristiana en el área conectada a una congregación de la Iglesia Presbiteriana en América.

“Era una dinamo absoluta y una de las mujeres más inteligentes que jamás conoceré”, dijo Caudill, recordando cómo Koonce se destacaba en su trabajo diario mientras criaba a sus hijos, estudiaba su maestría y luego su doctorado y escribía un libro.