Insisten en criminalizar a los indocumentados

• AUSTIN, Texas

Los legisladores de Texas ya se han puesto manos a la obra en la cuarta sesión especial del año, donde los republicanos intentarán una vez más aprobar una amplia ley de inmigración que permitiría a las autoridades estatales y locales arrestar y procesar más fácilmente a las personas que cruzan la frontera desde México.

Los legisladores republicanos que controlan ambas cámaras han estado en gran medida de acuerdo sobre su deseo de aprobar la legislación de seguridad fronteriza, pero en la sesión especial más reciente que terminó el martes, sus esfuerzos se desmoronaron en medio de disputas políticas.

El martes, las cámaras en conflicto señalaron que habían llegado a un acuerdo.

El senador Charles Perry, republicano por Lubbock, y el representante David Spiller, republicano por Jacksboro, presentaron proyectos de ley de inmigración idénticos (el proyecto de ley 4 del Senado y el proyecto de ley 4 de la Cámara de Representantes) que facultarían a los agentes del orden público de Texas para arrestar a inmigrantes indocumentados y requerirían que un juez estatal ordenara la persona a salir de los Estados Unidos a México en lugar de ser procesada.

"Nuestra prioridad compartida siempre ha sido asegurar nuestra frontera sur y desarrollar un mejor proceso para abordar a los inmigrantes ilegales que ingresan al estado de Texas", dijo Perry. "Los proyectos de ley idénticos presentados hoy trazan un nuevo camino a seguir para nuestro estado".

En su convocatoria para la última sesión especial, el gobernador Greg Abbott pidió a los legisladores que abordaran la educación y la seguridad fronteriza, dos temas que no lograron aprobarse después de repetidos esfuerzos este año. En cuanto a los vales escolares, los republicanos están en desacuerdo con una pequeña facción de republicanos de la Cámara de Representantes que se alinean con los demócratas que se oponen al subsidio público para las escuelas privadas. Pero, en principio, los republicanos han estado en la misma página cuando presionaron para que se adoptaran nuevas medidas fronterizas según señala una publicación de The Texas Tribune

Una petición específica

Abbott pidió específicamente a la Legislatura que aprobara leyes que reflejen el lenguaje de los esfuerzos más recientes de la Cámara y el Senado y pidió a la Legislatura que tipifique como delito estatal cruzar ilegalmente la frontera de México a Texas; ya es un delito federal. Y pidió más financiación para la construcción de barreras fronterizas.

En la sesión especial más reciente, la Cámara y el Senado aprobaron cada uno sus propias versiones de esos proyectos de ley, que murieron cuando cada cámara se negó a considerar la legislación de la otra cámara.

Los proyectos de ley de ambas cámaras también habrían facultado a la Policía para arrestar a inmigrantes indocumentados, pero estaban en desacuerdo sobre lo que debería suceder después de un arresto. Un proyecto de ley proponía procesar a los inmigrantes y entregarlos a agentes de inmigración después de que cumplieran su sentencia estatal. El otro propuso transportarlos a un puerto de entrada y ordenarles regresar a México.

Ahora, Perry y Spiller han combinado parte del lenguaje para llegar a un compromiso.

Perry dijo que los dos proyectos de ley recién presentados aún autorizan a los agentes del orden estatales a arrestar a cualquier persona que ingrese o reingrese ilegalmente a Texas. Después de que a los inmigrantes se les tomen las huellas digitales y se les realice una verificación de antecedentes, comparecerán ante un magistrado o juez, dijo Perry, luego serán llevados a un puerto de entrada y se les ordenará que abandonen el país.

Ya es ilegal según la ley federal cruzar la frontera entre puertos de entrada; los inmigrantes pueden ser procesados por ingresar ilegalmente al país y enfrentarse a entre seis meses y dos años de prisión.

Los expertos en inmigración dicen que la propuesta provocaría desafíos constitucionales, ya que los tribunales federales han dictaminado repetidamente que la aplicación de las leyes de inmigración cae bajo la jurisdicción federal.

Ilegal y violatorio de los derechos humanos

Sergio Méndez Silva, abogado de la Fundación para la Justicia, una organización de derechos humanos con sede en la Ciudad de México, dijo que lo que Texas está intentando hacer es ilegal y violará los derechos humanos de los inmigrantes que intentan buscar seguridad.

"México debe rechazar enérgicamente cualquier intención del Gobierno de Texas de intentar expulsar a migrantes ilegalmente", dijo.

Al final, la legislación fronteriza no logró aprobarse en la sesión especial más reciente porque quedó atrapada en el fuego cruzado entre el vicegobernador Dan Patrick, quien dirige el Senado, y el presidente de la Cámara de Representantes, Dade Phelan, quienes promocionaron su deseo de aprobar una seguridad fronteriza sólida. medidas.

Tanto la Cámara como el Senado propusieron una legislación similar para asignar mil 500 millones de dólares a la construcción de una barrera fronteriza con México; esos proyectos de ley también murieron cuando ninguna de las cámaras tomó medidas sobre la versión del proyecto de ley de la otra.

El martes, los legisladores republicanos de ambas cámaras llegaron a un acuerdo y presentaron proyectos de ley idénticos que asignarían mil 500 millones de dólares para barreras fronterizas, más 40 millones de dólares para pagar a la policía estatal para que patrullaran Colony Ridge, un complejo de viviendas de Houston que, según publicaciones de extrema derecha, es un imán para inmigrantes indocumentados.

El impasse se intensificó en los últimos días de la sesión cuando los líderes de ambas cámaras se culparon mutuamente por no aprobar proyectos de ley para criminalizar el cruce fronterizo.

Cuando la sesión concluyó sin un compromiso, Patrick atacó al presidente de la Cámara de Representantes, Dade Phelan, en las redes sociales.

"El presidente está desesperado por mejorar sus credenciales fronterizas con los conservadores", dijo Patrick. "El autor del proyecto de ley afirmó que es el proyecto de ley fronterizo más estricto jamás creado, pero es simplemente un proyecto de ley de captura y liberación del tamaño de Texas".

NADA DE SERMONES

Phelan respondió diciendo que su cámara "no se dejará sermonear sobre seguridad fronteriza por un Senado que ha debilitado sustancialmente nuestro proyecto de ley y quiere empoderar aún más al gobierno federal para liberar a los inmigrantes".

Si los legisladores de Texas aprueban una ley que convierte la entrada ilegal en un delito estatal, probablemente forzará un enfrentamiento con la administración Biden, y la disputa jurisdiccional resultante podría terminar ante la Corte Suprema de Estados Unidos.

En el histórico caso de 2012, Arizona contra Estados Unidos, la Corte Suprema dictaminó que la policía local no tenía autoridad para arrestar a alguien basándose únicamente en su estatus migratorio.

Perry dijo durante una audiencia del comité el mes pasado que en lugar de construir barreras fronterizas, los legisladores deberían centrarse en llamar la atención de la administración Biden, y la forma de hacerlo es aprobar una legislación que permitiría a la policía "comenzar a atrapar personas y meterlas en campos de detención".

"Si es constitucional o inconstitucional, aún está por determinarse", dijo Perry. "Pero eso atraerá la atención del gobierno federal más rápido que cualquier acción que podamos crear".

Spiller dijo en una entrevista durante la sesión especial anterior que su intención no es "subvertir lo que el gobierno federal puede hacer o estar en conflicto con eso". ¿Pero tengo algún problema con la administración Biden? Tienes toda la razón, lo hago".

"Esa es la pelea que quiero tener con ellos", añadió. "Sólo diles: haz tu trabajo".