Duro camino a la frontera

Desde hace cuatro meses, Durbis Burgos llegó a Matamoros junto con sus dos hijos de 18 y 11 años, quienes, para poder arribar a esta ciudad fronteriza, tuvieron que pasar por un secuestro de cuatro días, hasta que pagaron 6 mil dólares para que fueran liberados y de esta manera siguieran su camino.

De origen venezolana, junto a sus hijos, logróconseguir su cita para poder cruzar a los Estados Unidos de manera legal, esto luego de haber estado esperando cuatro meses en el refugio temporal del antiguo hospital "Alfredo Pumarejo".

"No es fácil poder llegar hasta acá. He pasado de todo un poco, caminamos 11 días de Tapachula, pasamos por la selva Darién, viajamos en camión por un tiempo, pero fuimos secuestrados en Reynosa; nos bajaron del camión y nos mantuvieron cuatro días secuestrados", dijo.

Destacó que para poder ser liberados tuvieron que pagar 6 mil dólares, los cuales erogaron algunos familiares y amigos con los que se contactaron las personas que los tenían "Sólo pagando fue la manera en que nos dejaron salir".

"Pasamos esos días encerrados, sin comer, maltrataron a mi hijo mayor, esto porque el dinero no llegaba rápido según nos dijeron por eso nos maltrataban", indicó.

Comentó que afortunadamente en Matamoros es diferente a todo lo que se vive en el camino, ahora ya tenemos la cita para este 17, nos sentimos contentos porque ya vamos a poder cruzar a los Estados Unidos.

Resaltó que ella viaja sola con sus dos hijos, esto en lo que se pude establecer en los Estados Unidos, para que después su esposo pueda alcanzarlos.

Agregó que estará llegando con una amiga en la unión americana, esperando el poder obtener ese permiso que se busca para poder vivir en los Estados Unidos.

No es fácil poder llegar hasta acá. He pasado de todo un poco, caminamos 11 días de Tapachula, pasamos por la selva Darién". Durbis Burgos migrante venezolana