Poca agua y se ‘fuga’ por la mala infraestructura en Tamaulipas

En general, traemos una eficiencia poquito menor del 50 en todo el estado; se desperdicia y no sólo en las zonas urbanas, que efectivamente hay que recuperar la eficiencia; tenemos infraestructura obsoleta que tiene 80 años de servicio¨. Raúl Quiroga ÁlvareZ, secretario de Desarrollo Hidráulico

En medio de las sequías más fuertes en Tamaulipas, el 50 por ciento del agua se desperdicia al fugarse en la red, alertó el secretario de Desarrollo Hidráulico, Raúl Quiroga Álvarez, no sólo en las ciudades, sino también en el campo.

Alertó que de cada 100 litros que se distribuyen en la red de agua potable y de riego en todo el estado, 50 se termina fugando, porque hay líneas que tienen casi un siglo desde que fueron instaladas y no han sido cambiadas, a pesar de estar obsoletas.

NULA EFICIENCIA

“En general, traemos una eficiencia poquito menor del 50 en todo el estado; se desperdicia y no sólo en las zonas urbanas, que efectivamente hay que recuperar la eficiencia; tenemos infraestructura obsoleta que tiene 80 años de servicio y, si le metes poquito más de presión, se revientan los tubos y hay que tratar de solucionar el problema”, dijo sobre el panorama de abasto del líquido en Tamaulipas, en el marco del Día Mundial del Agua.

Y contrario a lo que se cree, el mayor volumen de desperdicio se registra en el sector agrícola, ya que del 100 por ciento del agua que se consume en el estado, el 77 por ciento se destina a los distritos de riego, mientras que el 23 por ciento del uso del agua se da en los municipios y ciudades.

“En realidad, en las ciudades andamos alrededor del 12 o 13 por ciento del uso del agua; en realidad es en los distritos de riego donde tenemos canales que también tienen casi 70 años o más”, detalló.

El Registro Público de Derechos de Agua (Repda) de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) señala que en Tamaulipas hay 22 mil 381 concesiones para extracción y uso de aguas.

De las cuales, 8 mil 833 corresponden para uso agrícola, 2 mil 794 para uso doméstico, 4 mil 572 de uso pecuario, mil 934 uso público urbano, 972 para servicios y 248 industrial.

SE EVAPORA

A todo lo anterior  se suma el problema de la evaporación del agua en las presas del estado, al ser un almacenamiento expuesto al sol, donde se registra un alto nivel de  pérdida.

Pues de los 700 millones de metros cúbicos de agua mexicana que hay en las presas internacionales en el estado, faltan 800 millones, ya que anualmente se necesitan mil 500 millones de metros cúbicos para cubrir la demanda anual.

“¿Qué quiere decir eso? Que el agua que corresponde al Distrito de Riego 025 se lo están bebiendo las ciudades porque hay prioridad para uso público urbano, entonces en la zona centro tenemos agua más que suficiente en la Vicente Guerrero aunque está en los niveles más bajos, tenemos el 9% en almacenamiento pero no tenemos cómo traerla”.

CRISIS HÍDRICA

• Tuberías viejas suministran agua en Reynosa

Hasta un 35 por ciento del agua potable se desperdicia en su trayectoria hacia las viviendas y fábricas, porque el sistema de suministro es obsoleto.

El ingeniero Guillermo Acebo Salman describió que es necesario una nueva planta de agua que sustituya gradualmente a la Pastor Lozano, que suministra el 65 por ciento del agua potable.

“La Pastor Lozano, definitivamente, ya no tiene capacidad, ya es parche sobre parche, por lo que se requiere armar plantas paquete, plantas más pequeñas cercanas a los urbanos o subcentros urbanos, que ahí mismo se potabilice a través de tanques elevados que nos van a ahorrar el bombeo y la electricidad.

Hay que entender lo que gasta la Comapa pagándole a la CFE, son cantidades muy grandes por la baja eficiencia de las bombas y porque todo es bombeado”, explicó.

El crecimiento urbano ha provocado que exista desabasto de agua, porque más población requiere del servicio.

“Hoy en día es más de un millón, o un millón 200, aunque el INEGI nos de otro dato; entonces, yo creo sí nos quedamos un poco adormilados respecto a la planeación del recurso hídrico”, indicó.Por Guadalupe Salas