Siembran comunitarios terror en vía a Guerrero
Noviembre 23, 2020 -
Autoridades y habitantes los acusan de estar bajo el cobijo del grupo criminal Los Ardillos
Chilpancingo, Gro.
Su labor era la de velar por la seguridad de la localidad, pero la Policía comunitaria de Petaquillas, en el Municipio de Chilpancingo, ha sembrado terror en la zona de Guerrero desde 2016, dos años después de su creación.
En los últimos tres años, estos civiles armados, tras separarse del Frente Unido por la Seguridad y el Desarrollo del Estado de Guerrero (Fusdeg), fueron señalados como responsables de al menos seis ataques en la vía federal Chilpancingo-Acapulco.
También autoridades y habitantes los acusan de estar bajo el cobijo del grupo criminal Los Ardillos, que domina la siembra y venta de opio en las regiones Centro y Montaña de Guerrero.
Retenes ilegales, armas “cuernos de chivo” (AK-47) y de calibre AR-15 han puesto en jaque en la zona hasta a las propias autoridades, y el 3 de noviembre, a escoltas del secretario de Seguridad Pública de Oaxaca, Ernesto Salcedo.
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Al pasar por debajo del puente que accesar a Petaquillas, los comunitarios arremetieron a balazos contra los escoltas que se dirigían hacia Acapulco, donde su jefe tendría una reunión con su homólogo de la entidad, David Portillo.
“De milagro nadie murió o resultó herido, porque los disparos que recibió la camioneta eran de cuerno de chivo”, dijo un integrante de Fiscalía.
“Van a regresar, en cualquier rato y van a instalar su retén de nuevo; ya hicieron muchas cosas malas, y ni modo que el Gobierno no les tolere una más”, añadió un vecino de la comunidad.
El caso más grave es el de cuatro personas de una misma familia que fueron baleados tras no detenerse en un retén instalado por los comunitarios.