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Somos gente de pascua

  • Por: MSGR. JUAN NICOLAU
  • 18 ABRIL 2022
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Somos gente de pascua

Sin Resurrección nuestra Fe no tendría razón de ser. Los Apóstoles de Jesús comenzaron su predicación anunciando este hecho indiscutible: Jesús de Nazaret, quien fue clavado en una cruz, muerto y sepultado, ¡resucitó!  Todo su mensaje giro alrededor de esa noticia. 

Precisamente nuestra Fe procede de los primeros que creyeron, que vieron a Jesús resucitado, que comieron junto a Él, que lo tocaron, y que empezaron a propagar esa buena nueva. Jesús dice a Tomas "Tú crees porque has visto. Felices los que creen sin haber visto" (Juan 20,29). 

Esos que creen sin haber visto somos los cristianos de hoy en día, pues tenemos la certeza de creer en algo real, algo que nos llena de esperanza y de felicidad. 

Ayer celebramos el día de la esperanza universal. El día  en que Jesús nos demuestra que hay vida después de la muerte, que hay un nuevo horizonte para la vida y un nuevo sentido para la muerte. ¡El está vivo. Resucitó! Son las buenas nuevas que hemos predicado desde hace dos mil años. 

Por eso el día de ayer, Domingo de Pascua, en todas las capillas, iglesias y templos, hubo flores de todos los colores que representan la vida y la alegría de saber que Jesús está vivo. 

El día en todas las iglesias celebraron este gran acontecimiento, el aniversario del triunfo de Cristo, la feliz conclusión al drama que vivimos durante la Pasión y muerte de Jesús, es la alegría inmensa que sigue al dolor.   San Pablo nos dice que "aquel que ha resucitado a Jesucristo devolverá asimismo la vida a nuestros cuerpos mortales", y es con esta esperanza que debemos vivir nuestros sufrimientos, pensando que todo es poco en comparación de lo que padeció Jesús, y que junto a Él estaremos cuando nos llegue nuestra hora.  

En algún momento de nuestra vida todos y cada uno de nosotros hemos experimentado el dolor y la incertidumbre, pues tal vez nos encontramos atrapados en la adicción a las drogas o al alcohol, porque vivimos en adulterio, o cayendo una y otra vez en las redes de la pornografía, tal vez porque no podemos superar la depresión que nos ha causado la muerte de un ser querido, o el abandono del esposo, o porque nos hemos enterado que padecemos cáncer o alguna otra enfermedad degenerativa y mortal;  Nos creemos desfallecer, nos sentimos abatidos, sin embargo como creyentes no debemos nunca perder la Fe. 

Debemos mostrar nuestra fe al proclamar que somos gente de Pascua, que creemos firmemente en la vida después de la muerte, que nuestro verdadero hogar es en la casa del Padre. Creemos que el sufrimiento y el dolor de la crucifixión se transforman en la alegría de la resurrección, lo cual nos asegura la vida eterna. 

Celebremos la resurrección con alegría y llevemos ese gozo a todo el que desee conocer a Jesús. 

Vive un día a la vez! ... ignite the moment!...Y recuerda que Dios te ama y yo también. 

Msgr. Juan Nicolau, Ph. D. STL. Sacerdote jubilado de la Diócesis de Brownsville. Es psicoterapeuta familiar y consejero profesional con licencias.

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