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Seguridad de vehículos motorizados
No se puede exagerar la importancia de la seguridad de los vehículos de motor en el lugar de trabajo. En promedio, el 39 por ciento de todas las muertes laborales se deben a incidentes de transporte.
Además, según un informe realizado para la Red de Empleadores para la Seguridad Vial (NETS), las lesiones por accidentes automovilísticos dentro y fuera del trabajo costaron a los empleadores 72.2 mil millones de dólares en 2018.
La OSHA se compromete a reducir y eliminar las muertes de trabajadores en las carreteras como parte del Camino a Cero del Consejo Nacional de Seguridad.
Los empleadores deben comprometerse con la seguridad vial y de los vehículos de trabajo y comunicar ese compromiso a los empleados en todos los niveles de la organización. Los empleadores deben demostrar ese compromiso asignando tiempo y recursos presupuestarios a la seguridad vial y de los vehículos de trabajo.
Los empleadores deben realizar una evaluación de riesgos para identificar los posibles peligros asociados con los conductores, los vehículos y las carreteras y determinar los pasos a seguir para eliminar o reducir dichos peligros. Los empleadores deben identificar las leyes locales, estatales y federales que se aplican a su lugar de trabajo. A partir de la evaluación de riesgos y la revisión de las leyes aplicables, los empleadores deben desarrollar, difundir, mantener, revisar y actualizar políticas y procedimientos escritos con el aporte de los gerentes y los empleados que cubran lo siguiente:
- Formación de conductores: formación inicial y continua
- Mantenimiento de vehículos – operador y organización
- Operaciones seguras del vehículo: velocidad, conducción
defensiva
- Uso del cinturón de seguridad
- Conducción distraída, somnolienta y bajo los efectos del alcohol
- Procedimientos de notificación de accidentes
- Procedimientos en caso de fallos mecánicos
Los empleadores deben establecer un programa de capacitación para conductores que sea específico para los vehículos que se espera que conduzca el empleado. El cumplimiento del programa de capacitación para conductores es un indicador principal en la prevención de accidentes de tráfico relacionados con el trabajo. La capacitación periódica de actualización es útil para evitar la autocomplacencia del conductor y mantener el enfoque en los principios de conducción segura.
Además de la capacitación general sobre seguridad, también existen algunas circunstancias que requieren capacitación especializada adicional. Esto podría incluir una capacitación más prolongada sobre vehículos combinados, capacitación sobre materiales peligrosos y capacitación sobre sospechas razonables para supervisores. Según el contenido de la carga, el tipo de vehículo o el puesto específico que ocupa una persona, es posible que se requiera capacitación adicional según lo exija la Administración Federal de Seguridad de Autotransportistas (FMCSA).
Los empleadores deben asegurarse de que todos los empleados tengan la licencia correspondiente para el tipo de vehículo que se espera que conduzcan. Puede resultar útil contar con un sistema de seguimiento de las fechas de vencimiento de las licencias de conducir para garantizar que los conductores de la empresa no conduzcan vehículos con una licencia vencida.
Un programa integral de mantenimiento preventivo con revisiones y servicios programados ayuda a garantizar que los vehículos de trabajo permanezcan en condiciones seguras de funcionamiento.
El cumplimiento de las revisiones y el programa de servicios de mantenimiento preventivo es un indicador clave para la prevención de accidentes de vehículos relacionados con el trabajo.
Los empleadores deben implementar y hacer cumplir políticas de uso obligatorio del cinturón de seguridad. El cumplimiento de la política de uso del cinturón de seguridad es un indicador principal en la prevención de lesiones y muertes relacionadas con la conducción en el lugar de trabajo.
Los empleadores deben revisar sus procedimientos operativos para asegurarse de que no provoquen ni contribuyan a las distracciones al conducir. Por ejemplo, los sistemas y procedimientos para despachar y redirigir vehículos tienen el potencial de causar distracciones cognitivas, visuales y manuales que pueden causar o contribuir directamente a una colisión de vehículos.
Los empleadores deben asegurarse de que las cargas de trabajo y los horarios laborales permitan a los empleados conducir a una velocidad segura y obedecer las normas aplicables sobre horas de servicio. Los empleadores deben tener un sistema implementado para garantizar que los empleados reciban información sobre obras o cierres de carreteras, malas condiciones de las carreteras o cualquier otro peligro en la carretera.
Al comprar, alquilar o arrendar vehículos de la empresa, los empleadores deben buscar vehículos con altas calificaciones de seguridad basadas en pruebas de choque y con características de seguridad como sistemas de advertencia de cambio de carril, sistemas de advertencia de colisión, cámaras orientadas hacia atrás y control de crucero adaptativo. Los empleadores pueden considerar la posibilidad de utilizar un sistema de monitoreo en el vehículo (IVMS, por sus siglas en inglés) para reducir el riesgo de accidentes. Estos sistemas están diseñados para mejorar el desempeño de los conductores al identificar conductas de conducción riesgosas para su autocorrección y para que los supervisores los utilicen para capacitar a los conductores e identificar problemas en toda la flota.
Un estudio del NIOSH concluyó que un IVMS con retroalimentación del conductor en el vehículo y capacitación de supervisión complementaria mediante videos orientados al conductor y hacia afuera condujo a una disminución significativa de las conductas de conducción riesgosas en general y una disminución de la conducción sin cinturón de seguridad en comparación con un grupo de control de conductores. Si se va a utilizar un IVMS, es importante explicar a los trabajadores por qué se está implementando el IVMS y cómo funcionará.
Los empleadores deben establecer un proceso de investigación de accidentes. Todos los accidentes, independientemente de su gravedad, deben notificarse al supervisor del empleado lo antes posible después de un incidente. Todos los accidentes deben revisarse para determinar su causa raíz y qué se puede hacer para evitar que vuelvan a ocurrir. La revisión del accidente debe incluir una determinación de si es necesario realizar algún cambio en las políticas o prácticas para prevenir accidentes futuros. Comprender las causas raíz de los accidentes constituye la base para reducir el riesgo de recurrencia.
La seguridad y salud en el trabajo son responsabilidad de todos, así que debemos tomarlo en serio. Contáctenos si tiene preguntas o quiere presentar una queja. La información que nos dé será tratada confidencial. Estamos aquí para ayudar. Llame a nuestra línea directa al 623-OSHA (6742) o 299-0300 ext. 2163 o fax al 623-5905 o al 653-6563.