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LES PEGA VIRUS

  • Por: JUAN GILBERTO BANDA REYES
  • 21 MAYO 2020
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LES PEGA VIRUS

En mi entrega del martes les comenté que tenía la punzada que el COVID-19 estaba embuchacando a la clase política de dos que tres masticadas y que incluso hasta al presidente ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR le había dado sus tarascadas.

La percepción del columnista encontró su apoyo en una encuesta que me llegó, y fue la de Mitofvski, una firma ampliamente conocida que cuando tiene resultados favorables para los políticos, éstos la presumen, pero cuando es al contrario la desdeñan, algunos llamándole Mentiroski, o sea, como dicen en el rancho: cada quien habla de la feria según le fue en ella.

Pero independientemente de esas subjetividades vale la pena atender el resultado de la consultora, sobre todo por la clase política gobernante, ya que los indicadores dibujan un panorama nada halagüeño en cuanto a la opinión pública, que no somos los analistas y comentaristas de la política sino la ciudadanía, que en todo caso lo que piense de los gobernantes es lo que debe preocuparles.

El caso es que la encuesta inquirió sobre diversos aspectos del COVID, como a qué le tienen más miedo, si a encerrarse o a perder el empleo, o si la inseguridad sigue siendo la principal preocupación o qué nivel de confianza les inspira el nivel hospitalario. Pero en lo que a tema político se refiere evaluaron cómo la gente cree que se desempeñan las instituciones frente al COVID-19 y en la tabla de la encuestadora aparece en primera posición el subsecretario de Salud, HUGO LÓPEZ GATELL, a quien la ciudadanía considera que en un 55.4 por ciento está haciendo bien las cosas; un 19. 2 por ciento que lo está haciendo regular y un 24.7 por ciento que lo está haciendo mal. O sea que, para la gente, el gobierno federal tiene un buen nivel de aprobación. También evaluaron diversas instituciones, pero me llevaría toda la columna así que solo referiré la medición de gobernadores y alcaldes.

En el caso de los gobernadores, el porcentaje que registraron fue que para la gente están haciendo bien las cosas, un 25.7 por ciento; que las están haciendo regular, 33.9 por ciento; y mal, un 40 por ciento, mientras que los alcaldes fueron calificados como estar haciendo bien las cosas, un 22.2 por ciento; y regular, 37.5 por ciento, mientras que los que los reprobaron, 39.4 por ciento.

En términos generales, gobernadores y alcaldes registran porcentajes casi iguales en cuanto a que ahí más o menos la llevan en su desempeño frente al COVID-19, pero van a tener que trabajar más intensamente ante el inocultable hecho de que el número de contagios y decesos sigue en ascenso, aunque en Tamaulipas altiva y heroica, a cuenta gotas, tan así que la doctora GLORIA MOLINA, secretaria de Salud en el Estado, dio a conocer que los hospitales de la entidad están operando a un 13 por ciento de su capacidad. Se trata de una noticia alentadora pero que la gente no la puede tomar como señal de que ya podernos lanzarnos a la calle y a la bullanga. Eso es algo que hacerlo en estos días podría meternos en severos problemas de salud. En pocas palabras, la medición de Mitofvski vino a robustecer mi impresión de que el COVID-19 está demeritando a la clase política y de ahí que van a tener que echarle más ganas.

Por otra parte, surgen noticias alentadoras en lo que respecta al futuro económico.

La Cámara de Comercio en nuestra querida Reynosa dio a conocer que Wal-Mart proyecta invertir en México y Centroamérica poco más de 20 mil millones de pesos. Lamentablemente en esa inversión no está incluida nuestra querida Reynosa.

Recordarán mis lectores que en 2015 la tienda que esa cadena comercial tenía en esta ciudad se incendió y a la fecha no se sabe si fue imprudencial o intencional ese hecho. Los que sí lo han de saber son los ejecutivos de Wal-Mart de México, pero a la fecha no han dicho esta boca es mía.

El caso es que se fue de Reynosa una buena inversión por la incertidumbre, como también huyó de por aquí otra firma comercial, Chedraui, que a esta no incendiaron sus instalaciones, pero entre que gente bastante sospechosa agarró el estacionamiento de ese macro centro comercial para llevar a cabo reuniones y que el intenso tráfico vehicular por su entorno le ocasionó problemas de conectividad, Chedraui no pudo afincarse por estas tierras. Dijeron que iban a regresar, pero a la fecha no lo han hecho y ahí está el inmueble de esa tienda como monumento al fracaso comercial que propicia la inseguridad en nuestra querida Reynosa. Pero regresando a noticias buenas, la cervecería Modelo también anuncia una inversión de poco más de 14 mil millones de pesos.

Como seguramente lo sabrán mis lectores, esta firma hoy en día pertenece a una compañía extranjera pero que se ve le sigue apostando a México, tan así que a partir de septiembre en los envases aparecerá inserto el nombre de México. Las inversiones del grupo Modelo y Wal-Mart echan por tierra las bravatas de la comentocracia en el sentido de que los inversionistas no quieren saber nada de México por culpa de López Obrador.

En lo personal nunca me ha parecido lógico y racional tales afirmaciones porque como me decían los profesores cuando estuve en la escuela preparatoria en la materia de economía, que lo que para unos ya no es negocio, para otros sí lo es y en el terreno práctico lo hemos venido viendo. Kimberly de México reiteradamente anunció que se iba a ir. En cuanto supo que Scribe estaba más puesto que un calcetín para entrarle al negocio de papel sanitario, se olvidó de las bravatas. Lo mismo le pasó a Bimbo, que también amagaba con retirarse de México, algo que hizo se frotara las manos de contento el poderoso grupo Maseca. Su negocio es el maíz, pero tiene rato de quererle entrar al trigo. No lo hace por los pactos comerciales, pero si uno se va, obvio que el otro le entra.

Lo mismo está pasando con los productores de energía eólica. Andan enfurecidos, pero no es divulgando mentiras como van a resolver sus problemas, entre otras, que el gobierno suspendió la producción de electricidad con energía eólica porque no haya donde acomodar los excedentes de combustóleo que no tienen demanda hoy en día en el mercado global y por lo mismo los está utilizando en la Comisión Federal de Electricidad, una afirmación que se fue por los suelos cuando la CFE dijo que de todas sus plantas de producción de electricidad solamente una opera con combustóleo, las demás lo hacen con gas.

También está trascendiendo que se autorizaron parques eólicos para producir electricidad, pero para venderla solamente a la IP, que al parecer por esos tradicionales trafiques a la hora de la hora modificaron los contratos y salieron que también la podían vender al gobierno y ahí es donde se atoraron. En ese sentido, a AMLO a terco no hay quien le gane.

Y por hoy, BASTA.

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