La transformación en números

Dicen que "nadie es profeta en su tierra"; esa y otras limitaciones le han resultado sobrantes a HUMBERTO PRIETO HERRERA, como bien se vio en el reciente encuentro sostenido con los periodistas de Reynosa.

La 66 Legislatura Local ha hecho su debut rompiendo récords que, hasta hace poco, parecían inalcanzables, repasó con ellos a la luz de los hechos consumados e irrefutables. 

En solo un mes, los nuevos legisladores han celebrado 13 sesiones plenarias, un ritmo que desafía la tradición de la escasa actividad legislativa del pasado prianista. 

Este arranque no solo es un símbolo de dinamismo, sino un claro mensaje de que la transformación es posible, dentro y desde el Poder Legislativo, hacia todos los ámbitos de la vida pública doméstica, y allende nuestras fronteras.

Las 83 reuniones en que han participado las comisiones permanentes, son otra muestra de un compromiso inusitado. 

Antes, las sesiones plenarias eran esporádicas y limitadas, regularmente de a una por semana; hoy, los legisladores han decidido estar en constante diálogo, buscando atender las necesidades de la ciudadanía. 

Este nuevo enfoque podría ser la clave para transformar la percepción del Congreso, de un ente distante a uno accesible y proactivo, como de hecho se ha estado manifestando con intensidad en los tiempos recientes.

El contexto en que se desarrolla este esfuerzo no es menor. Tamaulipas ha sido parte activa de un proceso transformador federal, sumándose a diez reformas constitucionales en otro tiempo récord. 

Esto no solo posiciona al estado como un actor relevante en la política nacional, sino que también pone de manifiesto un deseo de modernización y adaptación a los nuevos tiempos.

Las reformas aprobadas, desde donaciones de predios para obras de infraestructura que responden a clamores sentidos, hasta modificaciones en leyes medioambientales, de educación y salud, son pasos concretos hacia un desarrollo social integral, liderado en el estado por el Gobernador AMÉRICO VILLARREAL ANAYA, alineado con los postulados de la Presidenta CLAUDIA SHEINBAUM. 

La atención a los impuestos prediales sin incrementos, es otro gesto en los afanes de la intensa agenda legislativa de arranque, que podría aliviar la carga fiscal de muchas familias. 

En tiempos de incertidumbre económica, estas acciones son más que bienvenidas y se insertan con la puntualidad que se amerita, en el compromiso incansable de los legisladores locales, en general.

No obstante la agenda de temporada, el reto mayor a los ojos del conglomerado, radica en deshacerse de las ataduras del pasado obscuro, cuyo entramado ha inhibido la celeridad con la que podría estar avanzando la entidad. 

Por eso la elección de nuevos funcionarios en áreas clave como la Auditoría Superior y la Fiscalía Anticorrupción, cuya función, retraída mientras permanecieron enquistados los rescoldos del pasado tortuoso, es fundamental para recuperar la confianza ciudadana y retomar el paso institucional. 

La eliminación del voto de los ayuntamientos para reformas constitucionales, también era un cambio necesario que permitirá un avance más ágil en la legislación, puesta al servicio de los intereses superiores de los tamaulipecos.

HUMBERTO PRIETO HERRERA, como Diputado Presidente, ha dejado claro que el objetivo es ser un congreso fuerte, reconocido por su trabajo y por su cercanía con la ciudadanía. Este enfoque es vital para construir un vínculo sólido entre el poder legislativo y la sociedad. 

La casa del pueblo, siempre debió ser un espacio donde las voces de los tamaulipecos se escucharan y tradujeran en acciones concretas; ya lo está siendo, como vemos.

Este primer mes es solo el comienzo de un camino que, esperamos, estará lleno de logros y avances, en cuyo sentido pareció extender garant´íias ayer el diputado Presidente. 

El verdadero éxito de esta legislatura no se medirá solo en números, sino en la capacidad de generar cambios palpables en la vida cotidiana de los tamaulipecos; lo que de inicio se ha concretado y promete, con mucho, rebasar las expectativas creadas. 

La 66 Legislatura tiene la oportunidad de hacerlo y ya está haciendo historia.

Hoy, en calidad y cantidad, los resultados resultan elocuentes.