LA TRAMPA DE LA PORNOGRAFÍA

La pornografía ha existido desde hace siglos, pero ahora la facilidad de acceder a ella por medio del internet hace que muchos caigan en la tentación de entrar en sitios enfocados en toda clase de perversiones sexuales.

Lo que comienza por curiosidad puede terminar en una obsesión compulsiva que puede hasta arruinar la vida y el trabajo de una persona al ser descubierta, o incluso llevarlo a su ruina moral si se deja llevar por los comportamientos observados en dichos sitios o portales del internet.

Desgraciadamente muchas caen en la trampa de la pornografía sin saber que es como cualquier otra adicción. 

El Dr. Jeffrey T. Parsons, experto en adicciones sexuales y profesor de psicología en el Hunter College de la ciudad de Nueva York, explica que las adicciones sexuales todavía no están calificadas como una enfermedad mental, según el Manual de Diagnóstico y Estadísticas de Desórdenes Mentales (Diagnostic and Statistical Manual of Mental Disorders), aunque en la próxima edición de dicho manual los expertos quieren que se anexe un capítulo explicando claramente los casos de hipersexualidad en algunos individuos para que se catalogue esta conducta como un desorden, pues dichos individuos se dejan llevar por la adrenalina y la euforia cegadora que los invade cuando se encuentran en estado de excitación sexual, y claramente siguen el patrón de comportamiento de un adicto, ya sea a las drogas, al juego de apuestas, o cualquier otro comportamiento compulsivo.

Cuando una persona reconoce que no sabe porque actúa en contra de su propio bienestar debe buscar ayuda psicológica que le permita a reconocer las causas que lo llevaron a actuar de esa manera auto-destructiva, de qué forma puede evitarla en un futuro y sobre todo como recuperar la confianza qué su familia le ha perdido debido a sus "locuras".

Aunque el poseer material pornográfico, ya sea impreso o virtual, no es un delito cuando las partes involucradas son adultas, si es contra la ley cuando involucre a menores de edad, por supuesto es penado con muchos años de cárcel el poseer y retrasmitir pornografía infantil.

Hay casos escandalosos que involucran a adultos, que ocupan puestos de liderazgo, que están perfectamente consientes que si son descubiertos ponen en riesgo su matrimonio y seguramente avergonzaran a toda su familia, donde es casi imposible comprender el por qué lo hacen a menos que se considere a ese individuo como un "enfermo", un adicto que no mide las consecuencias de sus actos.

Hay que ser cautos y precavidos al usar las nuevas tecnologías, pues tu puedes estar confiado "platicando" o mandando textos, sin tener una idea clara de cómo serán usados y por quien, pues si las cosas no son cómo parecen en la vida real, en el mundo virtual de la internet son claramente confusas y fácilmente usadas en tu contra. Ten presente que la pornografía es una trampa de la cual es muy difícil salir.

Vive un día a la vez! ... ignite the moment!...Y recuerda que Dios te ama y yo también. 

Msgr. Juan Nicolau, Ph. D. STL. Sacerdote jubilado de la Diócesis de Brownsville. Es psicoterapeuta familiar y consejero profesional con licencias.Vive un día a la vez! ... ignite the moment!...Y recuerda que Dios te ama y yo también.

Mons. Juan Nicolau, Ph.D. STL. Sacerdote jubilado de la Diócesis de Brownsville. Es psicoterapeuta familiar y consejero profesional con licencias.